Ignacio Gómez
Title
Ignacio Gómez
Description
Biographical Synopsis of Interviewee: Igancio Gómez was born on January 14, 1936, in Michoacán, México; his father died when he was an infant, and his mother later died when he was twelve years old; as the eldest of three children, he began working in the fields when he was only ten; in 1959, the local government officials sent him to the processing center in El Centro, California; as a bracero, he worked in Arizona, California, and Wisconsin, picking beets, cotton, lettuce, and tomatoes; he continued working as a bracero until 1964.
Summary of Interview: Mr. Gomez briefly relays his experiences during childhood and adolescence; he initially learned of the bracero program through his grandfather because the local government officials had contacted him about possible workers; later when Ignacio was eighteen, he was put on the county’s list of eligible workers, and he was sent to El Centro, California; in order to be hired, he had to be healthy, have a working knowledge of the various equipment needed for farming, and specific details about how to carry out particular jobs; in addition, he describes the hiring process, including the interview, medical exams, and delousing procedures; he comments that he never had a choice of where to go or how long to stay, he was only there to work; as a bracero, he worked in Arizona, California, and Wisconsin, picking beets, cotton, lettuce, and tomatoes; while working in Wisconsin, he recalls a particular incident when the workers were given laxatives so that they would not have any problems with the food they were given, but instead they all became very sick; he was then hired as the camp cook, and he goes on to describe the various kinds of food he made and the number of people he had to cook for; in addition he details what daily life was like in general for the workers, methods of payment, living accommodations, and what they did in their spare time; he concludes by discussing the overall advantages and disadvantages he experienced working as a bracero.
Summary of Interview: Mr. Gomez briefly relays his experiences during childhood and adolescence; he initially learned of the bracero program through his grandfather because the local government officials had contacted him about possible workers; later when Ignacio was eighteen, he was put on the county’s list of eligible workers, and he was sent to El Centro, California; in order to be hired, he had to be healthy, have a working knowledge of the various equipment needed for farming, and specific details about how to carry out particular jobs; in addition, he describes the hiring process, including the interview, medical exams, and delousing procedures; he comments that he never had a choice of where to go or how long to stay, he was only there to work; as a bracero, he worked in Arizona, California, and Wisconsin, picking beets, cotton, lettuce, and tomatoes; while working in Wisconsin, he recalls a particular incident when the workers were given laxatives so that they would not have any problems with the food they were given, but instead they all became very sick; he was then hired as the camp cook, and he goes on to describe the various kinds of food he made and the number of people he had to cook for; in addition he details what daily life was like in general for the workers, methods of payment, living accommodations, and what they did in their spare time; he concludes by discussing the overall advantages and disadvantages he experienced working as a bracero.
Creator
Loza, Mireya
Gómez, Ignacio
Date
2005-07-28
Subject
Bracero
Contributor
Cristóbal Borges
Rights
Institute of Oral History, The University of Texas at El Paso
Language
spa
title (Spanish)
Ignacio Gómez
creator (Spanish)
Loza, Mireya
contributor (Spanish)
Cristóbal A. Borges
Rights Holder
Institute of Oral History, The University of Texas at El Paso
Interviewer
Loza, Mireya
Interviewee
Gómez, Ignacio
Location
Salinas, California
Transcription
Nombre del entrevistado: Ignacio Gómez
Fecha de la entrevista: 28 de julio de 2005
Nombre del entrevistador: Mireya Loza
ML: SÃ, gracias, muchas gracias. Le iba a decir que es algo muy especial para mà porque sigo trabajando en este proyecto y no tengo… Yo como no fui bracero yo, no tengo nada.
IG: Es algo especial esto porque ahà está diciendo no con palabras…
ML: SÃ.
IG: Los tratos que recibimos.
ML: Déjeme acomodar esto aquà bien pa que se grabe bien. DÃgame su nombre.
IG: Ignacio Gómez.
ML: ¿Dónde y cuándo nació usted?
IG: Yo nacà en Michoacán el 1, 14 de [19]36.
ML: Y hábleme de su familia y el lugar donde nació.
IG: Mi pueblo se llama Chavinda, Michoacán. Conocà a mi padre yo muy poco porque fui huérfano de padre, a los doce años fui huérfano de madre también.
ML: Y, ¿tiene usted hermanos?
IG: Tengo dos hermanos, un hermano hombre y una hermana mujer. Yo soy el mayor de ellos.
ML: ¿A qué se dedicaban sus padres?
IG: Mi padre era campesino y mi mamá al hogar.
ML: ¿Dónde viven sus hermanos y hermanas ahora?
IG: Mi hermano vive en Los Ãngeles y mi hermana también vive en Los Ãngeles.
ML: Hábleme de cuando fue a la escuela, ¿usted fue a la escuela?
IG: Nunca fui a la escuela, yo hace aproximadamente siete años fui a la escuela aquà en Salinas, en la escuela de adultos. Ahà aprendà un poquito a leer, a escribir, a hacer matemáticas.
ML: Y, ¿cuántos años tenÃa usted cuando empezó a trabajar?
IG: Cuando yo empecé a trabajar pos más o menos alrededor de diez años.
ML: Cuénteme de su primer trabajo.
IG: Mi primer trabajo fue en México cuando éramos jóvenes nosotros, habÃa un trabajo que se nombraba levantar mata de maÃz, sembraban, se sembraba en las labores y se nombraba a levantar mata. Levantábamos mata, el maÃz cuando pasaban aquà escardaban, uno levantaba las matitas que se tapaban de tierra, porque el arado tapaba las matas de tierra. Sembrábamos frijol, sembrábamos maÃz, todo esto hice yo. Ya cuando mi madre murió, yo regaba también ya en una parcela que tenÃamos de maÃz, de jitomate, todo eso hacÃa yo ya. Yo trabajaba ya de doce años, ya era como un adulto, trabajaba mucho, trabajé mucho.
ML: ¿Cómo se enteró usted del Programa Bracero?
IG: Mandaban, por ejemplo, de las ciudades grandes a las rancherÃas o a los pueblos pequeños algunas listas a los presidentes municipales y el presidente municipal hablaba con las personas que en si eran de los más pobres o personas que eran más conocidos de los presidentes y ya cada uno nos daba a saber que habÃa un lugar para si querÃamos venir a Estados Unidos. Por ejemplo en mi caso fue a mi abuelito al que le dieron a saber un número si querÃa venir a Estados Unidos, pero él estaba mayor y yo en ese tiempo era un joven de dieciocho años. Y ya él me dijo que si yo querÃa venir, habÃa la oportunidad. Y asà fue como yo vine a dar aquà a Estados Unidos.
ML: Y, ¿estaba usted casado?
IG: No.
ML: ¿No? ¿Alguna vez llegó a pensar en trabajar en los Estados Unidos antes de aquella época?
IG: No.
ML: ¿No?
IG: Nunca.
ML: ¿Por qué decidió irse a los Estados Unidos?
IG: Bueno, en todos tiempos ha habido mucha pobreza en México, pero hay de pobres a pobres. Yo era pobre de dinero, pobre de qué comer, de qué vestir, pero rico en salud porque, bendito sea Dios, nunca fui enfermo. Y yo en ese tiempo vine aquà a Estados Unidos, hay que decir las cosas tal y como son. Tuvimos muchos problemas aquà cuando entramos a Estados Unidos, tuvimos muchos problemas aquà cuando trabajamos en Estados Unidos. Primero que nada era una cultura diferente a la de nosotros, era una comida diferente a la de nosotros, eran unas personas diferentes a las de nosotros, pero tuvimos malas experiencias, pero también entre ellas tuvimos buenas experiencias porque primero que nada, nos enseñamos un poco a saber de la cultura de los americanos. Aprendimos, el dinero que ganamos en Estados Unidos nos sirvió para mandarle a nuestras familias y también hay que hablar de ello, no simplemente de las malas experiencias que tuvimos. Porque también entre ellas tuvimos la experiencia de mandar un dinero a nuestras familias en México para que ellos se sintieran… Comer mejor, vestir mejor y vivir mejor el tiempo que estuviéramos aquà en Estados Unidos.
ML: Describa el proceso de contratación, ¿cómo fue?
IG: A cada uno de nosotros se nos dio un documento que para firmar, pero algunos firmamos con lápiz y otros pusimos una huella porque no sabÃamos escribir. Hubo una lista, la gente se venÃa por medio de una lista. En esta lista venÃa el nombre de cada persona de nosotros.
ML: ¿Cómo es que ponÃan su nombre en la lista?
IG: SÃ, hacÃan en una hoja de papel hacÃan, ponÃan una lista de cada persona que este presidente municipal nos habÃa dado la facilidad de venir a los Estado Unidos. Entonces, ya cuando… HacÃan una lista de cuántas personas eran las que iban a venir aquà a Estados Unidos de ese municipio. Entonces venÃa una lista, esta lista venÃa a dar a El Centro, California y ahà en El Centro, California, ahà nos recibÃa el Gobierno de los Estados Unidos, La Inmigración. Y ya de allà Ãbamos a, nos mandaban a unas asociaciones que habÃa y ya de allà de esas asociaciones, ya nos mandaban a los rancheros o iban los rancheros por nosotros. Cuantas personas querÃa cada ranchero, esas personas llevaba ahà de La Asociación donde estábamos.
ML: Y, ¿qué requisitos debÃan cumplir para ser bracero?
IG: Bueno y ser unas personas que pudieran trabajar en el campo, en el field, ser unas personas que estuviéramos bien de salud, ser unas personas que supiéramos trabajar en los caminos, trabajar en los rieles del tren, o sea con los rieles del tren, saber usar un azadón, saber usar un cuchillo, saber usar un marro porque también con eso se trabajaba, saber usar unas llaves para los tornillos. Saber todo esto, eso era parte del requisito y venir de toda voluntad a trabajar y obedecer a nuestros mayordomos.
ML: ¿Qué tenÃan que hacer para demostrar que reunÃan todos los requisitos?
IG: Bueno, allà nos hacÃan muchas preguntas. Primero que nada, habÃa una persona que nos hacÃa preguntas, qué sabÃamos hacer en nuestro paÃs, en qué trabajábamos en nuestro paÃs. Siempre nos, médicamente habÃa doctores ahà que nos estaban examinando. Era parte del contrato que habÃa con los gobiernos.
ML: ¿Hubo algún examen fÃsico?
IG: SÃ. Y por ejemplo cuando entrábamos, siempre nos tomaban con aparatos para ver si estábamos enfermos de los pulmones, de los ojos, de los riñones, de las manos, de los brazos, de las piernas, de los ojos. Siempre nos hacÃan chequeos completamente. Pero de todo ello, lo más triste es que nos fumigaron como si hubiéramos sido una manada de ganado, de chivos, de puercos, de perros y ésa fue la mala experiencia que yo tuve y que yo tengo que decir que fuimos humanos, somos humanos. Que dónde estaban los derechos humanos en ese tiempo, que nuestro Gobierno no nos defendió, porque los malos tratos para mà fueron esos, malos tratos, malas experiencias. Y yo no presto a una burla de nosotros porque no puedo nombrarlo, ni justificarlo que esto haiga sido o que esto sea normal o humano, que nos haigan tratado como animales. Por falta de nuestro Gobierno y falta de derechos humanos y aquà se mofan de decir de hablar de los derechos humanos, pero pa nosotros fue mentira.
ML: ¿Cuándo es que vino por primera vez?
IG: La primera vez vine yo en el 1959, entonces entré a Estados Unidos.
ML: ¿Qué le dijeron las autoridades, ya sean mexicanas o norteamericanas, que podÃa esperar de su trabajo?
IG: Simplemente nos pusieron a firmar el contrato y el permiso que tenÃamos. Nunca nos pidieron que esperaban de nosotros mucho o que esperaban poco, simplemente lo llevaban a trabajar y eso era todo.
ML: ¿Le informaron las autoridades algo acerca de su salario, condición de vida, alimentos o transportación?
IG: Bueno, a cada uno de nosotros nos decÃan qué iba a ser la transportación, qué iba a ser el alimento que tenÃamos, mas no nos podÃan mostrar. Ãbamos a tener alimentos, Ãbamos a tener transportación, Ãbamos a tener un lugar dónde dormir. Pero eso era todo lo que hablaban con nosotros. Primero que nada nosotros no entendÃamos su lengua de ellos y pues siempre nos cargaban asÃ.
