Rodrigo Flores
Title
Rodrigo Flores
Description
Biographical Synopsis of Interviewee: Rodrigo Flores was born on April 13, 1933, in Progreso, Chihuahua, México; he and his family moved to Parral, Chihuahua; while there, he went to school and learned to read and write; he soon dropped out of school in order to begin working and help support his family; when he was sixteen, he came to the United States illegally to work; later, in 1955, he began the enrollment process to become a bracero.
Summary of Interview: Mr. Flores briefly recalls his childhood and early adolescence; when he was sixteen, he started working in the United States illegally and was deported several times; he later joined the armed services in México; in 1955, after his service was over, he enrolled in the bracero program; he relates the details of the recruiting center in Chihuahua, Chihuahua, México, and how the manager of the center at the time aided him in the hiring process; from there, he was sent to Rio Vista, a processing center in Socorro, Texas, where he went through rigorous screening procedures; he usually worked in the El Paso, Texas area picking cotton; the second time he came to work, in 1956, he did not go through Rio Vista; instead, he crossed directly into the U.S. with a group of special labor braceros; his family then moved to Ciudad Juárez, Chihuahua, México, and he was able to visit them every weekend with a letter of permission from his boss; years later, in 1962, with the help of his former boss, he became a legal citizen of the U.S., and he has remained in the country ever since.
Summary of Interview: Mr. Flores briefly recalls his childhood and early adolescence; when he was sixteen, he started working in the United States illegally and was deported several times; he later joined the armed services in México; in 1955, after his service was over, he enrolled in the bracero program; he relates the details of the recruiting center in Chihuahua, Chihuahua, México, and how the manager of the center at the time aided him in the hiring process; from there, he was sent to Rio Vista, a processing center in Socorro, Texas, where he went through rigorous screening procedures; he usually worked in the El Paso, Texas area picking cotton; the second time he came to work, in 1956, he did not go through Rio Vista; instead, he crossed directly into the U.S. with a group of special labor braceros; his family then moved to Ciudad Juárez, Chihuahua, México, and he was able to visit them every weekend with a letter of permission from his boss; years later, in 1962, with the help of his former boss, he became a legal citizen of the U.S., and he has remained in the country ever since.
Creator
Carrillo, Fernanda
Flores, Rodrigo
Date
2003-03-27
Subject
Bracero
Contributor
Cristóbal Borges
Rights
Institute of Oral History, The University of Texas at El Paso
Language
spa
title (Spanish)
Rodrigo Flores
creator (Spanish)
Carrillo, Fernanda
contributor (Spanish)
Cristóbal A. Borges
Rights Holder
Institute of Oral History, The University of Texas at El Paso
Online Submission
No
Original Format
Mini Disc
Duration
1:03:00
Bit Rate/Frequency
24 bit
96 k
96 k
Transcription
Nombre del entrevistado: Rodrigo Flores
Fecha de la entrevista: 27 de marzo de 2003
Nombre del entrevistador: Fernanda Carrillo
Esta es una entrevista con el señor Rodrigo Flores el día 27 de marzo de 2003 en la ciudad de El Paso, Texas, entrevistando Fernanda Carrillo. Esta entrevista forma parte del Proyecto de Historia Oral Bracero.
FC: Buenos días señor.
RF: Buenos días o tardes.
FC: Tardes, ¿verdad?
RF: Claro que sí.
FC: ¿Dónde y cuándo nació usted, señor Flores?
RF: Yo nací el 13 de abril del año [19]33, en el estado de Chihuahua, en un rinconcito del estado de Chihuahua.
FC: ¿En dónde? A ver dígame a ver si lo conozco.
RF: Colonia Progreso, tiene algún nombre antes, pero el nombre cuando yo nací según al presente, dice Colonia del Tegón, pero últimamente se llamaba Colonia Progreso. Podemos decir que un rinconcito del estado de Chihuahua.
FC: Y platíqueme de su familia ahí dónde nació usted. ¿Era muy grande ahí?
RF: No, era un pequeño rancho, usted sabe que en México un rancho son muchas casas. En Estados Unidos así entre los valles, un rancho es una casa y en México, un rancho le llaman a cinco, diez, veinte casas. Pos la gente, usted sabe, poco pobre y luego pos en aquellos tiempos sí llovía, se veía verde, cosa que orita pos, hay mucha carestía de la vida ahí. Pues estamos hablando del lugar donde nací yo. Y pos llega el tiempo que la misma vida lo hace uno salir a buscar otros horizontes, porque así es.
FC: ¿Usted fue a la escuela? Ahí dentro de su…
RF: Sí, ahí estudié, no, no aprendí mucho. No fui muy… Pero ahí estudié mismo en mi, en mi… Ahí en donde nací. Pero no fui de muy buena memoria y serían los once años cuando tuvimos que emigrar al pueblo y pos ya no estudié, ya no pude. De todos modos mi memoria no era muy capacitada en aquellos tiempos, no digo que ahora estoy capacitado. Pos sí, porque leo historia y todo, pero ahí estudié y déjeme decirle una de las cosas muy importantes que… Es una de las cosas que le voy a decir sinceramente, no siento… Voy a hablar sinceramente por amor, de la verdad que le debo a México la poquita escuela que me dio, el poquito tiempo que viví allá, porque la mayor parte de mi vida la viví aquí. Pero eso lo recuerdo muy, que me quede mucho el recuerdo de México que me enseñó poquito a leer y a escribir. Y siempre que estampo mi firma ahí, me acuerdo que una de las cosas que le debo a México que nunca se me olvidará. Pero por cosas del destino, pos tuve que, pos cruzar la frontera, primero ilegal; ya después me legalicé y todo y pos no, no digo que estoy muy bien económicamente aquí, pero me siento feliz en mi país, me siento orgulloso de poseer la ciudadanía en este país pobremente. Dios nos dio cuatro hijos aquí, a mí y a mi esposa y pos…
FC: ¿Sus hijos ya nacieron aquí en Estados Unidos?
RF: Sí, mis hijos sí, ellos son unos americanos por nacimiento y yo soy, y mi esposa semos americanos por naturalización, porque es la palabra oficialmente. Hay gentes que entienden la cosa al revés o no saben o no sé qué. Pero mire, yo soy como te puedo decir o mentir la cosa, esto es cierto. Claro, yo he platicado con personas que saben, que comprenden las cosas, como hay unos que tampoco no entienden o no sé qué será. Pero soy mexicano por nacimiento y americano por naturalización, eso oficialmente. Eso es cierto, es una cosa verdadera, no se puede, pos hacer más confusión, porque así es. Sí, americano por naturalización y pos Dios nos dio cuatro hijos aquí en Estados Unidos y pos uno no digo que soy una eminencia, pero sí lograron algo aunque sea aquí. Dos son universitarios, uno técnico en electrónica y el otro trabaja en las escuelas del Distrito de Socorro. Pero todos para mí, son ellos, son suaves personas.
FC: Pues muy bien, les fue muy bien.
RF: Sí, uno de ellos, el más chico orita, el 21 de febrero, después de que estamos en entrevista se graduó, como dicen en inglés: “Second Lieutenant” pa la fuerza aérea.
FC: Ah, qué bien
RF: Y nos sentimos orgullosos de él, pobremente nos sentimos orgullosos. Según iba a ser pa First, Lieutenant, pero según, a veces que no sabe uno lo que tiene uno en su casa. Que la poca inteligencia, pos tiene más cerebro, lo pasaron a Second Lieutenant en su graduación. Es un orgullo, un orgullo para la hispanidad de todos modos.
FC: Claro que sí.
RF: Y nos sentimos felices, yo y mi esposa aquí en el país, pobremente nos sentimos a gusto, sea lo que sea. Yo ahora, toda mi vida, casi la he vivido aquí. Porque pos tenía dieciséis años cuando vine pa acá, no me legalicé luego, pero yo digo que de ese momento de los dieciochos, ya casi tenía la mira que a lo mejor no me iba.
FC: Que se iba a quedar ya a lo mejor aquí.
RF: Dios nos ayudó que fue posible que nos quedáramos y todo y estar haciendo bien para la nación, pa ser honorables pobremente, pero ser honorables personas y usted sabe.
FC: Cuando usted dice que se vino primero, que tuvo que emigrar de su pueblo. Ahí de Progreso a otro pueblo, ¿a dónde se fue?
RF: Esto fue como el mes de julio del año [19]44. Yo tenía once años cuando nos fuimos al pueblo y dos hermanas se fueron adelante primero, que una ya murió, dos hermanas. Y al poco tiempo, pos nos fuimos mi mamá y yo y pos buscando otros horizontes.
FC: ¿Nada más usted tenía dos hermanas?
RF: Sí. Hay otra familia, porque mi papá tenía otra esposa. Pero no, no nos encontramos mucho. Pero oficialmente en mi familia son yo y dos hermanas, que una orita ya murió, en el [19]91. Y luego ahí en Parral…
FC: Ah, se fueron ustedes allí a Parral.
RF: A Parral, sí. Allí yo llegué de once años. Allí cumplía los dieciséis, cuando me vine pal norte.
FC: Ah, o sea que usted duró allí como unos cinco años en Parral.
RF: Como unos cinco años en Parral, como unos cinco años.
FC: Y, ¿usted fue el único de que se vino acá para el norte de su familia, o de su familia se vino alguien más?
RF: No, de mi familia personal, nomás yo.
FC: ¿Nada más usted?
RF: Sí, viajé yo, venía a pasar de ilegal por supuesto, ¿no?
FC: Sí.
RF: Pero ya veníamos ya pal norte, como dicen: “Pal norte”.
FC: Y, ¿qué estaba usted haciendo allí en Parral? Porque me dice que ya no iba a la escuela, ¿empezó a trabajar ahí en…?
RF: Trabajé en una, casi la mayor parte de mi vida trabajé en una bodega de frutería ahí ayudándole ahí a barrer, a acomodar mercancía o llevar mercancía en unos carritos de mano a las tienditas ahí de la ciudad.
FC: ¿Eso fue lo que estaba usted haciendo?
RF: Ey.
FC: ¿Cómo se enteró usted de acá del trabajo en el norte?
RF: Ah, pos es que mire, yo llegué el año [19]44 allí como en el mes de julio. Según este compadre que tengo aquí, que se llama la Colonia Siglo XX, sé exactamente que fue el 8 de julio, porque ahí saqué la fecha. En eso llegua ahí un amigo que conocí en Parral llegó al final del [19]48, que ya conocía acá el norte. Yo no lo conocía, conocía a unos parientes de él, pero a este no lo conocía hasta el [19]48. A finales llegó y ya empezamos a platicar: “Oye, ¿qué? Nos vamos pa el norte entrando marzo”. Fue al final del [19]48, y el [19]49 ahí en marzo nos vamos pal norte.
FC: Se animó luego luego.
RF: Sí, nos venimos como a mediados de marzo. Me acuerdo yo que andaba a caballo casi desde que cumplí mis dieciséis años, cuando me vine pa acá. Aquí pal norte, como dice él, la tierra de los americanos. (risas) Claro que vamos a hablar… usted sabe bien, yo no sabía, hasta últimamente que me daba cuenta por leer que lo que es Canadá, Estados Unidos y México, consideran América del Norte. Eso yo no lo sabía, hasta últimamente, pero de todos modos, si está uno en México o en Canadá, está en América del Norte. Que no tenga uno los pies en Estados Unidos, es otra cosa.
FC: Eso ya es diferente.
RF: Sí, eso diferente. (risas)
FC: Muy bien. Y se vino usted con su amigo, y, ¿a dónde?, ¿a qué parte de Estados Unidos?
RF: Cruzamos por ahí por ese lugar de Anapra y del valle, sí. Es que…
FC: ¿Aquí en Ciudad Juárez?
RF: No, ya entrando pa acá, pa Estados Unidos.
FC: Ah, okay.
RF: No, en Juárez nomás fuimos momentáneamente un par de noches y dormir a la intemperie. Usted sabe lo que es la vida cuando sale uno, ¿no? Cruzamos la línea divisoria por allá por Anapra, Nuevo México, allá y pos a navegar y todo, nomás que…
FC: Y, ¿cómo fue esa vez que cruzó? ¿No fue legal? Esa vez cruzó de…
RF: De ilegal.
FC: No ilegal. Ah, okay.
RF: Fui ilegal.
FC: Ah, okay.
RF: Sí.
FC: Y, o sea, ¿cómo se cruzaban en el día o en la noche? ¿Cómo era?
RF: En la anochecer cruzábamos la… cruzaba al anochecer, cruzábamos la línea fronteriza. ¿Todo eso lo estás grabando?
FC: Sí, señor.
RF: Sí, la línea fronteriza. Nomás que mi amigo conoció allá a un americano, un señor que yo conocí, muy buena gente el señor. Ya lo conocí a él y yo, por medio de ése lo conocí, por medio de mi amigo lo conocí. Y fue ese señor el que me ayudó a mí a legalizarme aquí, pero hasta el [19]56. Entre el [19]49 y [19]52 era ilegal, hasta el [19]56 que me legalicé, en el verano del [19]56.
FC: Sí, del [19]49 al [19]52 estuvo usted trabajando aquí.
RF: No, no, permanente no.
FC: Ah, okay.
RF: Porque del [19]49 al [19]52 era ilegal.
FC: Ah, okay. Y, ¿qué trabajaba? ¿Qué trabajos podía conseguir aquí en…?
RF: ¿Aquí? Casi por lo comúnmente era en la labor, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Cortando hierbas en los algodones, regando las labores…
FC: Y, ¿usted iba y venía de México a Estados Unidos?, o, ¿se quedaba aquí ya?
RF: No, es que alguna vez no, no; es que algunas veces, la mayor parte casi, algunas veces me echaron, lo agarraban a uno y lo echaban y se devolvía uno, se devolvía uno otra vez.
FC: Sí, señor. Y, ¿cuándo fue el año en que usted vino como bracero?
RF: Lo del bracero nomás fue poquito del otoño del [19]55 y poquito de la primavera del [19]56.
FC: Y, ¿cómo se enteró usted de que existía este Programa Bracero?