ML: ¿De qué forma viajó usted del lugar de reclutamiento al centro de recepción en los Estados Unidos?
IG: De México viajamos en el tren. Allà también fue otra parte que tuvimos la mala experiencia, porque no venÃamos en un tren de primera, ahà también venÃamos como las vacas. (risas) En vagones venÃamos para acá y de ahà ya nos bajó a, ya nos bajaron a la entrada de Estados Unidos. Entramos ya, cuando entramos ya Estados Unidos fue cuando nos fumigaron.
ML: ¿Qué pasó cuando estuvo en el centro de recepción en los Estados Unidos, qué pasaba ah�
IG: Bueno pues allà hubo, hubimos muchas personas. Allà hubimos bastantes personas y ahà fue donde nos fumigaron, donde nos leyeron nuestros documentos, nos leyeron lo que Ãbamos a hacer, nos leyeron dónde Ãbamos a vivir, ahà nos leyeron toda, como se dice la cartilla.
ML: Y, ¿tuvo usted alguna opción para escoger entre el tipo de trabajo, duración de empleo y salario?
IG: No, nunca tuvimos nosotros la opción esa porque nosotros venÃamos a trabajar, no sabÃamos de salario, no sabÃamos de qué trabajo Ãbamos a hacer, no sabÃamos nada. Nosotros venÃamos a trabajar como un burrito.
ML: ¿Ni del lugar donde…?
IG: Nada, no sabÃamos nada.
ML: ¿Se le permitÃa tener con usted algunos objetos personales?
IG: Todo lo que podÃamos tener, por ejemplo, bueno ya cuando estábamos dentro del lugar donde Ãbamos a vivir, ya nos permitÃan tener un rastrillo, tener jabones, tener algo personal.
ML: ¿Pero cuando estaba cruzando?
IG: No.
ML: ¿Qué es lo que tenÃa usted con usted, con su persona?
IG: Pues no traÃamos nada, traÃamos algún cambio de ropa, era lo único que traÃamos.
ML: ¿Cuántos años trabajó usted oficialmente como bracero en los Estados Unidos?
IG: Trabajé cuatro años, oficialmente cuatro años.
ML: Y, ¿en dónde trabajó durante esos cuatro años?
IG: La primera vez que entré yo a trabajar, entré a Blythe y luego de Blythe, de ahà nos cambiaron a Brawley, luego de Brawley fuimos a dar para Arizona, a Avondale, Arizona, luego de ahà fuimos a dar a Wisconsin, que es, los estados pegados con Michigan, ahà terminé yo mi contrato.
ML: ¿En qué año?
IG: En el 19[64]. Ahà terminé mi contrato. Ya de ahà nos mandaron para México, a muchos de nosotros nos quitaron la mica de blanco y negro. A mà me quitaron la mica y entonces ya no podÃa, ya no traÃa nada, no tenÃa nada, ningún documento.
ML: ¿Qué tipo de trabajo hacÃan en estos lugares?
IG: Bueno, cuando llegué a Blythe ahà fui a piscar algodón, luego de ahà que fui a Brawley allá vinimos a la escarda, habÃa un trabajo que era un trabajo que siempre la gente le tenÃa miedo, o le tenÃamos miedo a ese trabajo. El simple hecho de la palabra, y le voy a decir porque asà se decÃa, venÃamos al desmadre, era al betabel, era a escardar el betabel y eso era el nombre de ese trabajo porque era muy duro. Como trabajábamos con el cortito que se dice hoy y se decÃa en ese tiempo, asà que estábamos todo el dÃa, doce horas, trece horas agachados, por eso era el nombre de ese trabajo. Después ya la compañÃa donde yo trabajé este trabajo, nos dio la facilidad de ir con otro patrón a la lechuga. Que era lo mismo, el desahije de la lechuga, la limpia de la lechuga, a cortar lechuga y a hacer los trabajos de lo que es la lechuga. De allà nos fuimos para Arizona, Arizona trabajé mucho tiempo y luego de ahà regresamos otra vez a Brawley y de Brawley ya nos fuimos a Wisconsin a lo mismo, a la lechuga. Me gustó mucho a mà el trabajo este de la lechuga, supe hacerlo, aprendà a hacerlo y aquà terminamos. Últimamente vine al tomate aquà a Greenfield y aquà terminé mi contrato en Greenfield.
ML: Hábleme de los otros braceros que trabajan con usted, ¿hizo algunas amistades duraderas?
IG: A veces uno en la vida encuentra buenas amistades, malas amistades, unas amistades que nos hablamos, nos platicamos, pero no tan profundo como encontramos unos amigos. Yo encontré un amigo que nos hicimos muy amigos con este señor, él cuando vino ya era un hombre casado, tenÃa dos niños. Este señor se jugaba su cheque en los dados, este señor era borracho, dejó de mandar el dinero a su familia y cada dÃa de cheque él apostaba su cheque completo y el dÃa que ganaba, se la llevaba pagando lo que perdÃa en semanas anteriores o en quincenas anteriores. Y asà duramos dos años trabajando en la misma compañÃa. Y un dÃa le pedà un dinero prestado a este amigo mÃo y me prestó dinero porque ganó. Y ya cuando me prestó el dinero, hice una carta porque yo sabÃa, éramos muy amigos, yo sabÃa cómo se llamaba su esposa, sus hijos, sabÃa su dirección y compré un money order y le mandé a su esposa el dinero que él me prestó. Tranzas, ¿verdad? Pero después la señora le contestó diciéndole gracias que otra vez se acordó de ella y le mandó dinero a sus hijos. Pero para ello él me dijo: “Oyeâ€, dijo, “me escribió mi esposa y me dijo que graciasâ€, dijo, “¿le escribiste?â€. Y le dije: “SÃâ€. Sintió el hombre, de momento se sintió mal, se salió y se fue a, se tomó unas cervezas y regresó y ya me dijo: “¿Sabes qué? Te agradezco lo que hiciste por mÃâ€. Y ése sà era mi amigo.
ML: ¿Tuvo otros amigos?
IG: Pues sÃ, tuve más amigos pero no, no llegamos a la misma confianza que este muchacho. Dejó de tomar, dejó de jugar, mandó su dinero para México.
ML: Qué bueno. ¿TenÃa usted mucho contacto con sus patrones en los varios sitios donde trabajó?
IG: Con los patrones no, con mis mayordomos sÃ. Bueno, a mà me ha gustado siempre ser una persona amistosa y yo tuve un supervisor también que fuimos muy amigos después de que era mi supervisor. Éramos amigos con él, me invitaba a su casa, me invitaba a comer, me invitaba a eso, no a tomar porque yo no fui borracho y yo no fui borracho y no, nunca fuimos a las cantinas, pero sà me invitaba. Mi mayordomo, tuve un mayordomo también que conmigo también fue muy buena persona. Pero con mis patrones solamente cuando estuve en Wisconsin allà sà nos hicimos amigos con un hijo del patrón y fuimos amigos. Ellos querÃan que yo me quedara con ellos allà en su rancho, pero la compañÃa con la que yo trabajé, no me dieron permiso de quedarme porque yo querÃa las cosas legales, no desertarme de la compañÃa, yo querÃa las cosas legales. Y yo me vine, nos venimos aquà a California y el muchacho vino hasta acá por mÃ. TenÃan ellos un aeroplano y vino hasta aquà y ya cuando llegó aquà donde yo estaba, yo ya me iba para México, nos hicimos muy amigos con este muchacho.
ML: Y, ¿usted sigue en contacto con la gente que, con sus amistades que hizo durante ese tiempo?
IG: No, porque estos, bueno, eran ellos de distintos lugares. No pudimos, no pudimos tener comunicación porque ellos se fueron para sus estados y yo me fui para el mÃo y no tuvimos comunicación ya después.
ML: ¿Usted tuvo mucha comunicación durante ese tiempo con su familia?
IG: Con la mÃa sÃ, siempre tuve mucha comunicación con ellos porque después de que yo era huérfano, siempre creà en la familia y sigo creyendo en la familia.
ML: ¿Se escribÃan cartas o por teléfono?
IG: La curiosidad era ésa, las cartas. Yo no sé si la amistad mÃa fue con este muchacho porque él sabÃa escribir, si la amistad mÃa fue porque él me hacÃa las cartas para mi familia.
ML: ¿Con su amigo que tenÃa esposa?
IG: SÃ. Y yo le tenÃa la confianza de que él me hiciera las cartas y le tenÃa la confianza de que él leyera lo que me decÃan de allá para acá. Por eso le digo que él fue mi amigo.
ML: Y cuando él no estaba con usted, ¿cómo es que leÃa sus cartas?, o, ¿cómo es que mandaba cartas?
IG: ¿Quién?
ML: Cuando su amigo no estaba con usted.
IG: Oh, no, duramos mucho tiempo juntos con él, duramos mucho tiempo de que nos hicimos amigos, duramos mucho tiempo con él. Siempre en la misma compañÃa trabajamos.
ML: ¿Él es del mismo pueblo?
IG: No. Él es de aquà de Gómez Palacio y yo soy de Michoacán, estamos retirados uno del otro.
ML: ¿Alguna vez fueron las autoridades mexicanas al lugar donde trabajaba?
IG: No.
ML: ¿Alguna vez fue la Migración a revisar documentación de los trabajadores?
IG: No, tampoco.
ML: Cuénteme un poco de su rutina diaria, ¿qué es lo que hacÃa cuando se levantaba?
IG: Bueno, siempre cuando nos parábamos en las mañanas, Ãbamos a desayunar, todos los dÃas Ãbamos a desayunar excepto los domingos. Los domingos nos parábamos ya tarde porque parecÃamos burros entre semana trabajando, ¿no? Y el dÃa domingo siempre ya nos parábamos tarde. Yo siempre creÃa en Dios, aunque estaba lejos de un lugar, de una iglesia católica, pero yo allà fui a una iglesia de hermanos, una iglesia bautista. Y yo después de que era una iglesia diferente a la mÃa, pero yo para mà lo que contaba era mi creencia mÃa. Yo entraba a la iglesia, yo creÃa en Dios y creÃa. Y yo, cada quién que haga las cosas suyas y yo hacÃa lo mÃo en mi religión, yo hacÃa las cosas mÃas.
ML: Y, ¿por qué empezó a entrar a la iglesia bautista?
IG: Porque yo querÃa buscar una iglesia católica pero no habÃa, pero no se pegan las cosas.
ML: Hábleme un poco de sus alimentos, ¿qué comÃan?
IG: Bueno y ésa es una parte de la que yo le dije hace un rato, que tiene uno que hablar de las cosas buenas también que hay y de las cosas malas. En una ocasión nos vinimos del field donde estábamos trabajando precisamente por el alimento que nos dieron. Según aquà nos hacÃan lo que acostumbramos en México nosotros, caldo de res, pero ese caldo de res era un agua blanca como llena de masa, como algo asà de… Porque estaba mal cocinado o estaba demasiado cocinado. Las papas se desbarataron, las zanahorias se desbarataron, entonces esto se miraba mal, la comida mal, mala comida. Y no nada más fue una sola vez, varias veces nos dieron este caldo a comer. O siempre nos daban lo que no estamos acostumbrados nosotros a comer, sándwich o a comer, pues estas cosas, ¿verdad? Y ese dÙÃa pues todos nos disgustamos por la comida y nos venimos del field caminando hasta el campo donde vivÃamos. Hubo varios carros que se pararon a preguntarnos que qué pasaba, pero no hablaban español, nosotros no hablábamos inglés, pos, ¿qué decÃamos?, ¿no? Ya cuando llegamos al campo, los del campo, o sea el campero ahÃ, los que se encargaban del campo hablaron a la policÃa pues, por nosotros que pasaba, fue un inspector a ver la comida y pues no, no habÃa comida. Al otro dÃa fue un inspector, porque al otro dÃa ya nos tenÃan una comida especial porque iba a ir un inspector. Fue el inspector y miró la comida y dijo el inspector, hablaba español, dijo: “Pues esta comidaâ€, dijo, “pues ni en mi casa me la danâ€, dijo. Y: “¿Qué tiene esta comida?â€. Y pues nosotros ahà la mayorÃa: “Pues vengan todos los dÃas a ver si nos dan lo mismoâ€. Nos dieron pollo dorado, muy bonito, pork chucks bonitos, bistec y todo arreglado, sopita de arroz y todo, pues que buena comida. Pero alguien, habemos de todas las personas unos que guardamos algo y otros que nada, alguien le llevó un plato con caldo de ese que nos habÃan dado. “Señorâ€, dice, “aquà está la comida que nos dieron, por esto nos venimosâ€. Entonces vieron la comida, dijo: “¿Ésta es la comida?â€. “SÃ, ésa era la comidaâ€. Pues no servÃa la comida. Y sacaron de ahà al encargado de la cocina porque estaba haciendo mala comida, pero digo yo que hay malos momentos y buenos momentos.