RF: Yo oí decir desde como el año [19]43, oí decir que los braceros y todos allá, o sea, más o menos. Allá en Parral oí de, que los braceros y que los braceros. Fue el año [19]43, parece, y duró hasta el [19]63, el [19]63 se acabó eso, se acabó el Programa Bracero.
FC: Sí señor. Entonces, ¿usted ya había oído hablar de esto allá en Parral?
RF: Sí, ya se oía decir que los braceros y que los braceros y: “vámonos de braceros”, y que… Sí, y la ilusión de que venía a Estados Unidos y todo eso.
FC: Y, ¿cómo viene y se hace bracero? ¿Qué proceso tuvo usted que seguir o a donde tuvo que ir?
RF: La primera vez que fui yo, ta allí en Chihuahua. En Chihuahua se contrataba uno y lo traían a uno aquí al centro de contratación en Río Vista.
FC: Ah, ¿allí en Chihuahua tenía que ir usted primero allá al centro?
RF: Sí, en Chihuahua, pero después había unos ligeros contratos, un acuerdo con el Gobierno de aquí, que le decían: “Que vamos a pasar a especiales”. Era un tanto grupo, unos cuantos, no eran muchos aquí, los pasaban aquí en el bordo. No tenían que ir a Chihuahua, pero eso era esporádico, no era así.
FC: Los Especiales, ¿les decían a esos?
RF: Especiales, sí. El centro especial de… Exactamente pa contratar ahí en Chihuahua, fue en Chihuahua todo el tiempo. Pero ese era unos grupitos que pasaban a veces algún acuerdo aquí con los rancheros y el gobierno de México: “Echen unos cuantos especiales pa pasarlos pronto”. A unos, pos no una cantidad no muy grande, así nomás de emergencia, ¿me entiende?
FC: Ah okay, sí, sí. Y los escogían de aquí en el bordo y se cruzaban aquí.
RF: Sí y ahí los pasaban ahí por el… Y los llevaban al centro con todo y los… Salen unos camiones ahí al centro de contratación y ahí le daban ya su permiso y ya los rancheros llegaban y…
FC: ¿Cómo se llamaba este centro de contratación?
RF: Río Vista.
FC: El Río Vista.
RF: Río Vista.
FC: Sí señor. ¿A usted le tocó cuando fue allá a Chihuahua pasar aquí por Río Vista?
RF: Sí.
FC: ¿Por el centro ese? Y en Chihuahua, ¿qué tuvo que hacer?, ¿qué le pedían para ser bracero?
RF: ¿Ahí en Chihuahua? Bueno, si los jóvenes que estaban jóvenes de edad, hay un papel que le dicen la cartilla militar cuando cumple uno dieciocho años, le pedían que la cartilla, era oficialmente, nomás eso, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: O daban un número, como ellos pasaban como cincuenta mil, daban un número y iban por número saliendo.
FC: Ah okay. A quien le tocaba ir primero y todo eso.
RF: Sí, nomás que el número era un… Yo no me tocó eso, yo era otra… El número era nomás, era un pretexto para detenerse de la gente. Yo arreglé de otro modo allí, más rápido, no de pagando, no. Una cosa ahí muy… Es muy grande la historia de seguirla, pero le daban número para detener a la gente. Era porque…
FC: A ver, cuénteme cómo logró hacer eso.
RF: Bueno, mire, se la voy a platicar pa que me entienda mejor. Yo fui a Chihuahua y llegué. Porque mire, como yo últimamente que me echaron de mojado aquí, fue el [19]52, en agosto. Entonces en el [19]53 me di de alta en el Ejército, estuve dos años en el Ejército en México, ahí en Juárez.
FC: Ah okay. En el mexicano.
RF: Que data del verano del [19]53 al [19]55, dos años. Y luego el [19]55 que pedí mi baja en julio, me fui a la contratación que comúnmente la hacían en septiembre. Y pos no, yo no agarre número, sino que andaba viendo a ver qué y todo y luego pos en eso había un jefe que era de contratación y lo quitaron y pusieron otro. Y yo le dije a un sargento: “Oiga, pos no traigo ya dinero, ¿cómo le hago? Pos quiero contratarme, porque si me voy otra vez pa Juárez no sirve”, le dije. Dijo: “Mire, venga en la mañana”, dijo, “va a haber esta cosa”, dijo, “va a haber un nuevo jefe, el único que puede ayudarlo. No se trata de dinero ni nada, pura política”. Dijo: “Venga en la mañana temprano y yo le digo cuál es. Mira, aquél es”. “¿Sí?”. Un hombre, ¡oy!, un hombre tan suave, que el Licenciado Labarca, yo no lo conocía.
FC: ¿Cómo? El licenciado La… ¿Qué?
RF: El Licenciado de Labarca.
FC: De Labarca, sí. ¿Él iba a ser el nuevo jefe?, ahí en la…
RF: Era el nuevo jefe al otro día, moreno él, de lentes oscuros y… Ah, con el tiempo platico con un amigo mío. “¡Oy!, Licenciado Labarca, ¡que va!, don Rodrigo. Es un hombre que se hace al lado del pobre”. Ya llegué y: “Oiga jefe”. Haciéndome nomás pa… “¿Qué pasa muchacho?, ¿qué quieres?”. “No, pos ya se me está acabando el dinero y quiero irme de bracero”. Y luego ya le enseñé mi baja del Ejército, mi tarjeta y todo. Y luego, es que un día antes había un teniente, un oficial, del Ejército, ese se encargaba de revisar las cartillas poquito antes de entrar, aquí estaba ese oficial y soldados ahí pa guardar el orden y ya cuando daban grito, bueno, llegaban con el jefe de contratación y allí había un fotógrafo ahí que pagaba uno $3 pesos pa que lo retrataran. Y luego en…
FC: ¿Para qué?, ¿para qué era la foto esa?
RF: Ah, se lo ponían en una… Era un papel que le sacaban ahí, como una fotostática así.
FC: Ah okay.
RF: Y ahí venían, como un Francisco Martínez, el trabajador de internacional.
FC: Ah okay, le llenaban ahí una forma.
RF: Y luego le ponían el retrato. Pagaba uno $3 pesos. Y luego fíjese que era una de las cosas que no me gustó de ese oficial del Ejército. Es que un día antes le dije una palabra no, ofensiva, ¿no? Nomás que dije pa ver qué decía. Y luego otro día, que voy llegando y luego ya que mi jefe me dio la pasada, me dijo: “Oye, dile al teniente que revise”. Yo no quería ya que fuera con él. “No”, dijo, hasta a uno lo hizo menos, le respetó sus derechos. “Ve con el teniente que te revise tus papeles”. Yo tenía algunas entrevistas con algunos empleados de Gobierno de México que hay unos quién sabe cómo, quién sabe qué, no creen a uno, como que lo tratan de… digo, debe estar uno, como uno debe estar ignorante, y; ¡no! y no es así. Y luego se levantó el teniente, no necesitaba ni haberse levantado y luego le dice el jefe de contratación: “Oiga teniente, ¿qué pues con el muchacho? Ya dio servicio, creo él puede ir”. “Pos sí, nomás que hay una cosa”. “Oiga, ¿este loco qué tiene?”, dije.
FC: ¿Ese era el que usted le había dicho el día anterior?
RF: Y dije: “¿Este qué tiene?, pos si no soy desertor”. Si fuera desertor, oiga…
FC: Se había dado bien de baja y todo…
RF: Sí y luego llevaba una carta yo escrita con máquina pal Comandante de la Segunda Zona, cosa que el jefe la leyó.
FC: Ah, cuando usted le dijo que se quería él sí la vio.
RF: Sí y no la leyó. Y luego cuando le dije al teniente ese, no le dijo nada de eso, el Licenciado Labarca no leyó nada de eso. “¿Qué pasa Teniente? El muchacho ya puede ir, ya cayó en servicio”. “Pos nomás que aquí hay una cosa”. “¿Qué teniente?”. “Es que aquí no podemos nosotros recomendar a los que han sido soldados, mire”. “¡Uy!”, dije, “pos me muero de hambre con él”. ¡Fíjese nomás!, ¡jijo! Yo me callé y no dije nada. No teniente, así ya ve como es que, no sé cómo será que a veces dicen: “Yo te atiendo que, tiene cierto malo y cierto no”. “No teniente, no se trata de recomendar”, dijo, “aquí el único pa recomendar soy yo”.
FC: ¿Eso le dijo el jefe?
RF: Se lo dijo en su cara. Pos yo callado, yo.
FC: ¿Sí?
RF: Yo no podía decir nada.
FC: No, pos no, ¡olvídese!
RF: No, ¡jijo! Me gustó mucho al agua ese señor, ese licenciado. Con el tiempo platiqué aquí, entre los trabajadores, allí hay un viejito amigo mío que ya murió. Y le platiqué la historia esa. “No don Rodrigo, qué tiene, Licenciado Labarca partidario del morral.”
FC: ¿También a él lo conocía?
RF: Sí lo conocía. El Licenciado Labarca dijo, partidario del… el morral quiere decir, mire, si yo voy a un trabajo al rancho, pos muy pobrecito en una ampolleta, llevo mi comida en un morral, ya unos que llevan ponchera, pos ya son…
FC: Ya muy moderno, ¿no?
RF: Ora otro que lleva la hielera. You know what I mean, ¿verdad?
FC: Sí, sí señor.
RF: Y esa historia, pos como le digo…
FC: O sea que quería decir con eso que era partidario del morral, que él sí ayudaba a las personas.
RF: Pos a mí luego luego, pos vio ahí y luego viendo la carta en manuscrita, esa máquina. Óigame no, qué pues y luego, ¿no cree que el teniente se salió de onda?
FC: Sí.
RF: ¿Verdad? No tenía ni por qué haberse levantado de la silla, porque…
FC: Pero qué bueno que lo…
RF: Pero, ¿sabe que pensaba este hombre? Que el licenciado se iba a hacer al lado de él. Usted… psicológicamente así, ¿verdad, oiga?
FC: Sí.
RF: Usted que tiene más cerebro que yo, pensaba que se iba a hacer al lado de él…
FC: Y nada, que le salió… (risas)
RF: Y quería a mí, como dice el dicho: “¡Rostizarme!”. Pero qué bueno que no se le hizo.
FC: Así que, ¿así fue como usted se pudo hacer este…?
RF: En esa vez de bracero lo aprendí, la primera vez. La segunda vez no tuve que ir a Chihuahua. Aquí hubo un grupito que pasó por Waterfill y pasé luego, ya no tuve que ir a Chihuahua.
FC: Ah, ¿ya no se tuvo que regresar hasta allá?
RF: Ya no tuve que ir a Chihuahua.
FC: Y de ahí a Chihuahua, ¿cómo se vino acá al centro a este a Río Vista?
RF: Los traen en camiones, los traen en los Chihuahuenses. Creo que el Gobierno pagaba, no sé a cuanto pagaban, nos traiban en los transportes Chihuahuenses.
FC: Chihuahuenses, okay.
RF: Hasta el puerto allí. Y luego ahí en el puerto ahí iba un oficial de Migración americana y nos pasaba a uno a pie. Y luego ya había camiones de una compañía. Pos todos esos negocios, esos nos traiba hasta aquí a Río Vista. Pos son como dieciocho millas de, más o menos de allá. Nos traiban allá al Río Vista, ahí onde… ahí nos contrataban. Ahí duraban una semana, dos, tres días, depende de qué tanta gente sacaban los rancheros, ¿me entiende?
FC: Y cuando usted estaba ahí en el puente, que dice que lo bajaron del camión y cruzar a pie, ¿qué tenía que enseñar para cruzar?
RF: No, yo nomás… Es que era un papel. A los choferes les daban un folio ahí y ya nomás.
FC: Ah, ¿ellos ya nomás enseñaban ese folio y ustedes pasaban?
RF: Sí.
FC: Y se subían a los otros camiones.
RF: Y subíamos los camiones y ya nos veníamos a Río Vista.
FC: A Río Vista.
RF: Sí, ya ahí venía todos los documentos, ahí le recogían la documentación. Ahí no sé qué harían con ella, pero ahí venía todo el… Que la gente podía pasar.
FC: Y luego ya, una vez que llegaba usted a Río Vista, ahí al centro, ¿qué pasaba ahí?, ¿qué tenía que hacer?
RF: Pos ahí, de recién llegado luego luego, mi dispensa mucho, lo fumigaban a uno con polvo pa ver si traiba algo, infección, lo que sea.
FC: Ah, ¿llegaban y los fumigaban con polvo?
RF: Nos fumigaban todo, sí, con polvo por si no trajiera algo así o algo así, ¿me entiende? Ahí estaba salubridad de emigración, los departamentos de salubridad de emigración.
FC: Así que eso llegaron y luego luego con… usted y sus cosas, ¿a usted sí le permitían traerse sus cosas de México?
RF: (tos) Una cosa ligera. Pos no carga usted mucho, pos anda en una aventura, ¿no? Pero puede traer un cambio de ropa los que pueden, porque las aventuras son así rápido, ¿no? Son como aquél, como el personaje que nos menta Julio Verne, en “La Vuelta al Mundo en 80 días”. Ese hombre alistó su viaje así, ¡vámonos!, y ya.
FC: Luego luego.
RF: Rápido, sí. ¡Cargue lo que traiga y vámonos y ya!
FC: Y, ¿usted le avisó a su familia cuando que se iba a venir de bracero?
RF: Bueno, sí, ya de bracero, sí. Pero la primera vez era cuando me vine a la aventura no le avisé a mi mamá, me vine sin avisarle. Ya después, pos ya de bracero estaba grande, ya tenía yo veintidós años, ¿me entiende? Pero la primera vez que me vine, en los dieciséis años no le avisé. Yo sabía que me iba a venir, pero no le dije a mi mamá: “Voy a ir”. No, no. No, usted sabe cómo son las… ¡Uy!
FC: No, no lo hubiera dejado venir, olvídese.
RF: Nombre, me dijo el mayor: “Oye…
2do: ¿Gusta una sodita? Oiga, ¿no le ofrezco soda o algo?
RF: Estamos en la plática…
FC: Estoy bien, muy amable, gracias.
RF: Y luego me dice mi hijo el mayor, se llama Alonso, el que trabaja en las escuelas de Tucson: “Pos oiga… El que trabaja en las escuelas del Distrito de Socorro: “Oiga y, ¿no le avisó mi abuelita?”. “No”, le dije, “si le aviso, no estabas tú aquí”.
2do: Ese vaso es de usted.
FC: Gracias.
RF: ¿Quiere de dieta de esa?
FC: Así está bien, con ésta está bien, muy amable.
RF: “No”, le dije, “si le he avisado, no estabas tú aquí”.
FC: No hubiera nacido, ¿verdad?, ¿para qué?
RF: No, no, si esto fue de así…
FC: Son muy preocuponas las mamás.
RF: Sí, y vámonos pal norte. Bueno, a pesar de que yo venía de trampa, algunos ahí. Pero yo en lo personal, a pesar de que venía como dicen, pos casi como dicen, sin nada y yo venía de todos modos contento. Pos es que: “Orita vámonos a Estados Unidos al norte, a ver qué hay allá”.
FC: ¿Sí?
RF: Sí. (risas)
FC: ¿Usted había oído historias que le contaron acá de cómo era la vida acá en el norte y todo eso?
RF: Muy bien no. Pero yo de todos modos venía contento, porque trae uno imaginación que íbamos a Estados Unidos. Vamos a otro país a ver qué hay allá.
FC: A ver qué nos sale.
RF: Sí, a ver qué, sí.
FC: Y cuando fue al examen ese allí en Chihuahua, ¿no le hicieron examen ni nada ni…
RF: Sí, iba pa allá ya a todos le hicieron una cosa así ligera, a ver cómo… Sí.
FC: Ah okay, allá en Chihuahua también.
RF: Sí también, muy ligero, sí. Y como le digo, aquí llegando aquí a Río Vista le fumigan todo, de donde tiene cabello. Pos, por alguna cosa puede traer alguna plaga, usted sabe, ¿no?
FC: Ah okay. Sí, señor.
RF: Y ya después, pos es lógico. No creo yo que sea eso anticonstitucional; no lo creo, es pa protegerse, pa proteger sí.
FC: Y, ¿ahí le hacían también algún tipo de examen médico? Allí en Río Vista.
RF: No, nomás eso, eso nomás…
FC: ¿La fumigada?
RF: Nomás la fumigación. Y ya nos retrataban, cuando ya se iban a contratar los retrataban y todo. Eso sí que había rayos X, había rayos X. Si salía una cosa mal en los rayos X, lo desechaban.
FC: Ah, tenía que pasar ahí con los rayos X.
RF: De todos modos tenía que pasar a rayos X y si estaba malo, alguna cosa que está mal que ellos saben, él se iba pa atrás, lo devolvían pa México.
FC: Ah okay. Así que tenía que esperarse a pasar esos.
RF: Sí.
FC: Y, ¿algún tipo de vacunas?, ¿algún tipo que les daban ahí?
RF: No me acuerdo de vacunas, pero rayos X sí. Y la fumigación ahí en Río Vista.
FC: Okay. Y luego después de que ya pasaba usted la fumigación y luego los rayos X y luego, ¿a dónde lo mandaban?
RF: Pos ahí se estaba unos días, le daban a uno ahí dónde dormir y comida y le daban cobijas pa taparse.
FC: Y, ¿estaba bien, señor?, ahí la comida. Y para dormir, ¿estaba en buenas condiciones?
RF: No, sí la comida estaba bien, lo que sea. Sí, yo no digo, ¡no!, aunque ha pasado ya medio siglo. Yo no estuve muy mucho ahí, como le digo. Pero no, la comida estaba bien, lo que sea normal, sí.
FC: ¿Usted se quedó entonces a dormir ahí en Río Vista?
RF: De ahí nos estuvimos unos días mientras lo contrataban a uno. Podía durar una noche, dos, cinco días, diez, depende de los rancheros qué tanta gente sacaban, ¿me entiende?
FC: Qué tanta gente se llevaban. ¿Le dieron la opción para escoger entre a dónde se quería ir a trabajar o qué era lo que quería hacer? O ellos le dijeron: “Te vas a algún lado y hacer tal cosa”.
RF: No, pos casi llegaban puros rancheros allá a eso. Llegaban puros rancheros y al rancho, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: A diferentes condados, según a donde le tocaba, ¿me entiende? Si le tocaba que lo llevaran aquí a Las Cruces o al Rosswell o a, como digamos, parte de Arizona, lo que sea. Pero eran rancheros los que…
FC: Los que lo sacaban.
RF: Los que llegaban ahí, sí.
FC: Y una vez que a usted le hicieron su contrato, ya le firmaron sus formas ahí y todo, ¿que hizo?, ¿a dónde lo mandaron a trabajar esa primera vez?
RF: No, pos llegaba un ranchero y era al azar: “Ve y ven, yo me llevo a usted”, o algo. Llegaba un ranchero y decía: “Yo quiero tres o cuatro”. Y se arrimaba uno luego luego a ver qué. “Vengase pues. Yo me llevo estos”. Y ya, nos llevaba y pagaban un tanto cada tres meses por… parece que eran $20 dólares por persona. Si tenía cuatro braceros eran $80. Esos eran, eso se tenían que pagar…
FC: ¿Para poder llevárselos?
RF: Sí, era como un impuesto, como un impuesto de ley. Y según eso, parece que era cada tres meses.
FC: ¿Cada tres meses tenían que pagar ese impuesto?
RF: Para renovar el contrato, cada tres meses se renovaba, tres meses. Y luego lo llevaban ahí a Río Vista, y le ponían el sello, otros a usted. Y luego eran otros $20 cada tres meses. Toy seguro que sí era, no me acuerdo, pero estoy seguro que sí era…
FC: Por persona, ¿verdad? Eso era por cada uno de las personas.
RF: Por persona, sí. Casi seguro, pero si acaso le miento, bueno, no es, no quiere…
FC: Y, ¿a donde se vino usted? ¿A qué parte de Estados Unidos se vino esa vez?
RF: Aquí estuvimos cerquitas, aquí cerquita de Ysleta, ahí nada más.
FC: ¿De Ysleta?
RF: Sí.
FC: Y, ¿qué trabajo le tocó hacer ahí?
RF: Andábamos limpiando algodón, regando y la pisca, la pisca de algodón.
FC: Y, ¿en qué se lo trajeron aquí a su trabajo, aquí en Ysleta? De ahí de Río Vista, ¿en qué se vino?
RF: Ahí llegó un ameri[cano] llegó un hombre y nos trajo en su troca. Ya lo traen ellos en su troca, en su vehículo.
FC: Ah, el mismo que lo contrató, ¿ellos traían una troca para traérselos?
RF: Ya va y lo trae, sí. Ellos nos llevan ya en sus trocas, en sus muebles ya, cuando es cerquitas. Pero si es lejos, supongamos que va como de aquí de Río Vista a Pecos, ya ellos traen un tráiler o un camión, ¿me entiende? Un tráiler tapado con lonas o un camión de los Greyhound.
FC: Ah, un camión.
RF: Cuando es cerquitas, viene aquí cerquitas del valle, viene un ranchero y se los lleva ahí.
FC: ¿En su propio mueble?
RF: Ey, en su propio mueble.
FC: Y, ¿cuánta gente se trajeron junto con usted cuando se vino aquí a Ysleta? ¿Como cuántos braceros serían?
RF: En esa vez, parece que pasaron, no sé si eran como unos dos mil, por ahí va. Bueno, uno no tiene una cifra exacta, es imposible recordarlo. Pero póngale que haigan sido dos mil o menos, por ahí. No era, es que era una cosa ligera eso.
FC: Ah okay. Y, ¿se veía mucha gente ahí en el centro ese? En el Río Vista, señor, ¿se veía mucho movimiento?
RF: Sí, sí había. Sí, había bastante movimiento.
FC: Y, ¿cómo fue el trato de los empleados ahí en Río Vista?
RF: No, nos trataban muy bien, los empleados que trabajaban en Río Vista, los empleados, la mayormente eran hispanos, nos trataban muy bien. Recogía uno una cobija en la noche y luego le ponían un sello que le dieron cobija y otro día en la mañana la entregaba y le ponían un sello.
FC: De que la había entregado.
RF: De que la había entregado, sí. Y sabían bien cuando faltaban cobijas, sabían bien.
FC: Porque pos llevaban el control, ¿verdad?
RF: Sí, sabían bien, porque iban a anunciarlo: “Faltan cobijas”. Estaban anunciando por el radio: “Déjenlas ahí, nosotros vamos a recogerlas. No se metan en problemas”, dijo. No, (risas) sí. Ellos sabían bien, estaban bien preparados pa eso.
FC: Y, ¿cómo cuántas personas se fueron con usted aquí a Ysleta?, ¿cuántos se llevó ese señor?
RF: Eran como tres o cuatro, el rancho era chico. El rancho era pequeño.
FC: Y de esos que se fueron con usted, ¿usted conocía a alguno?
RF: Conocí de allá del sur. Parece que un tal Catarino. Así nomás muy ligeramente. Así nomás, pero no platicamos mucho, pero yo supe que era del sur, de allá de Zacatecas. Me acuerdo que se llamaba Catarino, no me acuerdo el apellido.
FC: Y en el tiempo que estuvo usted ahí trabajando en este ranchito, aquí en Ysleta, ¿le tocó que contrataran a algún ilegal?, o, ¿eran puros braceros?
RF: No, puros, sí… No, había en ese tiempo en los ranchos más grandes había de los ilegales y braceros.
FC: De los dos.
RF: Sí, pero en ése, como era chico, no, tenía puro bracero, sí.
FC: Y, ¿tenía usted mucho contacto con su patrón? Con el que lo contrató.
RF: No, muy poco, casi no.
FC: ¿Muy poco?, ¿casi no lo veía?
RF: Pos sí lo veía, pero no dialogaba mucho, no.
FC: Y su patrón, ¿hablaba español?
RF: Sí, hablaba español y inglés y luego japonés, pos era japonés.
FC: Ah, ¿su patrón era japonés?
RF: Sí. Hablaba inglés y español y japonés, por supuesto, ¿no?, ¿verdad?
FC: Sí, pues sí, ¿verdad? que sí era. Y, ¿cómo lo trataron ahí cuando estuvo usted en…?
RF: Bien, me trató bien el hombre, nos trataba bien. Era él y otro hermano y el papá ya estaba viejecito. Se llamaba don José, ese vino de Japón. Era originario de allá, pero no sé que, me parece que murió al poco tiempo, no luego luego. En ese tiempo se legalizó el viejito, en ese tiempo… No, poquito antes, sí. Ya había ido a Japón y no podía ir [por] que no tenía pasaporte. Y la viejita parece que murió al poquito tiempo, yo no supe. Ahí pláticas que se había muerto al poco tiempo que se acabó la guerra. Pero el viejito sobrevivió, se llamaba don José.
FC: Sí, ¿él era el papá de su patrón?
RF: Sí, el papá ese. Eran dos hermanos japoneses.
FC: Y el tiempo que estuvo ahí usted trabajando, ¿le tocó que alguna vez las autoridades mexicanas o las americanas llegaran a inspeccionar algo, papeles? Ya ve que a veces iban los inspectores y esas cosas.
RF: Nunca me tocó. Pero lo único, no, nunca me tocó, pero lo único que le puedo decir es esto, acerca de esto, una activista que conocí el año pasado, que no le puedo decir su nombre, platicamos de eso y todo y dijo: “Ah, qué bueno que me platica orita de los braceros”. Este hombre trabajó con el Gobierno, me dijo… No, muy suave, de todos modos no le puedo decir porque, por equis causa, ¿no? No es mío.
FC: Sí, sí señor.
RF: Dijo: “Yo trabajé con el Gobierno, me contrataron”. Me dijo: “Oye, ven”, dijo, “se trata de esto, no tengas miedo”. Tenía que usar pistola oculta. “No, pos déjala aquí”. “Se la voy a soltar al costo”. Era muy suave el señor. Últimamente me dijo: “Yo soy activista”. Yo nomás lo saludé y seguimos con plática, nos hemos visto, fuimos a dos, tres una vez cuando, la toma del nuevo Representante del Distrito 75, que es mi consuegro. Y fuimos y luego, me dijo: “Se trata de esto”. “¿Qué?”, le dije. “Hay que ir a los ranchos”, dijo, “a investigar a los braceros a ver cómo los tratan”. Le voy a platicar una cosa, yo no supe mucho de eso de cosas malas, o sea, o de esos hombres que tratan uno mal. Pero dicen que llegó un, llegó a un rancho ahí, que no quería abrirles el mayordomo. “No, no te puedo abrir”. Y que todo.
FC: El mayordomo no sabía que él era…
RF: No, él no sabía que era así. Y este traiba su pistola oculta y traiba un radio, aquellos radios de corta distancia que usaba La Migra, los Motorola. Dice: “Y otra vez no”. Me dijo él: “Yo traiba mi Marshall ahí cerca”. Nomás nos comunicábamos: “Voy a tal rancho”. Pos llegué ahora: “No”, dijo, “no puedes ir, no te puedo [dejar] entrar”. Dijo: “Bueno, pos ahí vengo mañana a ver si te animas”.
FC: Sí.
RF: Pues yo creo que otro día vino y estaba mi Marshall allí, a cierta distancia hablando. Llegué, pos ya estaba ahí ese otro día, ya estaba el ranchero ese y un abogado. “No, pos no puedes entrar”, dijo. El mayordomo ¿verdad?, que dijo: “No te puedo [dejar] entrar”. “No, déjame hablar por este”. “No, yo estaba jugando”. “No, conmigo no ande jugando, están locos, estas cosas serias”. El hombre serio. Pues entonces, el otro día que llegó, que estaba ahí el patrón y su abogado: “Pos no, no puedes entrar”. Y ya de repente llegó el, dijo, el Marshall, ahí estaba: “Abre la puerta, esa o te vuelo el candado”.