ML: Y, ¿cómo pagaba por su comida?
IG: Ya venÃa incluido, la comida venÃa incluida, la comida y el dormitorio, todo lo que ya venÃa incluido en el cheque que nos estaban pagando. Nunca nos dijeron: “Vamos a cobrarles tanto por la comida, vamos a cobrarles tanto por el dormitorio o por las transportacionesâ€. Tampoco nosotros nunca supimos cuánto nos iban a cobrar por cada, cada cosa que nos estaban dando.
ML: Y, ¿me puede describir un poco dónde vivÃa y cómo estaba amueblado, cómo se veÃa?
IG: La mayorÃa de gente vivÃamos en una barraca. Se le nombraba barraca a una galera que pa veces nombra uno una galera grande. HabÃa como vamos a decir ahà están estos documentos aquÃ, aquà habÃa camas, ahà habÃa camas y ése era un pasillo y todo esta sección era de camas hasta allá. Qué tan grande era el lugar, todo lleno de camas, posiblemente eran literas, acá arriba habÃa otra hilera de camas. Luego habÃa unos lugares donde habÃa barracas chiquitas, vamos a suponer, como este cuarto donde estamos aquÃ. Aquà caben cuatro camas individuales, de una personal, cuatro camitas. Yo vivÃa en estas barracas también y asà vivÃamos la gente. En ese tiempo que yo vivÃa en Wisconsin, allá nos daban, pues según que eran purgas, ¿no? Hay que decir las cosas como son, según que nos purgaban, pero yo era una piedra, no me hacÃan las purgas, pero un dÃa que me hizo.
ML: Y, ¿por qué los purgaban?
IG: ¿Mande?
ML: ¿Por qué los purgaban?
IG: Pues que pa que no estuviéramos enfermos del estómago, para que no estuviéramos cargados del estómago. Bueno, eso era lo que nos decÃan cuando la comida nos hacÃa daño. Ellos se sacaban esto de enfrente: “No, los purgamosâ€. Entonces un dÃa nos dieron una purga tan fuerte, estaba tan fuerte la purga que muchas de las personas ya no alcanzaron a llegar a ir al baño. ¿Te da cuenta cómo estaba todo aquello allà por el pasillo? Los que vivÃan allá y abrÃan la puerta, cada que abrÃan la puerta a media barraca y asÃ, pues aquello estaba de un asco. Las cosas son, hay que decirlas como son. Ya la mayorÃa de gente ya no estaba adentro de la barraca, estaba afuera de la barraca con sus cobijas allá acostados porque no podÃa estar la gente adentro de la barraca. Yo tenÃa ahÃ, fue en Wisconsin, tenÃa yo un perrito, un perrito muy bonito de esos cafecitos orejones que hay.
ML: Y, ¿cómo consiguió usted perro ah�
IG: Me hice amigo de un indio de ahà en Wisconsin y él me regaló ese perrito.
ML: Y, ¿cómo se hizo amigo de él?
IG: Trabajaba ahà con nosotros, trabajaba el indio con nosotros ahà y nos hicimos amigos y me regaló ese perrito él. Y ahà lo criamos, toda la gente querÃa, toda la gente que vivÃa ahà con nosotros querÃan a ese perrito y el perrillo pues querÃa a la gente. Pues ni el perro pudo dormir dentro de la barraca y a raÃz de esto me dieron la oportunidad de ir a la cocina. Ya me encargué yo de la cocina, ya la comida entonces ya la comimos mexicana.
ML: ¿Qué es lo que hacÃa?
IG: Los frijoles, el tiempo que estuvimos por acá no comimos frijoles, pero ya les cocà yo frijoles a los compañeros, los frijoles. Ya les hacÃa su chile con el molcajete, pero alguna licuadora les arreglaba sus jitomates asados, chiles asados y ya les hice muy diferente las cosas. Les hacÃa lechugas picadas, cebollas, tomates. Fue muy diferente la comida que yo hice a la que comÃamos. Ya habÃa la facilidad de que sà yo podÃa hacerles carne y hacerles comida o hacerles comida con salsa con chile todo eso. Ya fue muy diferente porque ya era comida mexicana y las personas que nos daban esa comida ahà eran americanos. Entonces por eso digo que las comidas son muy diferentes.
ML: Y, ¿cuánto tiempo usted duró usted haciéndoles las comidas?
IG: Seis meses. Éramos noventa y seis personas y duré seis meses yo, porque ya fue a las finales del contrato.
ML: Y, ¿trabajaba aún en los campos mientras que hacÃa…?
IG: Yo no trabajé en los campos ya.
ML: Se dedicaba a cocinar.
IG: Yo ya estaba en la cocina, ya directamente a la cocina. Ya ordenando qué Ãbamos a hacer: “Vamos a hacer, va a hacer, todo va a ser papas, hacer todo estoâ€. Las comidas, bueno, mexicanas. Y ya era muy diferente y ya cuando ya nos dijeron que se terminó el trabajo, pues mucha gente: “¿Ya nos vamos?â€. “Pues sÃâ€. “Pues noâ€. “Ya no vamos a comer igualâ€. Es diferente a la comida que tenÃamos, comÃamos nosotros comida con pan, toda la comida era con pan, no habÃa tortillas, no habÃa nada. Y yo allá les hice tortillas y le pedÃa al patrón una máquina, allá sà tuve yo la facilidad esa de tener el amigo mÃo, ese muchacho. Y le pedÃa al patrón que si podÃa dar, darme una máquina pa hacer tortillas y conseguirme harina. Todo lo que le pedÃ, todo me trajo el señor, me trajo frijol, me trajo todo lo que le pedÃa yo, todo me traÃa para cocinar.
ML: Y, ¿cómo es que usted aprendió a hacer todo eso?
IG: Le dije hace rato que yo me crié huérfano y una persona huérfana aprende muchas cosas, sea porque no lo quieren hacer o, sea que quiere uno depender de algo. Me enseñe a todas esas cosas y yo tuve esa facilidad de saber cómo se trabaja en una cocina, no los gustos de todas las personas, porque cada quién tiene su gusto, pero sà hacer una comida que todas las gentes se puedan comer. Yo sabÃa, me enseñé a hacer muchas cosas, hacer mole, me enseñé a hacer muchas cosas. Entonces ya cuando yo me casé, pues para mà ya no era, no era trabajo.
ML: Y, ¿en ese campo tenÃan baños con drenaje?
IG: Todo habÃa ahÃ, ahà habÃa baños, habÃa regadera, ahà tenÃamos muy buena, muy buen lugar dónde vivir, tenÃamos ahÃ. Lo único malo que tenÃamos, pues la comida, ¿verdad? Pero tenÃamos muy buen baño, estábamos a la orilla de una montaña, pues nos hicimos varios amigos que no éramos tan estrechos amistades, ¿verdad?, pero sà éramos compañeros que salÃamos por ahÃ. SalÃamos armados, con pistolas, no, por ahà no habÃa policÃas, no tenÃamos miedo de nadie y quién nos… Te agarra la PolicÃa porque traes un arma y estábamos fuera de la ciudad.
ML: Y, ¿cómo conseguÃan armas?
IG: Ãbamos a la ciudad y nos vendÃan armas, nos vendÃan armas a nosotros. O encargaba yo a mi patrón, pues hablaba con el hijo: “Dile a tu papá que si me puede traer una… Siempre me la traiba el señor. No éramos, no era pa pleito, no era pa nada. Por ahà salÃamos, yo tenÃa unas fotografÃas yo, que con el sombrero y mi pistola acá y todo eso, pues estábamos jóvenes, veinte años.
ML: Y, ¿qué hacÃan con las pistolas cuando regresaban a México?
IG: Pues las vendÃamos por acá a algotros compañeros. “Te vendo mi pistolaâ€. Ya no en la que la compramos, más barata, pero la vendÃamos porque sabÃamos que no la podÃamos traer para acá. Pero nos pasábamos los jóvenes en ese tiempo, yo allá cuando estaba en Wisconsin… A veces aprende uno muchas cosas y yo tuve amigos que eran borrachitos, les gustaba ir a las cantinas allá y se iban a la cantina, a veces de que me llevaban unas botellas de wine o me llevaban algunas cervezas. No fui yo cantinero, yo no fui cantinero, pero el muchacho este amigo mÃo, Ãbamos al cine con él. Él tenÃa su novia, éramos chavalos y por ahà también él me consiguió una muchacha por ahÃ, una amistad y pues yo no sabÃa qué decirle a la muchacha pero ni ella tampoco. Pero eso no importa, cuando uno es joven no importa qué decir, no importa eso, con el sentir tiene uno, con eso tiene. Y el muchacho a veces que él nos decÃa, él a ella le hablaba, pues dile algo, o a veces a mà me hablaba el español. “No, pues dile algoâ€. “Yo le digo lo que tú quierasâ€. Pero sà éramos también con este muchacho amigos.
ML: Y, ¿qué es lo que hacÃan ustedes para divertirse?
IG: Pues yo por ejemplo, como yo no iba a las cantinas, yo me salÃa con algotros compañeros con la arma a tirar balazos a lo tonto. PonÃamos algunas botellas o algunos botes de soda o algo, salÃamos ahà a lo tonto.
ML: ¿Practicaban deportes o iban al cine?
IG: No, porque estábamos retiraditos de la ciudad, estábamos retirados.
ML: ¿TenÃan un radio?
IG: SÃ, tenÃamos radios.
ML: ¿Escuchaban hasta televisión?
IG: SÃ, sà tenÃamos televisión ahÃ. Era la persona ahà como, donde estábamos nosotros ahà en este rancho, era un rancho lejos de la ciudad y en la parte de comedor, una parte del comedor habÃa un televisión y ahà mirábamos nosotros partes de la guerra, cuando hubo guerra, el radio, escuchábamos en el radio, escuchábamos todo eso.
ML: Y, ¿habÃan estaciones de radio en español?
IG: La estación de radio en español la oÃamos como más o menos a las dos de la mañana, más o menos de ese horario, habÃa que desvelarse. Por ejemplo los domingos que no salÃamos, el sábado nos tenÃamos que desvelar para oÃr la música en español.
ML: ¿En Wisconsin tocaban música en español?
IG: Era una estación que habÃa aquà en Estados Unidos, que era muy grande y se oÃa en Estados Unidos, no simplemente aquà y acá, se oÃa en Estados Unidos. Era un radio de mucha potencia, era un radio muy grande. En este radio, la gente que habÃa en este radio, mandaba por ejemplo, catálogos y hablaban en el radio que querÃan un catálogo de esto, de esto y del otro. Porque por ejemplo ponen música y luego ya ponen anuncios y ya empezaban a anunciar que sà querÃan al anuncio, en el anuncio querÃan esto o querÃan lo que quisieran, un radio o unas plumas, o ropa o lo que uno quisiera. Le mandaban a uno un catálogo y ya en el catálogo ya venÃa allà los precios de cada cosa y ya uno decÃa: “Pues yo quiero estoâ€.
ML: Y, ¿cuánto le pagaban cuando trabajaba en estos varios sitios?
IG: ¿A m�
ML: SÃ, el primer año, ¿cuánto le pagaban?
IG: El primer año lo hicimos también este trabajo a contrato, casi la mayorÃa del trabajo eran contratos porque casi no pagaban, no nos pagaban por horas porque era bajo contrato. Casi la mayorÃa del tiempo fue bajo contrato.
ML: ¿Todos ganaban igual?
IG: SÃ, todos ganábamos igual, no habÃa quién ganara más que otros, porque todo era igual.
ML: Y, ¿los años después de ése?
IG: No me acuerdo yo los últimos años, o sea los últimos meses, no me acuerdo yo cuánto me pagaban la hora, por horas.
ML: ¿Pero le pagaban en efectivo o en cheque?
IG: No, en cheque, nos pagaban en cheque. Ahà mismo cambiábamos el cheque, ahà mismo en la compañÃa. Ahà nomás daban el cheque y yo pues no escribÃa… y ya listo.
ML: ¿Sólo con su huella?
IG: SÃ, porque dicen que es más efectivo una huella que un escrito, eso se dice, ¿no?
ML: Y, ¿qué hacÃa usted con su dinero?
IG: Lo mandaba para México.
ML: Y, ¿siempre recibió el pago correcto por las horas trabajadas o por el contrato?
IG: Bueno, yo no sabÃa si me faltaba o me sobraba. Yo recibÃa mi dinero y no sabÃa, cuánto pude haber ganado más o cuánto pude haber ganado menos. Yo el caso es que a mà me llegaba mi cheque y ya, luego iba y lo cambiaba. Yo trabajé en la compañÃa Royal, se llamaba la Royal la compañÃa. Éramos, era una compañÃa de noventa y seis personas éramos en la compañÃa y cuando terminó la compañÃa aquÃ, aquà se terminó la compañÃa. Era una compañÃa muy grande, muy, muy grande ya, era muy grande y éramos poquitos, empezó con poquita gente.
ML: Y, ¿tuvo problemas en el trabajo?
IG: No.
ML: ¿Nunca?
IG: Nunca tuve yo problemas en el trabajo.
ML: ¿Qué sucedÃa en caso de accidente o una enfermedad?
IG: TenÃamos doctor, tenÃamos derecho a doctor, tenÃamos derecho… Me sacaron esta muela en Arizona precisamente, cuando me llevó el mayordomo al doctor, me la sacó el doctor. Él me dijo que era sin dolor, pero sin dolor de su corazón, porque sentà que me tronó hasta acá cuando me jaló la muela.
ML: Hasta la frente.
IG: Y ya le dijo el mayordomo que qué puedo. “Qué puede hacer, ¿verdad? Qué puede hacer él. Dice: “Pues llévalo a que se coma un menudo y llévatelo a trabajarâ€. No era él el que estaba malo, ¿verdad?, por eso dijo que era sin dolor.
ML: Y, ¿cuáles eran las quejas más comunes entre los braceros de el trato?
IG: Bueno, las más comunes que habÃa entre nosotros con la gente, primero que nada era la comida, porque aunque no tenÃamos qué comer ahà nosotros los mexicanos, pero sà sabÃamos qué comida estaba mal hecha mal cocinada. La otra cosa que siempre nos quejamos era de los malos tratos dentro del trabajo, porque habÃa veces que no tenÃamos agua, habÃa veces que no tenÃamos baño, habÃa veces de que nos trataban mal dentro del trabajo, nos pedÃan más de lo que podÃamos hacer. O sea que hubo también pues malos tratos, ¿no? Por eso digo yo que hubo malos tratos y que hubo todo esto malo, pero también hubo lo otro bueno que ganamos un dinero para mandar a nuestras familias.
ML: ¿Alguna vez sus compañeros de trabajo o usted, organizaron una protesta laboral?
IG: La que hicimos cuando nos venimos del algodón, ésa fue una de las protestas que hicimos porque precisamente la comida. Ésa fue una protesta y estuvo grande porque fue PolicÃa, fueron con la PolicÃa a ver qué estaba pasando. Pues venÃamos nosotros y no dejábamos pasar a los carros y todo eso y: “¿Qué pasó?â€. Pitaban los carros y bueno, ésa fue la protesta que tuvimos. Y la otra pues, que tuvimos acá que ni el perrito dormÃa en la barraca. Esa fue la otra protesta pues de ahà que hubo y por la cual… Era una señora la que, la encargada de la cocina y yo sentÃa a veces que esta señora se fuera porque yo me llevé bien con la señora y esa fue otra protesta que hicimos también por la comida.
ML: ¿Regresó usted a México cuando terminó su contrato de trabajar?
IG: SÃ, yo regresé para México y ya estuve allá en México y luego al tiempo me casé y luego ya me vine para acá y aquà estoy de ese tiempo para acá.
ML: Y después de terminar con su trabajo, ¿qué tan fácil era conseguir un nuevo contrato después del primer contrato?
IG: Bueno, de cuando se terminó el contrato, después era, habÃa facilidades porque habÃa mucha gente que iba a piscar algodón para ganarse la carta que se decÃa en ese tiempo. Y se iban a piscar algodón a Sonora, allà hubo mucha gente que vino a ganarse la carta pa venir para acá. Y esa fue otra oportunidad que hubo aparte de la que dieron los gobiernos para darle a las personas una lista que vinieran a los Estados Unidos, porque las personas venÃan a, venÃan en lista también pero venÃan a ganarse una carta piscando algodón.
ML: Y, ¿qué era la relación en los varios sitios donde usted trabajó entre los braceros y los mexicoamericanos?
IG: En ese tiempo habÃa mucho, pues no habÃa muchos mexicanos, no habÃa muchos mexicanos. Era muy raro un mexicano que estuviera aquÃ.
ML: ¿Pero nacido en los Estados Unidos?
IG: Nacido en los Estados Unidos, porque aquà la mayorÃa que habÃa eran indios, en Arizona, indios. Aquà habÃa también en ese tiempo uno destos como japoneses o algo asÃ, aquà habÃa también de esas razas, pero no habÃa muchos mexicanos aquÃ. Por eso a nosotros hasta nos querÃan los güeritos, nos querÃan a nosotros las muchachas también. Pero nomás empezamos a invadir aquà y ya no nos quieren.
ML: ¿Por qué?
IG: Pues es que habemos de todo, habemos tranzas, habemos personas que no deberÃamos estar aquà y pues asÃ.
ML: Y muchos braceros salÃan con mujeres blancas americanas.
IG: SÃ, sà es cierto. HabÃa personas que, yo les digo que yo tenÃa, me presentaba con una muchacha americana y muchas de las veces, hay muchas cosas en la vida, no simplemente yo tengo que ser una belleza para yo salir con una mujer, no simplemente una mujer tiene que ser una belleza para salir con un hombre. Todo se da, cómo es una persona, cómo es la otra persona, hay quÃmicas que… Yo simplemente le dije hace un rato, tengo que decirle algo a la mujer para sentir que la quiero, ni la mujer tampoco tiene que decirme nada pa yo sentir que la quiero, simplemente se da y se da.
ML: Y cuando regresó a México, tipo después de su año final como bracero, último año de bracero, ¿qué es lo que hizo en México? Sé que se casó pero, ¿en qué trabajó?
IG: Cuando yo llegué a México, yo allá para mà fue muy diferente ya distinto a lo que fui aquÃ, el tiempo que estuve aquÃ, porque yo ya para mÃ, ya era muy diferente y la vida allá y la vida aquÃ. Primero que nada, yo ya no recibÃa un cheque como aquÃ, luego a veces también la ropa no era igual aquélla que ésta. La comida últimamente ya no era igual aquélla que ésta, porque yo aquà comÃa carne todos los dÃas sà yo querÃa, primero que nada pues yo estaba trabajando en la cocina, ¿no? Yo ahà podÃa comer toda la comida que yo querÃa, pescado y todas esas cosas, ya pa mà era muy diferente. El trabajo aquà y aquél de allá de México no era igual, bueno, primero que nada, yo el trabajo aquÃ, lo hacÃa pues no forzado. Pero casi sà porque yo tenÃa que hacer el trabajo para presentarle a mi patrón un trabajo, y en México no le presentaba a nadie más que a mà mismo. Si yo querÃa trabajar todo el dÃa, lo trabajaba y si no, pues con un ratito. Porque allá es media floja la gente, es muy diferente y allá dice uno: “Ay, ya nomás trabajo hasta aquà y ya me voyâ€. Hasta es uno medio flojo. Y no se está haciendo uno más de mal a uno mismo. ¿Cómo vamos a prosperar si no trabajamos? Y a parte de que yo ya trabajé mucho, yo trabajé mucho, yo como huérfano trabajé mucho.
ML: Y, ¿qué significa el término bracero para usted?
IG: ¿En término un bracero?
ML: El término, la palabra bracero, ¿qué significa para usted?
IG: Para mÃ, ¿qué es bracero? Bueno, primero que nada, un bracero es que vino aquà a poner su brazo pa darle de comer a la gente que necesitaba aquÃ. Porque eso es nombre de bracero, brazos fuertes, haber venido a hacer un trabajo aquà y darle de comer a la gente que no tenÃa qué comer aquÃ. Darle un camino a la gente que no podÃa tener un camino ya aquÃ, porque eso venÃamos a hacer, a darle de comer. Venimos aquà nosotros a Estados Unidos a luchar, a pelear con el hambre, eso venimos a hacer aquà nosotros. Nosotros no peleamos con armas, pero peleamos con los brazos, braceros, para darle de comer a esta gente y mandarles aquellos armas también pa que pelearan. Porque, ¿con qué compraban las armas si no tenÃan material? No tenÃan dinero. Nosotros venimos a hacer todo eso, venimos a levantar el paÃs porque vivimos aquà cerca de cinco mil, sÃ, cerca de cinco millones de personas. ¿Se da cuenta de cuánta gente venimos pa aquà a apoyar a Estados Unidos. Y también fuimos parte de las guerras que hubo, porque con el trabajo de nosotros, ellos también estuvieron allá sin pendiente porque ellos tenÃan que comer aquà a sus hijos de ellos y a sus esposas. Entonces pa mà eso es bracero.
ML: ¿Cómo se siente usted de que lo llamen bracero?
IG: Bien, bien, me llamo, me siento bien porque eso es parte mÃa. Y no cualquiera es bracero, ni cualquiera fue bracero.
ML: Y en término general, sus recuerdos de haber trabajado como bracero, ¿son positivos o negativos?
IG: Hay de las dos partes, hay positivos y negativos. Primero que nada, tuvimos buenas experiencias y tuvimos malas experiencias, porque una de las buenas es que nosotros, muchos de nosotros, nos hicimos responsables porque ya fuimos responsables los que estuvimos jóvenes aquÃ. Porque el trabajar es ser uno responsable, no simplemente el tener dinero es responsable la gente. Porque eso lo hace a uno ser irresponsable, porque no lo lleva a uno a ninguna parte, el agarrar el dinero y agarrar el dinero, no lo lleva a ninguna parte. Ser responsable es trabajar, las personas que sepa uno cuánto cuesta el dinero. Y la otra parte fue que pues tuvimos las malas experiencias. Pero ya para mà hay cosas buenas y cosas malas y hay que tomarlo por el lado amable dice el Señor.
ML: El haber sido bracero, ¿cambió su vida de alguna manera?
IG: Pues sÃ, sà cambió porque me hice responsable. Soy responsable, ya de ahà para acá, ya fui una persona responsable en mi casa, aunque cuando era jovencito de a tiro yo ya sentÃa responsabilidad. Ya cuando fui bracero ya me sentà más responsable porque yo ya fui ya un hombre más responsable, ya de otro mundo, ¿no? Y yo ya me sentà más responsable.
ML: Ya acabamos con estas preguntas pero, ¿hay alguna cosa que quiere compartir u otra cosa que quiere contar?
IG: Ya estamos tarde.
ML: Okay.
IG: Yo quisiera, hay muchas cosas qué contar, hay muchas cosas qué contar. Por ejemplo, una de ellas se la voy a contar antes de irnos. Antes en Empalme, Sonora se habÃa una comida. Estuve un tiempo yo en Empalme y mi hermano también, venÃamos para acá y duré dos dÃas yo que no comÃa, no tenÃa, no tenÃa dinero pa comer y pues sà tomaba agüita y todas esas cosas, pero no comida. Y nos encontramos con mi hermano, ya me dice: “¿Qué pues, dónde andas?â€. “Pos por ahà caminando, ¿ya comiste?â€. Le dije: “Ya, ya comÃâ€. Pero no habÃa comido. Yo dije: “Pobrecillo, pues era más chico que yo, o es más chico que yo, ¿cómo voy a…
ML: ¿Usted es el mayor?