FC: Ya fue el Marshall el que le dijo.
RF: El Marshall, sí. “Abre la puerta”. Pa que este hombre investigara a ver cómo nos trataba. Supe yo porque él me dijo…
FC: Porque le platicó, sí.
RF: Dijo: “Abre la puerta o te vuelo el candado”.
FC: No, pos ya le abrieron, ¿verdad?
RF: No, dicen que dijo el abogado: “No”, dijo, “no se le puede hacer nada”.
FC: Lo tienen que dejar pasar…
RF: No hay nada mal.
FC: Pos sí.
RF: Eso es lo único que sé, más o menos ahí y eso porque me la platicó esa persona.
FC: Y, ¿cómo encontró ahí su amigo las condiciones?
RF: Pos dice que le platicó… “Díganme todo, díganme”. “Pos es que tenemos… “No, no tengan miedo, a eso vengo yo, para eso me pagan”, dijo, “aquí ando y todo eso, díganme cómo los tratan y todo”. Sí, yo creo allí levantó algún informe, no sé y quién sabe qué más sería. Esa no está a mi alcance, saber lo demás, ¿me entiende? Nomás le digo eso porque ese a mí me platicó que… Dijo: “No”, dijo, “y, ¿sabe lo que es macho?”. “Pos no sé mucho, pero no lo ignoro tanto”, le dije. Usted sabe, ¿no? Y estaba yo muy macho, no, ¡es macho! Ese hombre, cuidado con ese. Sí, como le digo, no le voy a repetir que le dijo: “¡Abre la puerta o te vuelo el candado!”.
FC: No, pos ya no hubo de otra.
RF: Sí, (risas) eso lo sé porque me hablo ese amigo, ¿me entiende? Más cosas no sé del trato cómo era, porque no anduve mucho en la braceriada, ¿me entiende? Nomás mi mayor parte fue ilegal, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Pero anduve bien. Yo llegué y me trataron bien, yo no me quejo. Ilegal que hubiera sido, ¿me entiende?
FC: Sí, señor.
RF: Y llegué, me trataron bien, lo que sea.
FC: Y cuando estaba aquí trabajando, usted todavía no se casaba, ¿verdad?, aquí.
RF: No, por supuesto que no.
FC: Ah okay. Y, ¿se comunicaba con su mamá allá a México?, a Parral.
RF: No, pos sí. Cuando estaba lejos, cuando estaba retirado, pero aquí cerquitas, pos aquí en el valle, no. Ya cuando estuve de bracero ya vivíamos en Juárez, ¿me entiende?
FC: Ah okay. ¿Ya su familia se había venido?
RF: Sí, pero cuando estaba así más retirado, entonces sí le escribía. Pero cuando estaba aquí cerquitas de bracero, que fue lo último, como le digo, el otoño del [19]55, verano del [19]50, pos ahí íbamos cada ocho días.
FC: ¿Podía cruzar y todo?, ¿no había problema?
RF: No había problema.
FC: Okay, entonces los veía bastante seguido.
RF: Sí.
FC: Y aquí trabajando en la granja, ¿como cuántos días trabajaba a la semana?
RF: Trabajamos los cinco, los seis días, por ahí, sí.
FC: Cinco, seis días.
RF: Cinco, sí, más o menos.
FC: Y más o menos, ¿como cuántas horas trabajaba al día?
RF: Ocho horas diarias. Más o menos ocho horas, común y corriente.
FC: Y, ¿le daban espacios para comer?, ¿le daban descansos?
RF: Sí, comíamos al medio día y descansábamos un rato, como una media hora o no sé qué, comían… Descansábamos pa comer.
FC: Y, ¿usted se tenía que hacer su comida o ahí su patrón les daba?
RF: No, no, en dónde eran poco, hacía uno su comida y como en los ranchos más grandes, yo creo, a mí nunca me tocó andar de eso, en ranchos muy grandes, no sé yo, a mí no me tocó ver aquí en ésta parte de este valle, que tuvieran casa de borde; no sé yo. Pero en California, ya no hablamos de bracero, yo conocí parte de California el [19]59, ya arreglao. Había mucha gente así, pero ya no de braceros. No me acuerdo si había partes y había braceros. ¡Sí! No, pero eso era en los centros de contratación, no quiero mentir, ya en los ranchos. ¡Ah, no, sí! Yo conocí un rancho en California que tenía casa de borde en el [19]59…
FC: ¿Qué es eso, señor? ¿Qué es eso?
RF: El mismo del… El mayordomo del rancho o su familia, hacían ese negocio, ¿me entiende? Yo no sé cómo le cobrarían, o si lo cobraban quién pagaría esa comida o… ¡Ah!, pos yo creo que el ranchero, yo creo pagaba la comida. Yo pienso, ¿verdad?
FC: Como que el mayordomo tenía ahí su cocinita y él les hacía de comer así a todos.
RF: Sí y yo era creo que el ranchero pagaba la comida, yo creo, ¿verdad?
FC: ¿Cómo se llamaba esa casa de qué, señor?
RF: ¿Esa casa de borde?
FC: ¿De borde?
RF: Sí, le decían casas de borde.
FC: De borde, ah okay.
RF: De esas casas de onde alimentan a gentes solteras. En México también le llaman ahí casas de borde. Que tiene alguna una señora en su casa particular o un restaurante asisto, casa de asistencia. “Aquí le doy asistencia a veinte, treinta nombres”. Sí, pos lo que sea, ¿me entiende?
FC: Sí, sí señor.
RF: Eso fue en California, ahí conocí eso. Así que ahí había casa en donde le hacían la comida a los braceros. Pero en las partes que yo anduve de bracero, aquí en el valle, yo nunca vi eso. Pos si no me haya tocado estar en un rancho grande, pos sí, en la labor sí había esas casas ya.
FC: Aquí.
RF: Ya pa mucha gente a lo mejor sí les hacían la comida, no sé y si los cobraban tanto, pero cuando era poco, uno mismo hacía su alimento, uno mismo hacía su comida.
FC: Uno mismo hacía… ¿usted ahí se cocinaba?
RF: Sí.
FC: Y dónde, por ejemplo usted, ¿les pusieron un lugar para dormir, para vivir ahí en el rancho?
RF: Sí.
FC: ¿Dónde se quedaban a…?
RF: Sí, había un cuarto ahí, como era chico el rancho ese, era un cuarto general ahí, un cuarto, cada quien tenía su camita, ¿me entiende?
FC: Sí, pero dormían ahí todos juntos, ¿verdad?
RF: Sí, sí.
FC: Y tenían camas y todo.
RF: Sí.
FC: Y, ¿cómo le hacían para los servicios de los baños y eso?, ¿tenían ellos ahí drenaje?
RF: No, pos como en ranchos más grandes posible sí los hayan tenido, pero todavía, en ese tiempo, había muchos de esos de hoy, letrinas. Pos sí, los ranchos grandes sí tuvieran eso, pero a mí no me tocó ver, de bracero no me tocó ver eso.
FC: Sí, porque el suyo estaba…
RF: Sí, a mí no me tocó ver eso.
FC: Y por ejemplo, ¿usted lavaba su ropa ahí en el, en donde trabajaba?
RF: Sí, ahí lavan su ropa, ahí en un bote, lo que sea ahí.
FC: Y qué de, por ejemplo, las toallas y los jabones y los cepillos de dientes. ¿Esos se los daba su patrón?, o usted se los tenía…
RF: No, uno lo tenía que comprar.
FC: ¿Usted se lo tenía que comprar?
RF: Sí.
FC: ¿Se acuerda cuánto le pagaban cuando se vino?
RF: Sí, en ese tiempo aquí pagaban $0.50 centavos la hora.
FC: Cincuenta centavos.
RF: Sí, en esos años pagaban… Sí, yo estoy hablando en el [19]55. No sé cuándo subiría, pero todavía el [19]56 digamos eran $0.50 centavos la hora.
FC: Y, ¿le pagaban ellos en efectivo o le daban un cheque?
RF: No, en efectivo nos pagaban. Efectivo ahí.
FC: ¿Cada cuando le daban su sueldo?
RF: Cada ocho días.
FC: Y, ¿usted le mandaba dinero a su familia en México?
RF: Porque cuando estaba de bracero, no. Porque yo iba a ir…
FC: ¿Usted iba ahí?
RF: Sólo cuando anduve lejos de ilegal, entonces sí, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Sí mandaba de vez en cuando.
FC: Y, ¿nunca tuvo problema para que le dieran su pago?
RF: No, nunca, nunca tuve problema, nunca, ¿pa qué más? Sí, no.
FC: ¿Ni nunca le quitaron de su salario, que impuestos o que…?
RF: No, nomás eran un, creo que $0.50 centavos que era parece, que para aseguranza para ir con el doctor. Sí, yo esa no era una aseguranza de vida, yo creo que no.
FC: Ah, okay. Nada más para que si se enfermaba o algo fuera con el doctor.
RF: Unos $0.50 centavos me parece que era pa ir pa una ligera, pero cosa de que fuera una aseguranza de vida, no; yo no creo, a lo menos yo no creo. Porque el precio lo dice, ¿no?
FC: Sí, no. ¿Se imagina?, no era tanto. Y luego cuando usted… Esa fue la primera vez que se cruzó y cuando se volvió a cruzar, que ya dice que ya se cruzó aquí, con un grupo del Waterfill, ¿verdad?
RF: Sí.
FC: Que estaba usted ahí, ¿a dónde se vino?
RF: Ahí con ese mismo patrón de ahí.
FC: Ahí se vino con ese mismo patrón…
RF: Con ese mismo patrón, sí.
FC: Y, ¿usted sabía que venía con este mismo o no?
RF: Sí, no. Yo sabía porque vine, yo vine y lo… Ahí tiene un ranchito él, cerquita de Ysleta, on taba La Asociación. Y como yo tenía local ahí vine y lo vi, dijo: “Deja”, dijo, “vamos pa apuntarte”, dijo, “y al medio día lo van a pasar ahí”. Ahí luego luego nomás brincamos la carretera.
FC: Y luego luego lo…
RF: Me apuntó y dijo: “Vete, vete, ya estás apuntado. Ya nomás que lleguen allá los representantes de La Asociación”. Eran representantes.
FC: ¿De qué asociación, señor?
RF: Era La Asociación de los braceros.
FC: Ah okay.
RF: Sí, era La Asociación de los braceros, sí.
FC: Entonces ellos anotaban los nombres de las personas que se iban.
RF: Sí, ellos eran los representantes de La Asociación, ¿me entiende?
FC: Sí señor.
RF: Era un negocio acá más o menos, ¿me entiende?
FC: Y por ejemplo, bueno ya se regresó usted. Y, ¿cuánto duró trabajando aquí la segunda vez?
RF: ¿La segunda vez? Yo creo, pos fueron, ora verá…
FC: Porque la primera vez duró todo un verano, ¿verdad?
RF: Sí, bueno no, pero fue en otoño. La primera vez que vine fueron como tres meses en otoño y me salí y luego después vine en marzo, abril y mayo, abril, mayo, junio, julio, como tres veces nomás. Porque ya después me fui a buscar a mi patrón pa que me arreglara y cancelé mi contrato.
FC: Esa segunda vez ya usted ya no acabó su contrato.
RF: Pos fíjese, llegué a los tres meses, pero ya no, ya no lo…
FC: Ya no lo renovó.
RF: No renové porque me dijo el cónsul americano: “¿Usted ha entrado de bracero?”. “Sí”. Ya andaba yo tramitando mi residencia. Dijo: “Ya no renueve ese contrato. Dígale a su patrón que ya no renueve, que le vamos a dar residencia”. Bueno, así me dijo el representante del cónsul: “Ya no renueve su contrato”. Y no y ya me dijo el patrón: “Traes tú para… “No, ya no. Yo ya me voy”, dije, “ya me voy pa Río Vista, ya me voy”. Y ya no lo renové.
FC: Cuando lo renovaba, ¿tenía que ir de regreso ahí a Río Vista a renovarlo?
RF: No, ellos lo llevaban.
FC: Ellos lo llevaban. Ah okay.
RF: Sí, uno nomás le firmaba y ellos los llevaban.
FC: Y ellos ya solos los llevaban y le ponían ahí su…
RF: Sí, no necesitaba ir uno ya.
FC: Y luego por ejemplo, ¿qué hacía usted cuando tenía sus días de descanso?, los que les daban aquí.
RF: Pos iba una pa… Sí, de plano iba uno pa Juárez, estarme un rato allá o se estaba uno allá a veces, leyendo alguna revista o algo.
FC: ¿Se podía quedar ahí en el rancho si usted quería?
RF: Sí, sí, aquí, pos aquí dormíamos. Podíamos ir nomás… sí podíamos ir todos los días, pero no se necesita, pero íbamos cada semana. Porque tenía que le daban un permiso aparte de la tarjeta. Ese permiso ahí decía: “Autorizo a este que vaya para Juárez”. Y ahí se lo quitaban ya pa acá, ahí en el puente. Era un permiso, pero era también que…
FC: Entonces, su patrón le tenía que dar un permiso para que usted pudiera cruzar a Juárez.
RF: Sí, manuscrito, de allá pa acá.
FC: Ah, de allá para… Ah okay, sí.
RF: Manuscrito, sí, porque de otro modo.
FC: Sí, ya no lo dejaban…
RF: No, y a ver cómo, sí. Y luego ahí le veían ahí y: “Vámonos”. “Okay”. Y pasaba, ahí manuscrito.
FC: Y por ejemplo, los que… Usted porque su familia vivía en Juárez, pero de los otros braceros que ya ve que ellos no eran de aquí, ¿ellos también a veces se cruzaban a Juárez?, o, ¿qué hacían ellos?
RF: Bueno, los que estaban aquí cercas, posible sí iría, yo creo. Como yo no conocí mucho, entonces yo siento que sí. Íbanos, a veces querían ir a Juárez, es lógico. Les daban ganas de ir a Juárez o lo que sea, yo pienso que sí.
FC: ¿Usted nunca se hizo amigo con los que trabajaba usted ahí en el rancho con este señor?