IG: SÃ, yo soy el mayor de ellos. ¿Cómo voy a presentármele en quiebra o que no he comido, ¿verdad? “Vente, vamos, te voy a invitar una gallina, vamos a la gallinaâ€. Ya llegamos allá al restaurantito ahà y ya se arrimó la persona ahÃ, y dice: “¿Van a comer?â€. “SÃ, me das dos gallinasâ€. Hijo de la fregada ya dije: “Yo llevo dos dÃas sin comer y voy a comer gallinaâ€. Bueno, ya fue el señor y nos trajo un plato a cada uno de frijoles con arroz ahà y un chile de esos a mordidas y tortillas, un montón de tortillas. Pos ahà estamos comiendo y yo estaba, pos yo comà rápido. Me terminé los frijoles dije yo: “Voy a esperar la gallinaâ€. Acabamos de comer y nos echamos unos vasitos de agua. Le dije: “¿A qué hora llegan con la gallina?â€. “Y luego lo que te comisteâ€. “Pues esos eran frijoles con arrozâ€, dijo. “Pues ya está la gallina aquÃâ€. Pregúntales y verás. Es parte de la historia de nosotros y hay muchas cosas, hay muchas cosas nomás que ya es tiempo que yo, me voy a retirar porque tengo algo que hacer en mi casa.
ML: Okay, gracias.
IG: Gracias.
Fin de la entrevista
Fecha de la entrevista: 28 de julio de 2005
Nombre del entrevistador: Mireya Loza
ML: SÃ, gracias, muchas gracias. Le iba a decir que es algo muy especial para mà porque sigo trabajando en este proyecto y no tengo… Yo como no fui bracero yo, no tengo nada.
IG: Es algo especial esto porque ahà está diciendo no con palabras…
ML: SÃ.
IG: Los tratos que recibimos.
ML: Déjeme acomodar esto aquà bien pa que se grabe bien. DÃgame su nombre.
IG: Ignacio Gómez.
ML: ¿Dónde y cuándo nació usted?
IG: Yo nacà en Michoacán el 1, 14 de [19]36.
ML: Y hábleme de su familia y el lugar donde nació.
IG: Mi pueblo se llama Chavinda, Michoacán. Conocà a mi padre yo muy poco porque fui huérfano de padre, a los doce años fui huérfano de madre también.
ML: Y, ¿tiene usted hermanos?
IG: Tengo dos hermanos, un hermano hombre y una hermana mujer. Yo soy el mayor de ellos.
ML: ¿A qué se dedicaban sus padres?
IG: Mi padre era campesino y mi mamá al hogar.
ML: ¿Dónde viven sus hermanos y hermanas ahora?
IG: Mi hermano vive en Los Ãngeles y mi hermana también vive en Los Ãngeles.
ML: Hábleme de cuando fue a la escuela, ¿usted fue a la escuela?
IG: Nunca fui a la escuela, yo hace aproximadamente siete años fui a la escuela aquà en Salinas, en la escuela de adultos. Ahà aprendà un poquito a leer, a escribir, a hacer matemáticas.
ML: Y, ¿cuántos años tenÃa usted cuando empezó a trabajar?
IG: Cuando yo empecé a trabajar pos más o menos alrededor de diez años.
ML: Cuénteme de su primer trabajo.
IG: Mi primer trabajo fue en México cuando éramos jóvenes nosotros, habÃa un trabajo que se nombraba levantar mata de maÃz, sembraban, se sembraba en las labores y se nombraba a levantar mata. Levantábamos mata, el maÃz cuando pasaban aquà escardaban, uno levantaba las matitas que se tapaban de tierra, porque el arado tapaba las matas de tierra. Sembrábamos frijol, sembrábamos maÃz, todo esto hice yo. Ya cuando mi madre murió, yo regaba también ya en una parcela que tenÃamos de maÃz, de jitomate, todo eso hacÃa yo ya. Yo trabajaba ya de doce años, ya era como un adulto, trabajaba mucho, trabajé mucho.
ML: ¿Cómo se enteró usted del Programa Bracero?
IG: Mandaban, por ejemplo, de las ciudades grandes a las rancherÃas o a los pueblos pequeños algunas listas a los presidentes municipales y el presidente municipal hablaba con las personas que en si eran de los más pobres o personas que eran más conocidos de los presidentes y ya cada uno nos daba a saber que habÃa un lugar para si querÃamos venir a Estados Unidos. Por ejemplo en mi caso fue a mi abuelito al que le dieron a saber un número si querÃa venir a Estados Unidos, pero él estaba mayor y yo en ese tiempo era un joven de dieciocho años. Y ya él me dijo que si yo querÃa venir, habÃa la oportunidad. Y asà fue como yo vine a dar aquà a Estados Unidos.
ML: Y, ¿estaba usted casado?
IG: No.
ML: ¿No? ¿Alguna vez llegó a pensar en trabajar en los Estados Unidos antes de aquella época?
IG: No.
ML: ¿No?
IG: Nunca.
ML: ¿Por qué decidió irse a los Estados Unidos?
IG: Bueno, en todos tiempos ha habido mucha pobreza en México, pero hay de pobres a pobres. Yo era pobre de dinero, pobre de qué comer, de qué vestir, pero rico en salud porque, bendito sea Dios, nunca fui enfermo. Y yo en ese tiempo vine aquà a Estados Unidos, hay que decir las cosas tal y como son. Tuvimos muchos problemas aquà cuando entramos a Estados Unidos, tuvimos muchos problemas aquà cuando trabajamos en Estados Unidos. Primero que nada era una cultura diferente a la de nosotros, era una comida diferente a la de nosotros, eran unas personas diferentes a las de nosotros, pero tuvimos malas experiencias, pero también entre ellas tuvimos buenas experiencias porque primero que nada, nos enseñamos un poco a saber de la cultura de los americanos. Aprendimos, el dinero que ganamos en Estados Unidos nos sirvió para mandarle a nuestras familias y también hay que hablar de ello, no simplemente de las malas experiencias que tuvimos. Porque también entre ellas tuvimos la experiencia de mandar un dinero a nuestras familias en México para que ellos se sintieran… Comer mejor, vestir mejor y vivir mejor el tiempo que estuviéramos aquà en Estados Unidos.
ML: Describa el proceso de contratación, ¿cómo fue?
IG: A cada uno de nosotros se nos dio un documento que para firmar, pero algunos firmamos con lápiz y otros pusimos una huella porque no sabÃamos escribir. Hubo una lista, la gente se venÃa por medio de una lista. En esta lista venÃa el nombre de cada persona de nosotros.
ML: ¿Cómo es que ponÃan su nombre en la lista?
IG: SÃ, hacÃan en una hoja de papel hacÃan, ponÃan una lista de cada persona que este presidente municipal nos habÃa dado la facilidad de venir a los Estado Unidos. Entonces, ya cuando… HacÃan una lista de cuántas personas eran las que iban a venir aquà a Estados Unidos de ese municipio. Entonces venÃa una lista, esta lista venÃa a dar a El Centro, California y ahà en El Centro, California, ahà nos recibÃa el Gobierno de los Estados Unidos, La Inmigración. Y ya de allà Ãbamos a, nos mandaban a unas asociaciones que habÃa y ya de allà de esas asociaciones, ya nos mandaban a los rancheros o iban los rancheros por nosotros. Cuantas personas querÃa cada ranchero, esas personas llevaba ahà de La Asociación donde estábamos.
ML: Y, ¿qué requisitos debÃan cumplir para ser bracero?
IG: Bueno y ser unas personas que pudieran trabajar en el campo, en el field, ser unas personas que estuviéramos bien de salud, ser unas personas que supiéramos trabajar en los caminos, trabajar en los rieles del tren, o sea con los rieles del tren, saber usar un azadón, saber usar un cuchillo, saber usar un marro porque también con eso se trabajaba, saber usar unas llaves para los tornillos. Saber todo esto, eso era parte del requisito y venir de toda voluntad a trabajar y obedecer a nuestros mayordomos.
ML: ¿Qué tenÃan que hacer para demostrar que reunÃan todos los requisitos?
IG: Bueno, allà nos hacÃan muchas preguntas. Primero que nada, habÃa una persona que nos hacÃa preguntas, qué sabÃamos hacer en nuestro paÃs, en qué trabajábamos en nuestro paÃs. Siempre nos, médicamente habÃa doctores ahà que nos estaban examinando. Era parte del contrato que habÃa con los gobiernos.
ML: ¿Hubo algún examen fÃsico?
IG: SÃ. Y por ejemplo cuando entrábamos, siempre nos tomaban con aparatos para ver si estábamos enfermos de los pulmones, de los ojos, de los riñones, de las manos, de los brazos, de las piernas, de los ojos. Siempre nos hacÃan chequeos completamente. Pero de todo ello, lo más triste es que nos fumigaron como si hubiéramos sido una manada de ganado, de chivos, de puercos, de perros y ésa fue la mala experiencia que yo tuve y que yo tengo que decir que fuimos humanos, somos humanos. Que dónde estaban los derechos humanos en ese tiempo, que nuestro Gobierno no nos defendió, porque los malos tratos para mà fueron esos, malos tratos, malas experiencias. Y yo no presto a una burla de nosotros porque no puedo nombrarlo, ni justificarlo que esto haiga sido o que esto sea normal o humano, que nos haigan tratado como animales. Por falta de nuestro Gobierno y falta de derechos humanos y aquà se mofan de decir de hablar de los derechos humanos, pero pa nosotros fue mentira.
ML: ¿Cuándo es que vino por primera vez?
IG: La primera vez vine yo en el 1959, entonces entré a Estados Unidos.
ML: ¿Qué le dijeron las autoridades, ya sean mexicanas o norteamericanas, que podÃa esperar de su trabajo?
IG: Simplemente nos pusieron a firmar el contrato y el permiso que tenÃamos. Nunca nos pidieron que esperaban de nosotros mucho o que esperaban poco, simplemente lo llevaban a trabajar y eso era todo.
ML: ¿Le informaron las autoridades algo acerca de su salario, condición de vida, alimentos o transportación?
IG: Bueno, a cada uno de nosotros nos decÃan qué iba a ser la transportación, qué iba a ser el alimento que tenÃamos, mas no nos podÃan mostrar. Ãbamos a tener alimentos, Ãbamos a tener transportación, Ãbamos a tener un lugar dónde dormir. Pero eso era todo lo que hablaban con nosotros. Primero que nada nosotros no entendÃamos su lengua de ellos y pues siempre nos cargaban asÃ.
ML: ¿De qué forma viajó usted del lugar de reclutamiento al centro de recepción en los Estados Unidos?
IG: De México viajamos en el tren. Allà también fue otra parte que tuvimos la mala experiencia, porque no venÃamos en un tren de primera, ahà también venÃamos como las vacas. (risas) En vagones venÃamos para acá y de ahà ya nos bajó a, ya nos bajaron a la entrada de Estados Unidos. Entramos ya, cuando entramos ya Estados Unidos fue cuando nos fumigaron.
ML: ¿Qué pasó cuando estuvo en el centro de recepción en los Estados Unidos, qué pasaba ah�
IG: Bueno pues allà hubo, hubimos muchas personas. Allà hubimos bastantes personas y ahà fue donde nos fumigaron, donde nos leyeron nuestros documentos, nos leyeron lo que Ãbamos a hacer, nos leyeron dónde Ãbamos a vivir, ahà nos leyeron toda, como se dice la cartilla.
ML: Y, ¿tuvo usted alguna opción para escoger entre el tipo de trabajo, duración de empleo y salario?
IG: No, nunca tuvimos nosotros la opción esa porque nosotros venÃamos a trabajar, no sabÃamos de salario, no sabÃamos de qué trabajo Ãbamos a hacer, no sabÃamos nada. Nosotros venÃamos a trabajar como un burrito.
ML: ¿Ni del lugar donde…?
IG: Nada, no sabÃamos nada.
ML: ¿Se le permitÃa tener con usted algunos objetos personales?
IG: Todo lo que podÃamos tener, por ejemplo, bueno ya cuando estábamos dentro del lugar donde Ãbamos a vivir, ya nos permitÃan tener un rastrillo, tener jabones, tener algo personal.