RF: Casi no hice mucha amistad, casi no. Digamos amistad oficialmente, así que digamos, no.
FC: ¿Había alguna iglesia por aquí cerca de la que usted pudiera ir? O usted iba allá…
RF: Había una en Ysleta, ¿me entiende? Pos yo nunca, no. Con el tiempo ese que fui, no me… casi no iba, nomás me dedicaba un ratito para ir a Juárez y me venía.
FC: Sí señor. Espéreme, déjeme… Esa vez que dice que ya su patrón, que el cónsul le dijo que ya no renovara el contrato para arreglar sus papeles, ¿cómo consiguió arreglarlos?, ¿cómo le hizo?
RF: Ah, pos ése, mi primer patrón que conocí cuando andaba de ilegal, ése me firmó pa arreglar.
FC: Ah, le tenía que firmar él para…
RF: Darme una carta, dan una carta que sostenimiento y de trabajo: “Yo tengo trabajo pa él y… En una carta que con qué salvar una cosa que pa tal… Pos era un requisito.
FC: ¿Cómo se llamaba su patrón?
RF: Mi patrón, le voy a decir por modo de hablar, mi patrón se llamaba, el que me… Cuando hablo de mi patrón, me refiero al que me arregló.
FC: Ese fue su primer patrón, ¿verdad?
RF: Fue mi primer… No, pos sí fue mi primer patrón porque llegué primero ahí a un rancho que trabajamos con un…
FC: Pero ahí era cuando todavía trabajaba de ilegal, ¿verdad? Fue su patrón cuando…
RF: Sí, ahí lo conocí, pero no era el dueño del rancho.
FC: Ah, no era el dueño de su rancho.
RF: Llegamos a un rancho que era de un mexicano que tenía trabajo de ese rancho a medias, pero ahí, a mi patrón lo conocían porque él vendía tractores, tenía mucho conocimiento con los ranchos. Y en verdad es un nombre, me refiero al que me arregló, se llamaba Robert Niguilnil.
FC: Robert Niguilnil.
RF: Niguilnil, ese es el patrón oficial que me arregló.
FC: Que le arregló. Ése fue el que…
RF: Sí.
FC: Y, ¿usted cómo se lo volvió a topar a él? ¿Cuándo lo volvió a ver? Ya que trabajaba acá en Ysleta se lo volvió…
RF: No, es que yo lo vi el [19]49 y el [19]51 otra vez y ya no lo volví a ver. Él me llevaba por uno… Él tenía unos ranchos allá pal West Texas, el me llevaba pa allá. Y luego yo estuve del [19]51 al [19]52 y me vine y ya, el [19]51 que me llevó pa allá, ya no lo vi, ya no lo volví a ver. Y el [19]52 me vine, más bien me vine de… Estaba en el West Texas ahí en Nuevo México, pero ahí me agarró la patrulla fronteriza y me echó pa acá. Y luego el [19]53, en el verano, fue cuando me di de alta en Juárez, que estuve dos años, del [19]53 al [19]55. Y luego el [19]56, cuando entré de bracero, fui a buscarlo a Anthony y ya me conoció y todo. “¿Cómo está?”. Y todo pos dije: “Es que estaba en el Mexican Army”, le dije. Pa allá. “Y, ¿qué pasa y qué hay?”. Pos ya le dije: “’Tan arreglando mucha gente ahorita el cónsul, quiero ver a ver si me da una carta”. Y él luego luego me la dio. Arreglé, yo cuando fui, como en mayo fui a verlo, pa junio arreglé. Sí, entré como en abril, ya entré como abril, mayo, junio, pero fueron tres meses y en junio arreglé.
FC: ¿Qué le tocó llevar para arreglar sus papeles? La carta esta que le dio su…
RF: No pos ya no mucho, era una carta que pedían con copia, una carta de trabajo que le daba trabajo y le daba casa y todo eso allí. Y luego, una carta de responsiva como del banco o lo que sea, porque tenía él, como dicen que no estaba, que tenía con qué responder, ¿me entiende?
FC: Ah okay, sí.
RF: Y con copia y luego el acta de nacimiento con copia desde allá de México y luego cartas de Policía con copias según si… de Juárez por supuesto. Y si había vivido en otro país, en otro estado, también tenía que traerla del otro estado. Pero a mí nomás me pidieron nomás la de Juárez con copia y los retratos y en ese tiempo valían $25 dólares una visa, en aquellos años. Así arreglaba uno rápido, sí estaba bien arreglaba y si no, pos usted sabe, si está uno mal, no.
FC: Sí, pues sí.
RF: Pero era rápido en aquel tiempo el proceso de residencia.
FC: Así que usted pagó sus $25 dólares y luego luego se lo… Arreglaron y cuando ya le arregló sus papeles, ¿a dónde se fue a trabajar o qué hizo?
RF: Cuando me vine yo a trabajar al rancho, me pasaron un tiempo allá por Levelland, Texas, estuve un tiempito, no duré mucho allá.
FC: Y luego se regresó aquí a…
RF: Pos me vine y ya, me vine, estuve viviendo en Juárez y trabajé en El Paso del [19]56 al [19]63. Pos el resto del [19]56, porque ya estuve un poquito en el verano allá con él, andaba por el Levelland, por Lubbock. Y del [19]56 al [19]63 viví en Juárez y trabajé en El Paso.
FC: ¿En qué trabajaba en El Paso?, ¿acá qué hacía?
RF: Ahí en una yarda de un lugar que se llama el Centro Médico, ahí en la yarda limpiado el zacate y regando ahí el zacate, flores, ahí lo que sea.
FC: ¿La yarda estaba acá de este lado de, estaba acá en El Paso?
RF: En El Paso, sí.
FC: Y usted cuando se casó, ¿cuándo se casó?, ¿en qué año?
RF: En el [19]62.
FC: O sea que ya usted ya había arreglado sus papeles cuando se casó.
RF: Yo ya había arreglado cuando me casé, sí.
FC: Y, ¿su esposa es mexicana?
RF: Mexicana. Mexicana también ella, sí.
FC: Y, ¿usted le arregló sus…?
RF: Sí, yo le… Sí, porque yo estaba ya arreglado yo. Ella migró el [19]62, fue de que en, ¿cuándo? En agosto parece, en agosto parece, sí.
FC: Y luego ya se quedó… ¿cuándo se vino usted a vivir ya de planta aquí a los Estados Unidos?
RF: De planta vinimos ya desde mediados del [19]63, porque nos fuimos a California. Nos fuimos a California y allá vivimos tres años y medio, ya estamos viviendo aquí. Tres años y medio y al comenzar el [19]67 caímos a esta parte de aquí de Fabens y desde la fecha hemos vivido hasta aquí, hasta aquí adentro.
FC: Y, ¿qué hizo esos tres años allá en California?, ¿en qué trabajó?
RF: Trabajábamos también en las huertas.
FC: ¿En las huertas y todo? Y aquí en Fabens cuando ya dice que ya se vino y aquí ya se quedó, ¿verdad?
RF: Sí, ya nos quedamos aquí.
FC: ¿Qué era lo que hacía aquí?, ¿qué ha hecho, señor?
RF: Trabajar en rancho también.
FC: ¿También?
RF: Regando.
FC: O sea que trabajó toda su vida en…
RF: Casi en la agricultura. Durante toda mi vida, sí.
FC: Muy bien. Y usted volvió a tener en algún, después de que usted se arregló y se hizo ya residente y todo eso, ¿volvió a tener algún contacto con los braceros? ¿Le tocó volver a verlos o aquí trabajar por El Valle?
RF: Pues no muy bien, ya no muy bien. Como yo anduve mucho ya arreglado, pos ya se retira uno del negocio ese, ¿me entiende?
FC: Sí, señor.
RF: Pero por una plática oficialmente con grupos, no; con grupos así o algo o uno, dos, no.
FC: El término bracero, ¿qué significa para usted, señor Flores?
RF: Pos no tengo una idea, ¿me entiende? A qué se debe esa, que le pusieron ese… que le ponen ese nombre, que bracero, yo no entiendo. Posible tenga su, ¿cómo se dice?, tenga su… su interpretación o algo, pero yo no sé. Realmente yo no sé a qué se debe el nombre de ese de bracero. Yo pensé que fue muy mentado en la era de los braceros. Hay muchos recuerdos, quedan muchos recuerdos que impasible, necesitaríamos alguna computadora pa…
FC: Para ponerlos todos.
RF: Pa poderlos grabar ahí. Dejó muchas historias, creo yo que dejó muchas historias que tal vez no sabemos, porque allí no nos damos cuenta, ¿me entiende? Algunas buenas, algunas malas, algunas alegres, lo que sea, ¿no?
FC: Usted, en términos generales, ¿cómo son sus recuerdos de haber sido bracero?, ¿son positivos o son negativos?
RF: No, son positivos, son alegres o positivos, ¿no? Fueron alegres, del rato que anduve yo y de lo que vive de ilegal, para mí lo noto positivos y alegres. No, recuerdos amargos no. Bueno, amargos no porque, pos pasa uno en las líneas, en los montes claro, pero no es una cosa que diga que una amargura, no, ¡es un peligro! Pero digo yo, pos los recuerdos alegres, esos tiempos, los ratos de bracero y el tiempo ilegal, yo lo recuerdo alegres, felices de todos modos.
FC: ¿Cuál es su opinión personal acerca de este Programa Bracero?, ¿qué piensa usted de…?
RF: Pos no tengo una idea porque, pos no puedo hablar mucho porque unos… pero unos piensan de un modo de otros, ¿me entiende? Pos sí, que dicen que, según dicen que vinieron a ayudar al país, que en las cosechas, que cuando la segunda guerra y que la pa allá, ¿me entiende? Más no sé, yo quién puede explicarle de eso, ¿me entiende?
FC: Sí, señor. ¿El haber trabajado usted como bracero, le cambió su vida de alguna forma?
RF: No, sí. No, si desde que empecé aquí luego luego se nota el cambio.
FC: ¿Luego luego se nota el cambio?
RF: Ey, no digo que estamos, no que me la haigan dejado uno nuevo, sí sufrí un poco, pero sí se nota, se nota el cambio lo que sea, se nota, sí.
FC: ¿Lo tratan diferente allí?
RF: Sí. Y luego, pos usted sabe. Pos no sé, póngale que no digamos que el país rico, pero más próspero, lo que sea, ¿no? Porque usted sabe, hay que decir lo que es la verdad de las cosas, ¿no?
FC: Así es.
RF: Ponle, que aquí hay gente pobre como nosotros, pero hay también, no sé por qué estarán así o algo, ¿verdad? Pero no, pos es cuestión como dicen, de pensar cómo vamos a vivir pa poder hacer algo.
FC: ¿Tiene usted señor, pues algún comentario, algún incidente, alguna anécdota que me quiera platicar de los tiempos que usted trabajó como bracero aquí en los Estados Unidos? Algo bueno que le haya pasado, algo malo también.
RF: No, pos fíjese que no, no tengo. No, de momento no hay. Pero no, yo me la pasé bien. Pa mí de bracero y ilegal, no creo que sufrí mucho, pa como ahora, usted sabe, que tienen que… Ahora los ilegales, usted sabe, que por cosas de la vida ya ve que se arrojan a desiertos peligrosos, que les pica onde hay culebras, tanto ansina, no, yo no, yo todo me recuerdo bien. Y no, no mucho peligro, tanto de bracero como ilegal.
FC: Como de ilegal.
RF: Ey.
FC: ¿En ambas partes?
RF: Sí, no, porque no, no fue mucho arrojar mi vida mucho, no jue, arrojar mi vida como hoy en día.
FC: Sí, no, ahora sí.
RF: No, no, ¿pa qué? Pos sí, o ya ve que hay uno que lo encierran en carros del tren. No, llegar a esos extremos, no.
FC: No. ¿A usted en general le fue bien?
RF: Me fui bien, sí. Me fue bien, sí. Sí, pa qué me… Sí.
FC: ¿Usted qué pensaría, señor Rodrigo, de que volvieran a revivir este programa?, de que lo volvieran a hacer el Programa Bracero, ¿qué pensaría usted de eso?
RF: Bueno, pienso que no vuelve a… Quién sabe. No tengo la mente de Julio Verne pa decirle, pero yo pienso que el Programa Bracero, no pienso que vuelva.
FC: ¿Por qué, oiga? ¿Por qué cree eso?
RF: Pos, es que la maquinaria en los ranchos, en los ranchos hay mucha maquinaria mecánica. Antes se necesitaba mucho la mano de esa por la pisca. Así, de a mano, pero ya hay mucha maquinaria pa muchas cosas, hay maquinaria pal tomate. Creo que dicen que hay hasta pa sacar ajos y cebolla y yo no creo que el Programa Bracero, no digo que no, que no pase, no, pero no creo yo que vuelva a renacer el Programa Bracero. Posible, quién sabe, a veces se equivoca uno, pero al momento yo creo que no, no creo que sea posible eso. No porque no quiera yo, no, esas son cosas del Gobierno, ¿me entiende? Pero no creo que vuelva a revivir el Programa Bracero, no es muy necesario.
FC: ¿Ya no es tan necesario como la primera vez cuando lo hicieron?
RF: En aquellos años, sí. Ya no, porque ya no se necesita mucha mano de obra en los ranchos. No creo que yo vuelva a vivir el Programa Bracero, no creo. A lo menos es lo que yo pienso, quién sabe qué pensaran las demás personas, ¿me entiende? Que una vez dijeron unos activistas, hace poco ahora, ya ve que traen ese cuento ahí. Yo no sé si estará bien o total, que no me ajusta. Bueno mío, no está a mi alcance eso de discutir, pos sabe que hay algunos que tiene otros… Mire que, y luego luego van y buscan a la gente grande pa hacerla que haga… “Mire, que vamos a hacer”. Que había un dinero, según dice que pa los, que estaba reservado pa los braceros, ¿será cierto? No, no me interesa. Según dicen que el Gobierno aquí lo mandó pa allá.
FC: ¿De aquí de los Estados Unidos?