ML: ¿Pero cuando estaba cruzando?
IG: No.
ML: ¿Qué es lo que tenÃa usted con usted, con su persona?
IG: Pues no traÃamos nada, traÃamos algún cambio de ropa, era lo único que traÃamos.
ML: ¿Cuántos años trabajó usted oficialmente como bracero en los Estados Unidos?
IG: Trabajé cuatro años, oficialmente cuatro años.
ML: Y, ¿en dónde trabajó durante esos cuatro años?
IG: La primera vez que entré yo a trabajar, entré a Blythe y luego de Blythe, de ahà nos cambiaron a Brawley, luego de Brawley fuimos a dar para Arizona, a Avondale, Arizona, luego de ahà fuimos a dar a Wisconsin, que es, los estados pegados con Michigan, ahà terminé yo mi contrato.
ML: ¿En qué año?
IG: En el 19[64]. Ahà terminé mi contrato. Ya de ahà nos mandaron para México, a muchos de nosotros nos quitaron la mica de blanco y negro. A mà me quitaron la mica y entonces ya no podÃa, ya no traÃa nada, no tenÃa nada, ningún documento.
ML: ¿Qué tipo de trabajo hacÃan en estos lugares?
IG: Bueno, cuando llegué a Blythe ahà fui a piscar algodón, luego de ahà que fui a Brawley allá vinimos a la escarda, habÃa un trabajo que era un trabajo que siempre la gente le tenÃa miedo, o le tenÃamos miedo a ese trabajo. El simple hecho de la palabra, y le voy a decir porque asà se decÃa, venÃamos al desmadre, era al betabel, era a escardar el betabel y eso era el nombre de ese trabajo porque era muy duro. Como trabajábamos con el cortito que se dice hoy y se decÃa en ese tiempo, asà que estábamos todo el dÃa, doce horas, trece horas agachados, por eso era el nombre de ese trabajo. Después ya la compañÃa donde yo trabajé este trabajo, nos dio la facilidad de ir con otro patrón a la lechuga. Que era lo mismo, el desahije de la lechuga, la limpia de la lechuga, a cortar lechuga y a hacer los trabajos de lo que es la lechuga. De allà nos fuimos para Arizona, Arizona trabajé mucho tiempo y luego de ahà regresamos otra vez a Brawley y de Brawley ya nos fuimos a Wisconsin a lo mismo, a la lechuga. Me gustó mucho a mà el trabajo este de la lechuga, supe hacerlo, aprendà a hacerlo y aquà terminamos. Últimamente vine al tomate aquà a Greenfield y aquà terminé mi contrato en Greenfield.
ML: Hábleme de los otros braceros que trabajan con usted, ¿hizo algunas amistades duraderas?
IG: A veces uno en la vida encuentra buenas amistades, malas amistades, unas amistades que nos hablamos, nos platicamos, pero no tan profundo como encontramos unos amigos. Yo encontré un amigo que nos hicimos muy amigos con este señor, él cuando vino ya era un hombre casado, tenÃa dos niños. Este señor se jugaba su cheque en los dados, este señor era borracho, dejó de mandar el dinero a su familia y cada dÃa de cheque él apostaba su cheque completo y el dÃa que ganaba, se la llevaba pagando lo que perdÃa en semanas anteriores o en quincenas anteriores. Y asà duramos dos años trabajando en la misma compañÃa. Y un dÃa le pedà un dinero prestado a este amigo mÃo y me prestó dinero porque ganó. Y ya cuando me prestó el dinero, hice una carta porque yo sabÃa, éramos muy amigos, yo sabÃa cómo se llamaba su esposa, sus hijos, sabÃa su dirección y compré un money order y le mandé a su esposa el dinero que él me prestó. Tranzas, ¿verdad? Pero después la señora le contestó diciéndole gracias que otra vez se acordó de ella y le mandó dinero a sus hijos. Pero para ello él me dijo: “Oyeâ€, dijo, “me escribió mi esposa y me dijo que graciasâ€, dijo, “¿le escribiste?â€. Y le dije: “SÃâ€. Sintió el hombre, de momento se sintió mal, se salió y se fue a, se tomó unas cervezas y regresó y ya me dijo: “¿Sabes qué? Te agradezco lo que hiciste por mÃâ€. Y ése sà era mi amigo.
ML: ¿Tuvo otros amigos?
IG: Pues sÃ, tuve más amigos pero no, no llegamos a la misma confianza que este muchacho. Dejó de tomar, dejó de jugar, mandó su dinero para México.
ML: Qué bueno. ¿TenÃa usted mucho contacto con sus patrones en los varios sitios donde trabajó?
IG: Con los patrones no, con mis mayordomos sÃ. Bueno, a mà me ha gustado siempre ser una persona amistosa y yo tuve un supervisor también que fuimos muy amigos después de que era mi supervisor. Éramos amigos con él, me invitaba a su casa, me invitaba a comer, me invitaba a eso, no a tomar porque yo no fui borracho y yo no fui borracho y no, nunca fuimos a las cantinas, pero sà me invitaba. Mi mayordomo, tuve un mayordomo también que conmigo también fue muy buena persona. Pero con mis patrones solamente cuando estuve en Wisconsin allà sà nos hicimos amigos con un hijo del patrón y fuimos amigos. Ellos querÃan que yo me quedara con ellos allà en su rancho, pero la compañÃa con la que yo trabajé, no me dieron permiso de quedarme porque yo querÃa las cosas legales, no desertarme de la compañÃa, yo querÃa las cosas legales. Y yo me vine, nos venimos aquà a California y el muchacho vino hasta acá por mÃ. TenÃan ellos un aeroplano y vino hasta aquà y ya cuando llegó aquà donde yo estaba, yo ya me iba para México, nos hicimos muy amigos con este muchacho.
ML: Y, ¿usted sigue en contacto con la gente que, con sus amistades que hizo durante ese tiempo?
IG: No, porque estos, bueno, eran ellos de distintos lugares. No pudimos, no pudimos tener comunicación porque ellos se fueron para sus estados y yo me fui para el mÃo y no tuvimos comunicación ya después.
ML: ¿Usted tuvo mucha comunicación durante ese tiempo con su familia?
IG: Con la mÃa sÃ, siempre tuve mucha comunicación con ellos porque después de que yo era huérfano, siempre creà en la familia y sigo creyendo en la familia.
ML: ¿Se escribÃan cartas o por teléfono?
IG: La curiosidad era ésa, las cartas. Yo no sé si la amistad mÃa fue con este muchacho porque él sabÃa escribir, si la amistad mÃa fue porque él me hacÃa las cartas para mi familia.
ML: ¿Con su amigo que tenÃa esposa?
IG: SÃ. Y yo le tenÃa la confianza de que él me hiciera las cartas y le tenÃa la confianza de que él leyera lo que me decÃan de allá para acá. Por eso le digo que él fue mi amigo.
ML: Y cuando él no estaba con usted, ¿cómo es que leÃa sus cartas?, o, ¿cómo es que mandaba cartas?
IG: ¿Quién?
ML: Cuando su amigo no estaba con usted.
IG: Oh, no, duramos mucho tiempo juntos con él, duramos mucho tiempo de que nos hicimos amigos, duramos mucho tiempo con él. Siempre en la misma compañÃa trabajamos.
ML: ¿Él es del mismo pueblo?
IG: No. Él es de aquà de Gómez Palacio y yo soy de Michoacán, estamos retirados uno del otro.
ML: ¿Alguna vez fueron las autoridades mexicanas al lugar donde trabajaba?
IG: No.
ML: ¿Alguna vez fue la Migración a revisar documentación de los trabajadores?
IG: No, tampoco.
ML: Cuénteme un poco de su rutina diaria, ¿qué es lo que hacÃa cuando se levantaba?
IG: Bueno, siempre cuando nos parábamos en las mañanas, Ãbamos a desayunar, todos los dÃas Ãbamos a desayunar excepto los domingos. Los domingos nos parábamos ya tarde porque parecÃamos burros entre semana trabajando, ¿no? Y el dÃa domingo siempre ya nos parábamos tarde. Yo siempre creÃa en Dios, aunque estaba lejos de un lugar, de una iglesia católica, pero yo allà fui a una iglesia de hermanos, una iglesia bautista. Y yo después de que era una iglesia diferente a la mÃa, pero yo para mà lo que contaba era mi creencia mÃa. Yo entraba a la iglesia, yo creÃa en Dios y creÃa. Y yo, cada quién que haga las cosas suyas y yo hacÃa lo mÃo en mi religión, yo hacÃa las cosas mÃas.
ML: Y, ¿por qué empezó a entrar a la iglesia bautista?
IG: Porque yo querÃa buscar una iglesia católica pero no habÃa, pero no se pegan las cosas.
ML: Hábleme un poco de sus alimentos, ¿qué comÃan?
IG: Bueno y ésa es una parte de la que yo le dije hace un rato, que tiene uno que hablar de las cosas buenas también que hay y de las cosas malas. En una ocasión nos vinimos del field donde estábamos trabajando precisamente por el alimento que nos dieron. Según aquà nos hacÃan lo que acostumbramos en México nosotros, caldo de res, pero ese caldo de res era un agua blanca como llena de masa, como algo asà de… Porque estaba mal cocinado o estaba demasiado cocinado. Las papas se desbarataron, las zanahorias se desbarataron, entonces esto se miraba mal, la comida mal, mala comida. Y no nada más fue una sola vez, varias veces nos dieron este caldo a comer. O siempre nos daban lo que no estamos acostumbrados nosotros a comer, sándwich o a comer, pues estas cosas, ¿verdad? Y ese dÙÃa pues todos nos disgustamos por la comida y nos venimos del field caminando hasta el campo donde vivÃamos. Hubo varios carros que se pararon a preguntarnos que qué pasaba, pero no hablaban español, nosotros no hablábamos inglés, pos, ¿qué decÃamos?, ¿no? Ya cuando llegamos al campo, los del campo, o sea el campero ahÃ, los que se encargaban del campo hablaron a la policÃa pues, por nosotros que pasaba, fue un inspector a ver la comida y pues no, no habÃa comida. Al otro dÃa fue un inspector, porque al otro dÃa ya nos tenÃan una comida especial porque iba a ir un inspector. Fue el inspector y miró la comida y dijo el inspector, hablaba español, dijo: “Pues esta comidaâ€, dijo, “pues ni en mi casa me la danâ€, dijo. Y: “¿Qué tiene esta comida?â€. Y pues nosotros ahà la mayorÃa: “Pues vengan todos los dÃas a ver si nos dan lo mismoâ€. Nos dieron pollo dorado, muy bonito, pork chucks bonitos, bistec y todo arreglado, sopita de arroz y todo, pues que buena comida. Pero alguien, habemos de todas las personas unos que guardamos algo y otros que nada, alguien le llevó un plato con caldo de ese que nos habÃan dado. “Señorâ€, dice, “aquà está la comida que nos dieron, por esto nos venimosâ€. Entonces vieron la comida, dijo: “¿Ésta es la comida?â€. “SÃ, ésa era la comidaâ€. Pues no servÃa la comida. Y sacaron de ahà al encargado de la cocina porque estaba haciendo mala comida, pero digo yo que hay malos momentos y buenos momentos.
ML: Y, ¿cómo pagaba por su comida?
IG: Ya venÃa incluido, la comida venÃa incluida, la comida y el dormitorio, todo lo que ya venÃa incluido en el cheque que nos estaban pagando. Nunca nos dijeron: “Vamos a cobrarles tanto por la comida, vamos a cobrarles tanto por el dormitorio o por las transportacionesâ€. Tampoco nosotros nunca supimos cuánto nos iban a cobrar por cada, cada cosa que nos estaban dando.
ML: Y, ¿me puede describir un poco dónde vivÃa y cómo estaba amueblado, cómo se veÃa?
IG: La mayorÃa de gente vivÃamos en una barraca. Se le nombraba barraca a una galera que pa veces nombra uno una galera grande. HabÃa como vamos a decir ahà están estos documentos aquÃ, aquà habÃa camas, ahà habÃa camas y ése era un pasillo y todo esta sección era de camas hasta allá. Qué tan grande era el lugar, todo lleno de camas, posiblemente eran literas, acá arriba habÃa otra hilera de camas. Luego habÃa unos lugares donde habÃa barracas chiquitas, vamos a suponer, como este cuarto donde estamos aquÃ. Aquà caben cuatro camas individuales, de una personal, cuatro camitas. Yo vivÃa en estas barracas también y asà vivÃamos la gente. En ese tiempo que yo vivÃa en Wisconsin, allá nos daban, pues según que eran purgas, ¿no? Hay que decir las cosas como son, según que nos purgaban, pero yo era una piedra, no me hacÃan las purgas, pero un dÃa que me hizo.
ML: Y, ¿por qué los purgaban?
IG: ¿Mande?
ML: ¿Por qué los purgaban?
IG: Pues que pa que no estuviéramos enfermos del estómago, para que no estuviéramos cargados del estómago. Bueno, eso era lo que nos decÃan cuando la comida nos hacÃa daño. Ellos se sacaban esto de enfrente: “No, los purgamosâ€. Entonces un dÃa nos dieron una purga tan fuerte, estaba tan fuerte la purga que muchas de las personas ya no alcanzaron a llegar a ir al baño. ¿Te da cuenta cómo estaba todo aquello allà por el pasillo? Los que vivÃan allá y abrÃan la puerta, cada que abrÃan la puerta a media barraca y asÃ, pues aquello estaba de un asco. Las cosas son, hay que decirlas como son. Ya la mayorÃa de gente ya no estaba adentro de la barraca, estaba afuera de la barraca con sus cobijas allá acostados porque no podÃa estar la gente adentro de la barraca. Yo tenÃa ahÃ, fue en Wisconsin, tenÃa yo un perrito, un perrito muy bonito de esos cafecitos orejones que hay.
ML: Y, ¿cómo consiguió usted perro ah�
IG: Me hice amigo de un indio de ahà en Wisconsin y él me regaló ese perrito.
ML: Y, ¿cómo se hizo amigo de él?
IG: Trabajaba ahà con nosotros, trabajaba el indio con nosotros ahà y nos hicimos amigos y me regaló ese perrito él. Y ahà lo criamos, toda la gente querÃa, toda la gente que vivÃa ahà con nosotros querÃan a ese perrito y el perrillo pues querÃa a la gente. Pues ni el perro pudo dormir dentro de la barraca y a raÃz de esto me dieron la oportunidad de ir a la cocina. Ya me encargué yo de la cocina, ya la comida entonces ya la comimos mexicana.
ML: ¿Qué es lo que hacÃa?
IG: Los frijoles, el tiempo que estuvimos por acá no comimos frijoles, pero ya les cocà yo frijoles a los compañeros, los frijoles. Ya les hacÃa su chile con el molcajete, pero alguna licuadora les arreglaba sus jitomates asados, chiles asados y ya les hice muy diferente las cosas. Les hacÃa lechugas picadas, cebollas, tomates. Fue muy diferente la comida que yo hice a la que comÃamos. Ya habÃa la facilidad de que sà yo podÃa hacerles carne y hacerles comida o hacerles comida con salsa con chile todo eso. Ya fue muy diferente porque ya era comida mexicana y las personas que nos daban esa comida ahà eran americanos. Entonces por eso digo que las comidas son muy diferentes.
ML: Y, ¿cuánto tiempo usted duró usted haciéndoles las comidas?
IG: Seis meses. Éramos noventa y seis personas y duré seis meses yo, porque ya fue a las finales del contrato.
ML: Y, ¿trabajaba aún en los campos mientras que hacÃa…?
IG: Yo no trabajé en los campos ya.
ML: Se dedicaba a cocinar.
IG: Yo ya estaba en la cocina, ya directamente a la cocina. Ya ordenando qué Ãbamos a hacer: “Vamos a hacer, va a hacer, todo va a ser papas, hacer todo estoâ€. Las comidas, bueno, mexicanas. Y ya era muy diferente y ya cuando ya nos dijeron que se terminó el trabajo, pues mucha gente: “¿Ya nos vamos?â€. “Pues sÃâ€. “Pues noâ€. “Ya no vamos a comer igualâ€. Es diferente a la comida que tenÃamos, comÃamos nosotros comida con pan, toda la comida era con pan, no habÃa tortillas, no habÃa nada. Y yo allá les hice tortillas y le pedÃa al patrón una máquina, allá sà tuve yo la facilidad esa de tener el amigo mÃo, ese muchacho. Y le pedÃa al patrón que si podÃa dar, darme una máquina pa hacer tortillas y conseguirme harina. Todo lo que le pedÃ, todo me trajo el señor, me trajo frijol, me trajo todo lo que le pedÃa yo, todo me traÃa para cocinar.
ML: Y, ¿cómo es que usted aprendió a hacer todo eso?
IG: Le dije hace rato que yo me crié huérfano y una persona huérfana aprende muchas cosas, sea porque no lo quieren hacer o, sea que quiere uno depender de algo. Me enseñe a todas esas cosas y yo tuve esa facilidad de saber cómo se trabaja en una cocina, no los gustos de todas las personas, porque cada quién tiene su gusto, pero sà hacer una comida que todas las gentes se puedan comer. Yo sabÃa, me enseñé a hacer muchas cosas, hacer mole, me enseñé a hacer muchas cosas. Entonces ya cuando yo me casé, pues para mà ya no era, no era trabajo.
ML: Y, ¿en ese campo tenÃan baños con drenaje?
IG: Todo habÃa ahÃ, ahà habÃa baños, habÃa regadera, ahà tenÃamos muy buena, muy buen lugar dónde vivir, tenÃamos ahÃ. Lo único malo que tenÃamos, pues la comida, ¿verdad? Pero tenÃamos muy buen baño, estábamos a la orilla de una montaña, pues nos hicimos varios amigos que no éramos tan estrechos amistades, ¿verdad?, pero sà éramos compañeros que salÃamos por ahÃ. SalÃamos armados, con pistolas, no, por ahà no habÃa policÃas, no tenÃamos miedo de nadie y quién nos… Te agarra la PolicÃa porque traes un arma y estábamos fuera de la ciudad.
ML: Y, ¿cómo conseguÃan armas?
IG: Ãbamos a la ciudad y nos vendÃan armas, nos vendÃan armas a nosotros. O encargaba yo a mi patrón, pues hablaba con el hijo: “Dile a tu papá que si me puede traer una… Siempre me la traiba el señor. No éramos, no era pa pleito, no era pa nada. Por ahà salÃamos, yo tenÃa unas fotografÃas yo, que con el sombrero y mi pistola acá y todo eso, pues estábamos jóvenes, veinte años.
ML: Y, ¿qué hacÃan con las pistolas cuando regresaban a México?
IG: Pues las vendÃamos por acá a algotros compañeros. “Te vendo mi pistolaâ€. Ya no en la que la compramos, más barata, pero la vendÃamos porque sabÃamos que no la podÃamos traer para acá. Pero nos pasábamos los jóvenes en ese tiempo, yo allá cuando estaba en Wisconsin… A veces aprende uno muchas cosas y yo tuve amigos que eran borrachitos, les gustaba ir a las cantinas allá y se iban a la cantina, a veces de que me llevaban unas botellas de wine o me llevaban algunas cervezas. No fui yo cantinero, yo no fui cantinero, pero el muchacho este amigo mÃo, Ãbamos al cine con él. Él tenÃa su novia, éramos chavalos y por ahà también él me consiguió una muchacha por ahÃ, una amistad y pues yo no sabÃa qué decirle a la muchacha pero ni ella tampoco. Pero eso no importa, cuando uno es joven no importa qué decir, no importa eso, con el sentir tiene uno, con eso tiene. Y el muchacho a veces que él nos decÃa, él a ella le hablaba, pues dile algo, o a veces a mà me hablaba el español. “No, pues dile algoâ€. “Yo le digo lo que tú quierasâ€. Pero sà éramos también con este muchacho amigos.
ML: Y, ¿qué es lo que hacÃan ustedes para divertirse?
IG: Pues yo por ejemplo, como yo no iba a las cantinas, yo me salÃa con algotros compañeros con la arma a tirar balazos a lo tonto. PonÃamos algunas botellas o algunos botes de soda o algo, salÃamos ahà a lo tonto.
ML: ¿Practicaban deportes o iban al cine?
IG: No, porque estábamos retiraditos de la ciudad, estábamos retirados.
ML: ¿TenÃan un radio?
IG: SÃ, tenÃamos radios.
ML: ¿Escuchaban hasta televisión?
IG: SÃ, sà tenÃamos televisión ahÃ. Era la persona ahà como, donde estábamos nosotros ahà en este rancho, era un rancho lejos de la ciudad y en la parte de comedor, una parte del comedor habÃa un televisión y ahà mirábamos nosotros partes de la guerra, cuando hubo guerra, el radio, escuchábamos en el radio, escuchábamos todo eso.
ML: Y, ¿habÃan estaciones de radio en español?
IG: La estación de radio en español la oÃamos como más o menos a las dos de la mañana, más o menos de ese horario, habÃa que desvelarse. Por ejemplo los domingos que no salÃamos, el sábado nos tenÃamos que desvelar para oÃr la música en español.
ML: ¿En Wisconsin tocaban música en español?
IG: Era una estación que habÃa aquà en Estados Unidos, que era muy grande y se oÃa en Estados Unidos, no simplemente aquà y acá, se oÃa en Estados Unidos. Era un radio de mucha potencia, era un radio muy grande. En este radio, la gente que habÃa en este radio, mandaba por ejemplo, catálogos y hablaban en el radio que querÃan un catálogo de esto, de esto y del otro. Porque por ejemplo ponen música y luego ya ponen anuncios y ya empezaban a anunciar que sà querÃan al anuncio, en el anuncio querÃan esto o querÃan lo que quisieran, un radio o unas plumas, o ropa o lo que uno quisiera. Le mandaban a uno un catálogo y ya en el catálogo ya venÃa allà los precios de cada cosa y ya uno decÃa: “Pues yo quiero estoâ€.
ML: Y, ¿cuánto le pagaban cuando trabajaba en estos varios sitios?
IG: ¿A m�
ML: SÃ, el primer año, ¿cuánto le pagaban?
IG: El primer año lo hicimos también este trabajo a contrato, casi la mayorÃa del trabajo eran contratos porque casi no pagaban, no nos pagaban por horas porque era bajo contrato. Casi la mayorÃa del tiempo fue bajo contrato.
ML: ¿Todos ganaban igual?
IG: SÃ, todos ganábamos igual, no habÃa quién ganara más que otros, porque todo era igual.
ML: Y, ¿los años después de ése?
IG: No me acuerdo yo los últimos años, o sea los últimos meses, no me acuerdo yo cuánto me pagaban la hora, por horas.
ML: ¿Pero le pagaban en efectivo o en cheque?
IG: No, en cheque, nos pagaban en cheque. Ahà mismo cambiábamos el cheque, ahà mismo en la compañÃa. Ahà nomás daban el cheque y yo pues no escribÃa… y ya listo.
ML: ¿Sólo con su huella?
IG: SÃ, porque dicen que es más efectivo una huella que un escrito, eso se dice, ¿no?
ML: Y, ¿qué hacÃa usted con su dinero?
IG: Lo mandaba para México.
ML: Y, ¿siempre recibió el pago correcto por las horas trabajadas o por el contrato?
IG: Bueno, yo no sabÃa si me faltaba o me sobraba. Yo recibÃa mi dinero y no sabÃa, cuánto pude haber ganado más o cuánto pude haber ganado menos. Yo el caso es que a mà me llegaba mi cheque y ya, luego iba y lo cambiaba. Yo trabajé en la compañÃa Royal, se llamaba la Royal la compañÃa. Éramos, era una compañÃa de noventa y seis personas éramos en la compañÃa y cuando terminó la compañÃa aquÃ, aquà se terminó la compañÃa. Era una compañÃa muy grande, muy, muy grande ya, era muy grande y éramos poquitos, empezó con poquita gente.
ML: Y, ¿tuvo problemas en el trabajo?
IG: No.
ML: ¿Nunca?
IG: Nunca tuve yo problemas en el trabajo.
ML: ¿Qué sucedÃa en caso de accidente o una enfermedad?