RF: Sí, y allá no sé dónde quedarían. Total, que andan las pobres así, gentes ahí y pos son puras esperanzas que no sé si no tengan fin. Últimamente me acuerdo Víctor Hugo, yo he leído las entrevistas, Víctor Hugo Saavedra le preguntó a un grupo una vez allá, no me acuerdo en qué parte los entrevistó y luego le dijo: “Pos han llegado, pero no, que andan en eso… Son personas que en esa cuestión, que muchos no, pos no tenemos escuela y no sé que. Y me acuerdo que le dijo Victor Hugo a uno de ellos, ahora que estábamos ahí que hasta que, que llegó con ese de los trabajadores agrícolas de aquí de El Paso y al congresista Reyes que iban pa Washington, a la mejor ahí no sé, pos ahí ellos. Y le dijo a Víctor Hugo Saavedra a uno: “Oye, ¿ustedes creen que podrán resolver esta… “Pos mire”. Y se lo llevó hasta el río. “¿Ustedes creen que van a resolver este problema antes de morirse?”. Yo no oí que contestó nada el otro señor.
FC: No dijo nada.
RF: Pos no tienen preparación pa hablar, oiga. Yo no digo que yo tengo, no, pero no contestó nada.
FC: Él no dijo, él.
RF: Dijo: “Oyes”, le dijo, “¿ustedes creen que van a resolver el problema antes de morirse?”. Ya va medio siglo, ya muchos a lo mejor ya se murieron, fíjese. Ya están viejecitos.
FC: Sí, pos ya ve que el programa duró bastante tiempo y pos hubo gente de todas las edades.
RF: Ah y luego estaban unos activistas allá, sabe cómo son los activistas, hombre, muy escandaloso, ¿no? Estaban ahí en California, que les andaban haciendo propaganda al Willy Fargo Bank[Wells Fargo Bank]: “No metan ahí dinero, ¡sáquenlo!”. Que porque ése recogía el dinero. Y luego dijeron que es lo que él quería de los braceros. “No, estamos luchando pa que no den braceros a Estados Unidos hasta que no paguen eso”. Yo dije entre mí, nomás que oye uno las dices. Dice ora: “No, cállese”. Dije: “Hombre, señores no necesitan braceros. ¿Para qué ponen eso si eso ya es una cosa ya del pasado?”. Casi por decir así, ¿verdad?, oiga.
FC: Sí señor. Pos ya tanto, ¿verdad?, tanto tiempo, tanto…
RF: Y luego ya hay maquinaria, mucha maquinaria. Hay maquinaria hasta pa tomate, pa piscar tomate, no sé. Hay pa tomate, pa cebolla y pa ajo y hay hasta pa nogales, maquinaria pa tumbar las destas, las ciruela.
FC: ¿Las nueces?
RF: No, las nueces no sé. Por decirle haiga muchos, no sé si lo harán en California. En California hay unos expertos. Yo conocí un hombre que era socio de una secadora, le subían y le tenía… Pos yo creo ya está muy poblado ahí ya, en aquellos tiempos, ése hacía una secadora, unas máquinas pa la ciruela, que con dos hombre llevaban la ciruela a la planta. Y ya les digo yo… Todo eso fue como el [19]59 cuando yo vi eso. No, la maquinaria esa, pal [19]63, no sé cuándo la inventaron. Ya después yo llegué ahí el [19]63, cuando estuvo allá y me dijo: “Mire”, entramos ahí, “mire, allí donde esta la maquinaria. Ya no necesitamos braceros”.
FC: ¿Le dijo?
RF: Estamos hablando del [19]63: “Ya no necesitamos braceros, con dos hombres traemos la ciruela a la secadora”.
FC: Derechito.
RF: Sí, es que es una máquina muy, muy mecánica, muy moderna. Éste es el árbol, se arrima aquí la máquina así y luego mecánicamente abre unos que dicen delantales o que les dicen en inglés aprons; abre hasta a los lados, chequea ahí y no sé como cai, no se cómo ta… ¡Ah! La máquina esa la recoge y luego esas máquina, ya cuando acaba ese árbol por alguna cadena , como dicen, un chute ahí. Cai a una, lleva un hombre con un jeep, una trailita de caja de fierro no muy alta, ahí la echa. Y luego llega ése allá y luego ya le echa de reversa en un tanque la ésa, donde la lavan con lejía, ese del Jeep y bien ligero.
FC: ¿Y la recoge y se la…?
RF: Sí, y dos hombres nomás, no necesitaban tantos, estamos hablando ya del [19]63, fíjese.
FC: ¿Se imagina? Yo creo que ahora menos, ¿verdad? Ya no…
RF: Menos ya, óigame.
FC: Ya no se necesita tanto.
RF: Y por eso dijeron los activistas. “No”, le digo, “no, vamos a pugnar porque no le den braceros a Estados Unidos, hasta que no paguen este dinero.” Pa mí que esas son cosas casi imposibles. Ojalá se puedan hacer una valla en la agua, es una cosa imposible. ¡Ojalá! Pero yo pos dije: “Pobres señores, ojalá y sea eso”. Pero sabe que hay una cosa que se oye oficialmente de eso, eso nomás cubre del [19]42 al [19]46.
FC: Ah, eso nada más es su…
RF: La esa, según esos ahorros y eso nomás para que los trabajaban en el campo…
FC: Nada más los que trabajaron durante ese tiempo.
RF: Y los que trabajaban en el traque para la agricultura, yo, eso no creo. Pero dice, últimamente sí dijo que es para los que trabajaban en el traque. Entonces ahí entraba, es un trabajo de altura el traque.
FC: ¿Qué es eso del traque, señor?
RF: La vía.
FC: Ah, andar en los… Sí, sí.
RF: En las vías.
FC: En los ferrocarriles.
RF: Eso se dijo acá en las noticias, no sé.
FC: Eso se mencionó aquí pero no se sabía.
RF: Digo, sí, que nomás cubre del [19]48 al [19]46, lo demás eso ya…
FC: Ya los que trabajaron después de ese tiempo ya no…
RF: Y se ha dicho que ese dinero lo mandaron a un banco de México, sabrá dónde pararía, el Gobierno.
FC: ¿No se imagina? A lo mejor ya no vamos a saber de eso.
RF: No, pos ya no vamos a saber.
FC: Pues…
RF: Mande, ¿sí?
FC: Yo le quiero agradecer mucho que nos haya permitido la oportunidad de entrevistarlo…
RF: Pues sí cómo no, me gustaría otra vez y nos entrevistamos para si quiere escribir otras cosas acerca de los activistas. No sé qué tienen esos, yo no sé muy bien, lo único que le digo: “Oye, que… Están locos esos”. Digo, hablan de más y se les entiende poco, ¿verdad?
FC: Así es, sí señor. Pos estaría muy bueno, ¿verdad?, que tuviéramos otra…
RF: Sí, pa otro día, me gustaría escribir acerca de eso.
FC: Déjeme…
RF: Que usted me pudiera…
Fin de la entrevista
Fecha de la entrevista: 27 de marzo de 2003
Nombre del entrevistador: Fernanda Carrillo
Esta es una entrevista con el señor Rodrigo Flores el día 27 de marzo de 2003 en la ciudad de El Paso, Texas, entrevistando Fernanda Carrillo. Esta entrevista forma parte del Proyecto de Historia Oral Bracero.
FC: Buenos días señor.
RF: Buenos días o tardes.
FC: Tardes, ¿verdad?
RF: Claro que sí.
FC: ¿Dónde y cuándo nació usted, señor Flores?
RF: Yo nací el 13 de abril del año [19]33, en el estado de Chihuahua, en un rinconcito del estado de Chihuahua.
FC: ¿En dónde? A ver dígame a ver si lo conozco.
RF: Colonia Progreso, tiene algún nombre antes, pero el nombre cuando yo nací según al presente, dice Colonia del Tegón, pero últimamente se llamaba Colonia Progreso. Podemos decir que un rinconcito del estado de Chihuahua.
FC: Y platíqueme de su familia ahí dónde nació usted. ¿Era muy grande ahí?
RF: No, era un pequeño rancho, usted sabe que en México un rancho son muchas casas. En Estados Unidos así entre los valles, un rancho es una casa y en México, un rancho le llaman a cinco, diez, veinte casas. Pos la gente, usted sabe, poco pobre y luego pos en aquellos tiempos sí llovía, se veía verde, cosa que orita pos, hay mucha carestía de la vida ahí. Pues estamos hablando del lugar donde nací yo. Y pos llega el tiempo que la misma vida lo hace uno salir a buscar otros horizontes, porque así es.
FC: ¿Usted fue a la escuela? Ahí dentro de su…
RF: Sí, ahí estudié, no, no aprendí mucho. No fui muy… Pero ahí estudié mismo en mi, en mi… Ahí en donde nací. Pero no fui de muy buena memoria y serían los once años cuando tuvimos que emigrar al pueblo y pos ya no estudié, ya no pude. De todos modos mi memoria no era muy capacitada en aquellos tiempos, no digo que ahora estoy capacitado. Pos sí, porque leo historia y todo, pero ahí estudié y déjeme decirle una de las cosas muy importantes que… Es una de las cosas que le voy a decir sinceramente, no siento… Voy a hablar sinceramente por amor, de la verdad que le debo a México la poquita escuela que me dio, el poquito tiempo que viví allá, porque la mayor parte de mi vida la viví aquí. Pero eso lo recuerdo muy, que me quede mucho el recuerdo de México que me enseñó poquito a leer y a escribir. Y siempre que estampo mi firma ahí, me acuerdo que una de las cosas que le debo a México que nunca se me olvidará. Pero por cosas del destino, pos tuve que, pos cruzar la frontera, primero ilegal; ya después me legalicé y todo y pos no, no digo que estoy muy bien económicamente aquí, pero me siento feliz en mi país, me siento orgulloso de poseer la ciudadanía en este país pobremente. Dios nos dio cuatro hijos aquí, a mí y a mi esposa y pos…
FC: ¿Sus hijos ya nacieron aquí en Estados Unidos?
RF: Sí, mis hijos sí, ellos son unos americanos por nacimiento y yo soy, y mi esposa semos americanos por naturalización, porque es la palabra oficialmente. Hay gentes que entienden la cosa al revés o no saben o no sé qué. Pero mire, yo soy como te puedo decir o mentir la cosa, esto es cierto. Claro, yo he platicado con personas que saben, que comprenden las cosas, como hay unos que tampoco no entienden o no sé qué será. Pero soy mexicano por nacimiento y americano por naturalización, eso oficialmente. Eso es cierto, es una cosa verdadera, no se puede, pos hacer más confusión, porque así es. Sí, americano por naturalización y pos Dios nos dio cuatro hijos aquí en Estados Unidos y pos uno no digo que soy una eminencia, pero sí lograron algo aunque sea aquí. Dos son universitarios, uno técnico en electrónica y el otro trabaja en las escuelas del Distrito de Socorro. Pero todos para mí, son ellos, son suaves personas.
FC: Pues muy bien, les fue muy bien.
RF: Sí, uno de ellos, el más chico orita, el 21 de febrero, después de que estamos en entrevista se graduó, como dicen en inglés: “Second Lieutenant” pa la fuerza aérea.
FC: Ah, qué bien
RF: Y nos sentimos orgullosos de él, pobremente nos sentimos orgullosos. Según iba a ser pa First, Lieutenant, pero según, a veces que no sabe uno lo que tiene uno en su casa. Que la poca inteligencia, pos tiene más cerebro, lo pasaron a Second Lieutenant en su graduación. Es un orgullo, un orgullo para la hispanidad de todos modos.
FC: Claro que sí.
RF: Y nos sentimos felices, yo y mi esposa aquí en el país, pobremente nos sentimos a gusto, sea lo que sea. Yo ahora, toda mi vida, casi la he vivido aquí. Porque pos tenía dieciséis años cuando vine pa acá, no me legalicé luego, pero yo digo que de ese momento de los dieciochos, ya casi tenía la mira que a lo mejor no me iba.
FC: Que se iba a quedar ya a lo mejor aquí.
RF: Dios nos ayudó que fue posible que nos quedáramos y todo y estar haciendo bien para la nación, pa ser honorables pobremente, pero ser honorables personas y usted sabe.
FC: Cuando usted dice que se vino primero, que tuvo que emigrar de su pueblo. Ahí de Progreso a otro pueblo, ¿a dónde se fue?
RF: Esto fue como el mes de julio del año [19]44. Yo tenía once años cuando nos fuimos al pueblo y dos hermanas se fueron adelante primero, que una ya murió, dos hermanas. Y al poco tiempo, pos nos fuimos mi mamá y yo y pos buscando otros horizontes.
FC: ¿Nada más usted tenía dos hermanas?
RF: Sí. Hay otra familia, porque mi papá tenía otra esposa. Pero no, no nos encontramos mucho. Pero oficialmente en mi familia son yo y dos hermanas, que una orita ya murió, en el [19]91. Y luego ahí en Parral…
FC: Ah, se fueron ustedes allí a Parral.
RF: A Parral, sí. Allí yo llegué de once años. Allí cumplía los dieciséis, cuando me vine pal norte.
FC: Ah, o sea que usted duró allí como unos cinco años en Parral.
RF: Como unos cinco años en Parral, como unos cinco años.
FC: Y, ¿usted fue el único de que se vino acá para el norte de su familia, o de su familia se vino alguien más?
RF: No, de mi familia personal, nomás yo.
FC: ¿Nada más usted?
RF: Sí, viajé yo, venía a pasar de ilegal por supuesto, ¿no?
FC: Sí.
RF: Pero ya veníamos ya pal norte, como dicen: “Pal norte”.
FC: Y, ¿qué estaba usted haciendo allí en Parral? Porque me dice que ya no iba a la escuela, ¿empezó a trabajar ahí en…?
RF: Trabajé en una, casi la mayor parte de mi vida trabajé en una bodega de frutería ahí ayudándole ahí a barrer, a acomodar mercancía o llevar mercancía en unos carritos de mano a las tienditas ahí de la ciudad.
FC: ¿Eso fue lo que estaba usted haciendo?
RF: Ey.
FC: ¿Cómo se enteró usted de acá del trabajo en el norte?
RF: Ah, pos es que mire, yo llegué el año [19]44 allí como en el mes de julio. Según este compadre que tengo aquí, que se llama la Colonia Siglo XX, sé exactamente que fue el 8 de julio, porque ahí saqué la fecha. En eso llegua ahí un amigo que conocí en Parral llegó al final del [19]48, que ya conocía acá el norte. Yo no lo conocía, conocía a unos parientes de él, pero a este no lo conocía hasta el [19]48. A finales llegó y ya empezamos a platicar: “Oye, ¿qué? Nos vamos pa el norte entrando marzo”. Fue al final del [19]48, y el [19]49 ahí en marzo nos vamos pal norte.
FC: Se animó luego luego.
RF: Sí, nos venimos como a mediados de marzo. Me acuerdo yo que andaba a caballo casi desde que cumplí mis dieciséis años, cuando me vine pa acá. Aquí pal norte, como dice él, la tierra de los americanos. (risas) Claro que vamos a hablar… usted sabe bien, yo no sabía, hasta últimamente que me daba cuenta por leer que lo que es Canadá, Estados Unidos y México, consideran América del Norte. Eso yo no lo sabía, hasta últimamente, pero de todos modos, si está uno en México o en Canadá, está en América del Norte. Que no tenga uno los pies en Estados Unidos, es otra cosa.
FC: Eso ya es diferente.
RF: Sí, eso diferente. (risas)
FC: Muy bien. Y se vino usted con su amigo, y, ¿a dónde?, ¿a qué parte de Estados Unidos?
RF: Cruzamos por ahí por ese lugar de Anapra y del valle, sí. Es que…
FC: ¿Aquí en Ciudad Juárez?
RF: No, ya entrando pa acá, pa Estados Unidos.
FC: Ah, okay.
RF: No, en Juárez nomás fuimos momentáneamente un par de noches y dormir a la intemperie. Usted sabe lo que es la vida cuando sale uno, ¿no? Cruzamos la línea divisoria por allá por Anapra, Nuevo México, allá y pos a navegar y todo, nomás que…
FC: Y, ¿cómo fue esa vez que cruzó? ¿No fue legal? Esa vez cruzó de…
RF: De ilegal.
FC: No ilegal. Ah, okay.
RF: Fui ilegal.
FC: Ah, okay.
RF: Sí.
FC: Y, o sea, ¿cómo se cruzaban en el día o en la noche? ¿Cómo era?
RF: En la anochecer cruzábamos la… cruzaba al anochecer, cruzábamos la línea fronteriza. ¿Todo eso lo estás grabando?
FC: Sí, señor.
RF: Sí, la línea fronteriza. Nomás que mi amigo conoció allá a un americano, un señor que yo conocí, muy buena gente el señor. Ya lo conocí a él y yo, por medio de ése lo conocí, por medio de mi amigo lo conocí. Y fue ese señor el que me ayudó a mí a legalizarme aquí, pero hasta el [19]56. Entre el [19]49 y [19]52 era ilegal, hasta el [19]56 que me legalicé, en el verano del [19]56.
FC: Sí, del [19]49 al [19]52 estuvo usted trabajando aquí.
RF: No, no, permanente no.
FC: Ah, okay.
RF: Porque del [19]49 al [19]52 era ilegal.
FC: Ah, okay. Y, ¿qué trabajaba? ¿Qué trabajos podía conseguir aquí en…?
RF: ¿Aquí? Casi por lo comúnmente era en la labor, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Cortando hierbas en los algodones, regando las labores…
FC: Y, ¿usted iba y venía de México a Estados Unidos?, o, ¿se quedaba aquí ya?
RF: No, es que alguna vez no, no; es que algunas veces, la mayor parte casi, algunas veces me echaron, lo agarraban a uno y lo echaban y se devolvía uno, se devolvía uno otra vez.
FC: Sí, señor. Y, ¿cuándo fue el año en que usted vino como bracero?
RF: Lo del bracero nomás fue poquito del otoño del [19]55 y poquito de la primavera del [19]56.
FC: Y, ¿cómo se enteró usted de que existía este Programa Bracero?
RF: Yo oí decir desde como el año [19]43, oí decir que los braceros y todos allá, o sea, más o menos. Allá en Parral oí de, que los braceros y que los braceros. Fue el año [19]43, parece, y duró hasta el [19]63, el [19]63 se acabó eso, se acabó el Programa Bracero.
FC: Sí señor. Entonces, ¿usted ya había oído hablar de esto allá en Parral?
RF: Sí, ya se oía decir que los braceros y que los braceros y: “vámonos de braceros”, y que… Sí, y la ilusión de que venía a Estados Unidos y todo eso.
FC: Y, ¿cómo viene y se hace bracero? ¿Qué proceso tuvo usted que seguir o a donde tuvo que ir?
RF: La primera vez que fui yo, ta allí en Chihuahua. En Chihuahua se contrataba uno y lo traían a uno aquí al centro de contratación en Río Vista.
FC: Ah, ¿allí en Chihuahua tenía que ir usted primero allá al centro?
RF: Sí, en Chihuahua, pero después había unos ligeros contratos, un acuerdo con el Gobierno de aquí, que le decían: “Que vamos a pasar a especiales”. Era un tanto grupo, unos cuantos, no eran muchos aquí, los pasaban aquí en el bordo. No tenían que ir a Chihuahua, pero eso era esporádico, no era así.
FC: Los Especiales, ¿les decían a esos?
RF: Especiales, sí. El centro especial de… Exactamente pa contratar ahí en Chihuahua, fue en Chihuahua todo el tiempo. Pero ese era unos grupitos que pasaban a veces algún acuerdo aquí con los rancheros y el gobierno de México: “Echen unos cuantos especiales pa pasarlos pronto”. A unos, pos no una cantidad no muy grande, así nomás de emergencia, ¿me entiende?
FC: Ah okay, sí, sí. Y los escogían de aquí en el bordo y se cruzaban aquí.
RF: Sí y ahí los pasaban ahí por el… Y los llevaban al centro con todo y los… Salen unos camiones ahí al centro de contratación y ahí le daban ya su permiso y ya los rancheros llegaban y…
FC: ¿Cómo se llamaba este centro de contratación?
RF: Río Vista.
FC: El Río Vista.
RF: Río Vista.
FC: Sí señor. ¿A usted le tocó cuando fue allá a Chihuahua pasar aquí por Río Vista?
RF: Sí.
FC: ¿Por el centro ese? Y en Chihuahua, ¿qué tuvo que hacer?, ¿qué le pedían para ser bracero?
RF: ¿Ahí en Chihuahua? Bueno, si los jóvenes que estaban jóvenes de edad, hay un papel que le dicen la cartilla militar cuando cumple uno dieciocho años, le pedían que la cartilla, era oficialmente, nomás eso, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: O daban un número, como ellos pasaban como cincuenta mil, daban un número y iban por número saliendo.
FC: Ah okay. A quien le tocaba ir primero y todo eso.
RF: Sí, nomás que el número era un… Yo no me tocó eso, yo era otra… El número era nomás, era un pretexto para detenerse de la gente. Yo arreglé de otro modo allí, más rápido, no de pagando, no. Una cosa ahí muy… Es muy grande la historia de seguirla, pero le daban número para detener a la gente. Era porque…
FC: A ver, cuénteme cómo logró hacer eso.
RF: Bueno, mire, se la voy a platicar pa que me entienda mejor. Yo fui a Chihuahua y llegué. Porque mire, como yo últimamente que me echaron de mojado aquí, fue el [19]52, en agosto. Entonces en el [19]53 me di de alta en el Ejército, estuve dos años en el Ejército en México, ahí en Juárez.
FC: Ah okay. En el mexicano.
RF: Que data del verano del [19]53 al [19]55, dos años. Y luego el [19]55 que pedí mi baja en julio, me fui a la contratación que comúnmente la hacían en septiembre. Y pos no, yo no agarre número, sino que andaba viendo a ver qué y todo y luego pos en eso había un jefe que era de contratación y lo quitaron y pusieron otro. Y yo le dije a un sargento: “Oiga, pos no traigo ya dinero, ¿cómo le hago? Pos quiero contratarme, porque si me voy otra vez pa Juárez no sirve”, le dije. Dijo: “Mire, venga en la mañana”, dijo, “va a haber esta cosa”, dijo, “va a haber un nuevo jefe, el único que puede ayudarlo. No se trata de dinero ni nada, pura política”. Dijo: “Venga en la mañana temprano y yo le digo cuál es. Mira, aquél es”. “¿Sí?”. Un hombre, ¡oy!, un hombre tan suave, que el Licenciado Labarca, yo no lo conocía.
FC: ¿Cómo? El licenciado La… ¿Qué?
RF: El Licenciado de Labarca.
FC: De Labarca, sí. ¿Él iba a ser el nuevo jefe?, ahí en la…
RF: Era el nuevo jefe al otro día, moreno él, de lentes oscuros y… Ah, con el tiempo platico con un amigo mío. “¡Oy!, Licenciado Labarca, ¡que va!, don Rodrigo. Es un hombre que se hace al lado del pobre”. Ya llegué y: “Oiga jefe”. Haciéndome nomás pa… “¿Qué pasa muchacho?, ¿qué quieres?”. “No, pos ya se me está acabando el dinero y quiero irme de bracero”. Y luego ya le enseñé mi baja del Ejército, mi tarjeta y todo. Y luego, es que un día antes había un teniente, un oficial, del Ejército, ese se encargaba de revisar las cartillas poquito antes de entrar, aquí estaba ese oficial y soldados ahí pa guardar el orden y ya cuando daban grito, bueno, llegaban con el jefe de contratación y allí había un fotógrafo ahí que pagaba uno $3 pesos pa que lo retrataran. Y luego en…
FC: ¿Para qué?, ¿para qué era la foto esa?
RF: Ah, se lo ponían en una… Era un papel que le sacaban ahí, como una fotostática así.
FC: Ah okay.
RF: Y ahí venían, como un Francisco Martínez, el trabajador de internacional.
FC: Ah okay, le llenaban ahí una forma.
RF: Y luego le ponían el retrato. Pagaba uno $3 pesos. Y luego fíjese que era una de las cosas que no me gustó de ese oficial del Ejército. Es que un día antes le dije una palabra no, ofensiva, ¿no? Nomás que dije pa ver qué decía. Y luego otro día, que voy llegando y luego ya que mi jefe me dio la pasada, me dijo: “Oye, dile al teniente que revise”. Yo no quería ya que fuera con él. “No”, dijo, hasta a uno lo hizo menos, le respetó sus derechos. “Ve con el teniente que te revise tus papeles”. Yo tenía algunas entrevistas con algunos empleados de Gobierno de México que hay unos quién sabe cómo, quién sabe qué, no creen a uno, como que lo tratan de… digo, debe estar uno, como uno debe estar ignorante, y; ¡no! y no es así. Y luego se levantó el teniente, no necesitaba ni haberse levantado y luego le dice el jefe de contratación: “Oiga teniente, ¿qué pues con el muchacho? Ya dio servicio, creo él puede ir”. “Pos sí, nomás que hay una cosa”. “Oiga, ¿este loco qué tiene?”, dije.
FC: ¿Ese era el que usted le había dicho el día anterior?
RF: Y dije: “¿Este qué tiene?, pos si no soy desertor”. Si fuera desertor, oiga…
FC: Se había dado bien de baja y todo…
RF: Sí y luego llevaba una carta yo escrita con máquina pal Comandante de la Segunda Zona, cosa que el jefe la leyó.
FC: Ah, cuando usted le dijo que se quería él sí la vio.
RF: Sí y no la leyó. Y luego cuando le dije al teniente ese, no le dijo nada de eso, el Licenciado Labarca no leyó nada de eso. “¿Qué pasa Teniente? El muchacho ya puede ir, ya cayó en servicio”. “Pos nomás que aquí hay una cosa”. “¿Qué teniente?”. “Es que aquí no podemos nosotros recomendar a los que han sido soldados, mire”. “¡Uy!”, dije, “pos me muero de hambre con él”. ¡Fíjese nomás!, ¡jijo! Yo me callé y no dije nada. No teniente, así ya ve como es que, no sé cómo será que a veces dicen: “Yo te atiendo que, tiene cierto malo y cierto no”. “No teniente, no se trata de recomendar”, dijo, “aquí el único pa recomendar soy yo”.
FC: ¿Eso le dijo el jefe?
RF: Se lo dijo en su cara. Pos yo callado, yo.
FC: ¿Sí?
RF: Yo no podía decir nada.
FC: No, pos no, ¡olvídese!
RF: No, ¡jijo! Me gustó mucho al agua ese señor, ese licenciado. Con el tiempo platiqué aquí, entre los trabajadores, allí hay un viejito amigo mío que ya murió. Y le platiqué la historia esa. “No don Rodrigo, qué tiene, Licenciado Labarca partidario del morral.”
FC: ¿También a él lo conocía?
RF: Sí lo conocía. El Licenciado Labarca dijo, partidario del… el morral quiere decir, mire, si yo voy a un trabajo al rancho, pos muy pobrecito en una ampolleta, llevo mi comida en un morral, ya unos que llevan ponchera, pos ya son…
FC: Ya muy moderno, ¿no?
RF: Ora otro que lleva la hielera. You know what I mean, ¿verdad?
FC: Sí, sí señor.
RF: Y esa historia, pos como le digo…
FC: O sea que quería decir con eso que era partidario del morral, que él sí ayudaba a las personas.
RF: Pos a mí luego luego, pos vio ahí y luego viendo la carta en manuscrita, esa máquina. Óigame no, qué pues y luego, ¿no cree que el teniente se salió de onda?
FC: Sí.
RF: ¿Verdad? No tenía ni por qué haberse levantado de la silla, porque…
FC: Pero qué bueno que lo…
RF: Pero, ¿sabe que pensaba este hombre? Que el licenciado se iba a hacer al lado de él. Usted… psicológicamente así, ¿verdad, oiga?