IG: TenÃamos doctor, tenÃamos derecho a doctor, tenÃamos derecho… Me sacaron esta muela en Arizona precisamente, cuando me llevó el mayordomo al doctor, me la sacó el doctor. Él me dijo que era sin dolor, pero sin dolor de su corazón, porque sentà que me tronó hasta acá cuando me jaló la muela.
ML: Hasta la frente.
IG: Y ya le dijo el mayordomo que qué puedo. “Qué puede hacer, ¿verdad? Qué puede hacer él. Dice: “Pues llévalo a que se coma un menudo y llévatelo a trabajarâ€. No era él el que estaba malo, ¿verdad?, por eso dijo que era sin dolor.
ML: Y, ¿cuáles eran las quejas más comunes entre los braceros de el trato?
IG: Bueno, las más comunes que habÃa entre nosotros con la gente, primero que nada era la comida, porque aunque no tenÃamos qué comer ahà nosotros los mexicanos, pero sà sabÃamos qué comida estaba mal hecha mal cocinada. La otra cosa que siempre nos quejamos era de los malos tratos dentro del trabajo, porque habÃa veces que no tenÃamos agua, habÃa veces que no tenÃamos baño, habÃa veces de que nos trataban mal dentro del trabajo, nos pedÃan más de lo que podÃamos hacer. O sea que hubo también pues malos tratos, ¿no? Por eso digo yo que hubo malos tratos y que hubo todo esto malo, pero también hubo lo otro bueno que ganamos un dinero para mandar a nuestras familias.
ML: ¿Alguna vez sus compañeros de trabajo o usted, organizaron una protesta laboral?
IG: La que hicimos cuando nos venimos del algodón, ésa fue una de las protestas que hicimos porque precisamente la comida. Ésa fue una protesta y estuvo grande porque fue PolicÃa, fueron con la PolicÃa a ver qué estaba pasando. Pues venÃamos nosotros y no dejábamos pasar a los carros y todo eso y: “¿Qué pasó?â€. Pitaban los carros y bueno, ésa fue la protesta que tuvimos. Y la otra pues, que tuvimos acá que ni el perrito dormÃa en la barraca. Esa fue la otra protesta pues de ahà que hubo y por la cual… Era una señora la que, la encargada de la cocina y yo sentÃa a veces que esta señora se fuera porque yo me llevé bien con la señora y esa fue otra protesta que hicimos también por la comida.
ML: ¿Regresó usted a México cuando terminó su contrato de trabajar?
IG: SÃ, yo regresé para México y ya estuve allá en México y luego al tiempo me casé y luego ya me vine para acá y aquà estoy de ese tiempo para acá.
ML: Y después de terminar con su trabajo, ¿qué tan fácil era conseguir un nuevo contrato después del primer contrato?
IG: Bueno, de cuando se terminó el contrato, después era, habÃa facilidades porque habÃa mucha gente que iba a piscar algodón para ganarse la carta que se decÃa en ese tiempo. Y se iban a piscar algodón a Sonora, allà hubo mucha gente que vino a ganarse la carta pa venir para acá. Y esa fue otra oportunidad que hubo aparte de la que dieron los gobiernos para darle a las personas una lista que vinieran a los Estados Unidos, porque las personas venÃan a, venÃan en lista también pero venÃan a ganarse una carta piscando algodón.
ML: Y, ¿qué era la relación en los varios sitios donde usted trabajó entre los braceros y los mexicoamericanos?
IG: En ese tiempo habÃa mucho, pues no habÃa muchos mexicanos, no habÃa muchos mexicanos. Era muy raro un mexicano que estuviera aquÃ.
ML: ¿Pero nacido en los Estados Unidos?
IG: Nacido en los Estados Unidos, porque aquà la mayorÃa que habÃa eran indios, en Arizona, indios. Aquà habÃa también en ese tiempo uno destos como japoneses o algo asÃ, aquà habÃa también de esas razas, pero no habÃa muchos mexicanos aquÃ. Por eso a nosotros hasta nos querÃan los güeritos, nos querÃan a nosotros las muchachas también. Pero nomás empezamos a invadir aquà y ya no nos quieren.
ML: ¿Por qué?
IG: Pues es que habemos de todo, habemos tranzas, habemos personas que no deberÃamos estar aquà y pues asÃ.
ML: Y muchos braceros salÃan con mujeres blancas americanas.
IG: SÃ, sà es cierto. HabÃa personas que, yo les digo que yo tenÃa, me presentaba con una muchacha americana y muchas de las veces, hay muchas cosas en la vida, no simplemente yo tengo que ser una belleza para yo salir con una mujer, no simplemente una mujer tiene que ser una belleza para salir con un hombre. Todo se da, cómo es una persona, cómo es la otra persona, hay quÃmicas que… Yo simplemente le dije hace un rato, tengo que decirle algo a la mujer para sentir que la quiero, ni la mujer tampoco tiene que decirme nada pa yo sentir que la quiero, simplemente se da y se da.
ML: Y cuando regresó a México, tipo después de su año final como bracero, último año de bracero, ¿qué es lo que hizo en México? Sé que se casó pero, ¿en qué trabajó?
IG: Cuando yo llegué a México, yo allá para mà fue muy diferente ya distinto a lo que fui aquÃ, el tiempo que estuve aquÃ, porque yo ya para mÃ, ya era muy diferente y la vida allá y la vida aquÃ. Primero que nada, yo ya no recibÃa un cheque como aquÃ, luego a veces también la ropa no era igual aquélla que ésta. La comida últimamente ya no era igual aquélla que ésta, porque yo aquà comÃa carne todos los dÃas sà yo querÃa, primero que nada pues yo estaba trabajando en la cocina, ¿no? Yo ahà podÃa comer toda la comida que yo querÃa, pescado y todas esas cosas, ya pa mà era muy diferente. El trabajo aquà y aquél de allá de México no era igual, bueno, primero que nada, yo el trabajo aquÃ, lo hacÃa pues no forzado. Pero casi sà porque yo tenÃa que hacer el trabajo para presentarle a mi patrón un trabajo, y en México no le presentaba a nadie más que a mà mismo. Si yo querÃa trabajar todo el dÃa, lo trabajaba y si no, pues con un ratito. Porque allá es media floja la gente, es muy diferente y allá dice uno: “Ay, ya nomás trabajo hasta aquà y ya me voyâ€. Hasta es uno medio flojo. Y no se está haciendo uno más de mal a uno mismo. ¿Cómo vamos a prosperar si no trabajamos? Y a parte de que yo ya trabajé mucho, yo trabajé mucho, yo como huérfano trabajé mucho.
ML: Y, ¿qué significa el término bracero para usted?
IG: ¿En término un bracero?
ML: El término, la palabra bracero, ¿qué significa para usted?
IG: Para mÃ, ¿qué es bracero? Bueno, primero que nada, un bracero es que vino aquà a poner su brazo pa darle de comer a la gente que necesitaba aquÃ. Porque eso es nombre de bracero, brazos fuertes, haber venido a hacer un trabajo aquà y darle de comer a la gente que no tenÃa qué comer aquÃ. Darle un camino a la gente que no podÃa tener un camino ya aquÃ, porque eso venÃamos a hacer, a darle de comer. Venimos aquà nosotros a Estados Unidos a luchar, a pelear con el hambre, eso venimos a hacer aquà nosotros. Nosotros no peleamos con armas, pero peleamos con los brazos, braceros, para darle de comer a esta gente y mandarles aquellos armas también pa que pelearan. Porque, ¿con qué compraban las armas si no tenÃan material? No tenÃan dinero. Nosotros venimos a hacer todo eso, venimos a levantar el paÃs porque vivimos aquà cerca de cinco mil, sÃ, cerca de cinco millones de personas. ¿Se da cuenta de cuánta gente venimos pa aquà a apoyar a Estados Unidos. Y también fuimos parte de las guerras que hubo, porque con el trabajo de nosotros, ellos también estuvieron allá sin pendiente porque ellos tenÃan que comer aquà a sus hijos de ellos y a sus esposas. Entonces pa mà eso es bracero.
ML: ¿Cómo se siente usted de que lo llamen bracero?
IG: Bien, bien, me llamo, me siento bien porque eso es parte mÃa. Y no cualquiera es bracero, ni cualquiera fue bracero.
ML: Y en término general, sus recuerdos de haber trabajado como bracero, ¿son positivos o negativos?
IG: Hay de las dos partes, hay positivos y negativos. Primero que nada, tuvimos buenas experiencias y tuvimos malas experiencias, porque una de las buenas es que nosotros, muchos de nosotros, nos hicimos responsables porque ya fuimos responsables los que estuvimos jóvenes aquÃ. Porque el trabajar es ser uno responsable, no simplemente el tener dinero es responsable la gente. Porque eso lo hace a uno ser irresponsable, porque no lo lleva a uno a ninguna parte, el agarrar el dinero y agarrar el dinero, no lo lleva a ninguna parte. Ser responsable es trabajar, las personas que sepa uno cuánto cuesta el dinero. Y la otra parte fue que pues tuvimos las malas experiencias. Pero ya para mà hay cosas buenas y cosas malas y hay que tomarlo por el lado amable dice el Señor.
ML: El haber sido bracero, ¿cambió su vida de alguna manera?
IG: Pues sÃ, sà cambió porque me hice responsable. Soy responsable, ya de ahà para acá, ya fui una persona responsable en mi casa, aunque cuando era jovencito de a tiro yo ya sentÃa responsabilidad. Ya cuando fui bracero ya me sentà más responsable porque yo ya fui ya un hombre más responsable, ya de otro mundo, ¿no? Y yo ya me sentà más responsable.
ML: Ya acabamos con estas preguntas pero, ¿hay alguna cosa que quiere compartir u otra cosa que quiere contar?
IG: Ya estamos tarde.
ML: Okay.
IG: Yo quisiera, hay muchas cosas qué contar, hay muchas cosas qué contar. Por ejemplo, una de ellas se la voy a contar antes de irnos. Antes en Empalme, Sonora se habÃa una comida. Estuve un tiempo yo en Empalme y mi hermano también, venÃamos para acá y duré dos dÃas yo que no comÃa, no tenÃa, no tenÃa dinero pa comer y pues sà tomaba agüita y todas esas cosas, pero no comida. Y nos encontramos con mi hermano, ya me dice: “¿Qué pues, dónde andas?â€. “Pos por ahà caminando, ¿ya comiste?â€. Le dije: “Ya, ya comÃâ€. Pero no habÃa comido. Yo dije: “Pobrecillo, pues era más chico que yo, o es más chico que yo, ¿cómo voy a…
ML: ¿Usted es el mayor?
IG: SÃ, yo soy el mayor de ellos. ¿Cómo voy a presentármele en quiebra o que no he comido, ¿verdad? “Vente, vamos, te voy a invitar una gallina, vamos a la gallinaâ€. Ya llegamos allá al restaurantito ahà y ya se arrimó la persona ahÃ, y dice: “¿Van a comer?â€. “SÃ, me das dos gallinasâ€. Hijo de la fregada ya dije: “Yo llevo dos dÃas sin comer y voy a comer gallinaâ€. Bueno, ya fue el señor y nos trajo un plato a cada uno de frijoles con arroz ahà y un chile de esos a mordidas y tortillas, un montón de tortillas. Pos ahà estamos comiendo y yo estaba, pos yo comà rápido. Me terminé los frijoles dije yo: “Voy a esperar la gallinaâ€. Acabamos de comer y nos echamos unos vasitos de agua. Le dije: “¿A qué hora llegan con la gallina?â€. “Y luego lo que te comisteâ€. “Pues esos eran frijoles con arrozâ€, dijo. “Pues ya está la gallina aquÃâ€. Pregúntales y verás. Es parte de la historia de nosotros y hay muchas cosas, hay muchas cosas nomás que ya es tiempo que yo, me voy a retirar porque tengo algo que hacer en mi casa.
ML: Okay, gracias.
IG: Gracias.
Fin de la entrevista
Original Format
Mini Disc
Duration
1:04:37
Bit Rate/Frequency
24 bit
96 k
96 k
File Name Identifier
Gomez_SALC009
Citation
Loza, Mireya and Gómez, Ignacio, “Ignacio Gómez,” Bracero History Archive, accessed October 29, 2025, https://braceroarchive.org/items/show/156.