FC: Sí.
RF: Usted que tiene más cerebro que yo, pensaba que se iba a hacer al lado de él…
FC: Y nada, que le salió… (risas)
RF: Y quería a mí, como dice el dicho: “¡Rostizarme!”. Pero qué bueno que no se le hizo.
FC: Así que, ¿así fue como usted se pudo hacer este…?
RF: En esa vez de bracero lo aprendí, la primera vez. La segunda vez no tuve que ir a Chihuahua. Aquí hubo un grupito que pasó por Waterfill y pasé luego, ya no tuve que ir a Chihuahua.
FC: Ah, ¿ya no se tuvo que regresar hasta allá?
RF: Ya no tuve que ir a Chihuahua.
FC: Y de ahí a Chihuahua, ¿cómo se vino acá al centro a este a Río Vista?
RF: Los traen en camiones, los traen en los Chihuahuenses. Creo que el Gobierno pagaba, no sé a cuanto pagaban, nos traiban en los transportes Chihuahuenses.
FC: Chihuahuenses, okay.
RF: Hasta el puerto allí. Y luego ahí en el puerto ahí iba un oficial de Migración americana y nos pasaba a uno a pie. Y luego ya había camiones de una compañía. Pos todos esos negocios, esos nos traiba hasta aquí a Río Vista. Pos son como dieciocho millas de, más o menos de allá. Nos traiban allá al Río Vista, ahí onde… ahí nos contrataban. Ahí duraban una semana, dos, tres días, depende de qué tanta gente sacaban los rancheros, ¿me entiende?
FC: Y cuando usted estaba ahí en el puente, que dice que lo bajaron del camión y cruzar a pie, ¿qué tenía que enseñar para cruzar?
RF: No, yo nomás… Es que era un papel. A los choferes les daban un folio ahí y ya nomás.
FC: Ah, ¿ellos ya nomás enseñaban ese folio y ustedes pasaban?
RF: Sí.
FC: Y se subían a los otros camiones.
RF: Y subíamos los camiones y ya nos veníamos a Río Vista.
FC: A Río Vista.
RF: Sí, ya ahí venía todos los documentos, ahí le recogían la documentación. Ahí no sé qué harían con ella, pero ahí venía todo el… Que la gente podía pasar.
FC: Y luego ya, una vez que llegaba usted a Río Vista, ahí al centro, ¿qué pasaba ahí?, ¿qué tenía que hacer?
RF: Pos ahí, de recién llegado luego luego, mi dispensa mucho, lo fumigaban a uno con polvo pa ver si traiba algo, infección, lo que sea.
FC: Ah, ¿llegaban y los fumigaban con polvo?
RF: Nos fumigaban todo, sí, con polvo por si no trajiera algo así o algo así, ¿me entiende? Ahí estaba salubridad de emigración, los departamentos de salubridad de emigración.
FC: Así que eso llegaron y luego luego con… usted y sus cosas, ¿a usted sí le permitían traerse sus cosas de México?
RF: (tos) Una cosa ligera. Pos no carga usted mucho, pos anda en una aventura, ¿no? Pero puede traer un cambio de ropa los que pueden, porque las aventuras son así rápido, ¿no? Son como aquél, como el personaje que nos menta Julio Verne, en “La Vuelta al Mundo en 80 días”. Ese hombre alistó su viaje así, ¡vámonos!, y ya.
FC: Luego luego.
RF: Rápido, sí. ¡Cargue lo que traiga y vámonos y ya!
FC: Y, ¿usted le avisó a su familia cuando que se iba a venir de bracero?
RF: Bueno, sí, ya de bracero, sí. Pero la primera vez era cuando me vine a la aventura no le avisé a mi mamá, me vine sin avisarle. Ya después, pos ya de bracero estaba grande, ya tenía yo veintidós años, ¿me entiende? Pero la primera vez que me vine, en los dieciséis años no le avisé. Yo sabía que me iba a venir, pero no le dije a mi mamá: “Voy a ir”. No, no. No, usted sabe cómo son las… ¡Uy!
FC: No, no lo hubiera dejado venir, olvídese.
RF: Nombre, me dijo el mayor: “Oye…
2do: ¿Gusta una sodita? Oiga, ¿no le ofrezco soda o algo?
RF: Estamos en la plática…
FC: Estoy bien, muy amable, gracias.
RF: Y luego me dice mi hijo el mayor, se llama Alonso, el que trabaja en las escuelas de Tucson: “Pos oiga… El que trabaja en las escuelas del Distrito de Socorro: “Oiga y, ¿no le avisó mi abuelita?”. “No”, le dije, “si le aviso, no estabas tú aquí”.
2do: Ese vaso es de usted.
FC: Gracias.
RF: ¿Quiere de dieta de esa?
FC: Así está bien, con ésta está bien, muy amable.
RF: “No”, le dije, “si le he avisado, no estabas tú aquí”.
FC: No hubiera nacido, ¿verdad?, ¿para qué?
RF: No, no, si esto fue de así…
FC: Son muy preocuponas las mamás.
RF: Sí, y vámonos pal norte. Bueno, a pesar de que yo venía de trampa, algunos ahí. Pero yo en lo personal, a pesar de que venía como dicen, pos casi como dicen, sin nada y yo venía de todos modos contento. Pos es que: “Orita vámonos a Estados Unidos al norte, a ver qué hay allá”.
FC: ¿Sí?
RF: Sí. (risas)
FC: ¿Usted había oído historias que le contaron acá de cómo era la vida acá en el norte y todo eso?
RF: Muy bien no. Pero yo de todos modos venía contento, porque trae uno imaginación que íbamos a Estados Unidos. Vamos a otro país a ver qué hay allá.
FC: A ver qué nos sale.
RF: Sí, a ver qué, sí.
FC: Y cuando fue al examen ese allí en Chihuahua, ¿no le hicieron examen ni nada ni…
RF: Sí, iba pa allá ya a todos le hicieron una cosa así ligera, a ver cómo… Sí.
FC: Ah okay, allá en Chihuahua también.
RF: Sí también, muy ligero, sí. Y como le digo, aquí llegando aquí a Río Vista le fumigan todo, de donde tiene cabello. Pos, por alguna cosa puede traer alguna plaga, usted sabe, ¿no?
FC: Ah okay. Sí, señor.
RF: Y ya después, pos es lógico. No creo yo que sea eso anticonstitucional; no lo creo, es pa protegerse, pa proteger sí.
FC: Y, ¿ahí le hacían también algún tipo de examen médico? Allí en Río Vista.
RF: No, nomás eso, eso nomás…
FC: ¿La fumigada?
RF: Nomás la fumigación. Y ya nos retrataban, cuando ya se iban a contratar los retrataban y todo. Eso sí que había rayos X, había rayos X. Si salía una cosa mal en los rayos X, lo desechaban.
FC: Ah, tenía que pasar ahí con los rayos X.
RF: De todos modos tenía que pasar a rayos X y si estaba malo, alguna cosa que está mal que ellos saben, él se iba pa atrás, lo devolvían pa México.
FC: Ah okay. Así que tenía que esperarse a pasar esos.
RF: Sí.
FC: Y, ¿algún tipo de vacunas?, ¿algún tipo que les daban ahí?
RF: No me acuerdo de vacunas, pero rayos X sí. Y la fumigación ahí en Río Vista.
FC: Okay. Y luego después de que ya pasaba usted la fumigación y luego los rayos X y luego, ¿a dónde lo mandaban?
RF: Pos ahí se estaba unos días, le daban a uno ahí dónde dormir y comida y le daban cobijas pa taparse.
FC: Y, ¿estaba bien, señor?, ahí la comida. Y para dormir, ¿estaba en buenas condiciones?
RF: No, sí la comida estaba bien, lo que sea. Sí, yo no digo, ¡no!, aunque ha pasado ya medio siglo. Yo no estuve muy mucho ahí, como le digo. Pero no, la comida estaba bien, lo que sea normal, sí.
FC: ¿Usted se quedó entonces a dormir ahí en Río Vista?
RF: De ahí nos estuvimos unos días mientras lo contrataban a uno. Podía durar una noche, dos, cinco días, diez, depende de los rancheros qué tanta gente sacaban, ¿me entiende?
FC: Qué tanta gente se llevaban. ¿Le dieron la opción para escoger entre a dónde se quería ir a trabajar o qué era lo que quería hacer? O ellos le dijeron: “Te vas a algún lado y hacer tal cosa”.
RF: No, pos casi llegaban puros rancheros allá a eso. Llegaban puros rancheros y al rancho, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: A diferentes condados, según a donde le tocaba, ¿me entiende? Si le tocaba que lo llevaran aquí a Las Cruces o al Rosswell o a, como digamos, parte de Arizona, lo que sea. Pero eran rancheros los que…
FC: Los que lo sacaban.
RF: Los que llegaban ahí, sí.
FC: Y una vez que a usted le hicieron su contrato, ya le firmaron sus formas ahí y todo, ¿que hizo?, ¿a dónde lo mandaron a trabajar esa primera vez?
RF: No, pos llegaba un ranchero y era al azar: “Ve y ven, yo me llevo a usted”, o algo. Llegaba un ranchero y decía: “Yo quiero tres o cuatro”. Y se arrimaba uno luego luego a ver qué. “Vengase pues. Yo me llevo estos”. Y ya, nos llevaba y pagaban un tanto cada tres meses por… parece que eran $20 dólares por persona. Si tenía cuatro braceros eran $80. Esos eran, eso se tenían que pagar…
FC: ¿Para poder llevárselos?
RF: Sí, era como un impuesto, como un impuesto de ley. Y según eso, parece que era cada tres meses.
FC: ¿Cada tres meses tenían que pagar ese impuesto?
RF: Para renovar el contrato, cada tres meses se renovaba, tres meses. Y luego lo llevaban ahí a Río Vista, y le ponían el sello, otros a usted. Y luego eran otros $20 cada tres meses. Toy seguro que sí era, no me acuerdo, pero estoy seguro que sí era…
FC: Por persona, ¿verdad? Eso era por cada uno de las personas.
RF: Por persona, sí. Casi seguro, pero si acaso le miento, bueno, no es, no quiere…
FC: Y, ¿a donde se vino usted? ¿A qué parte de Estados Unidos se vino esa vez?
RF: Aquí estuvimos cerquitas, aquí cerquita de Ysleta, ahí nada más.
FC: ¿De Ysleta?
RF: Sí.
FC: Y, ¿qué trabajo le tocó hacer ahí?
RF: Andábamos limpiando algodón, regando y la pisca, la pisca de algodón.
FC: Y, ¿en qué se lo trajeron aquí a su trabajo, aquí en Ysleta? De ahí de Río Vista, ¿en qué se vino?
RF: Ahí llegó un ameri[cano] llegó un hombre y nos trajo en su troca. Ya lo traen ellos en su troca, en su vehículo.
FC: Ah, el mismo que lo contrató, ¿ellos traían una troca para traérselos?
RF: Ya va y lo trae, sí. Ellos nos llevan ya en sus trocas, en sus muebles ya, cuando es cerquitas. Pero si es lejos, supongamos que va como de aquí de Río Vista a Pecos, ya ellos traen un tráiler o un camión, ¿me entiende? Un tráiler tapado con lonas o un camión de los Greyhound.
FC: Ah, un camión.
RF: Cuando es cerquitas, viene aquí cerquitas del valle, viene un ranchero y se los lleva ahí.
FC: ¿En su propio mueble?
RF: Ey, en su propio mueble.
FC: Y, ¿cuánta gente se trajeron junto con usted cuando se vino aquí a Ysleta? ¿Como cuántos braceros serían?
RF: En esa vez, parece que pasaron, no sé si eran como unos dos mil, por ahí va. Bueno, uno no tiene una cifra exacta, es imposible recordarlo. Pero póngale que haigan sido dos mil o menos, por ahí. No era, es que era una cosa ligera eso.
FC: Ah okay. Y, ¿se veía mucha gente ahí en el centro ese? En el Río Vista, señor, ¿se veía mucho movimiento?
RF: Sí, sí había. Sí, había bastante movimiento.
FC: Y, ¿cómo fue el trato de los empleados ahí en Río Vista?
RF: No, nos trataban muy bien, los empleados que trabajaban en Río Vista, los empleados, la mayormente eran hispanos, nos trataban muy bien. Recogía uno una cobija en la noche y luego le ponían un sello que le dieron cobija y otro día en la mañana la entregaba y le ponían un sello.
FC: De que la había entregado.
RF: De que la había entregado, sí. Y sabían bien cuando faltaban cobijas, sabían bien.
FC: Porque pos llevaban el control, ¿verdad?
RF: Sí, sabían bien, porque iban a anunciarlo: “Faltan cobijas”. Estaban anunciando por el radio: “Déjenlas ahí, nosotros vamos a recogerlas. No se metan en problemas”, dijo. No, (risas) sí. Ellos sabían bien, estaban bien preparados pa eso.
FC: Y, ¿cómo cuántas personas se fueron con usted aquí a Ysleta?, ¿cuántos se llevó ese señor?
RF: Eran como tres o cuatro, el rancho era chico. El rancho era pequeño.
FC: Y de esos que se fueron con usted, ¿usted conocía a alguno?
RF: Conocí de allá del sur. Parece que un tal Catarino. Así nomás muy ligeramente. Así nomás, pero no platicamos mucho, pero yo supe que era del sur, de allá de Zacatecas. Me acuerdo que se llamaba Catarino, no me acuerdo el apellido.
FC: Y en el tiempo que estuvo usted ahí trabajando en este ranchito, aquí en Ysleta, ¿le tocó que contrataran a algún ilegal?, o, ¿eran puros braceros?
RF: No, puros, sí… No, había en ese tiempo en los ranchos más grandes había de los ilegales y braceros.
FC: De los dos.
RF: Sí, pero en ése, como era chico, no, tenía puro bracero, sí.
FC: Y, ¿tenía usted mucho contacto con su patrón? Con el que lo contrató.
RF: No, muy poco, casi no.
FC: ¿Muy poco?, ¿casi no lo veía?
RF: Pos sí lo veía, pero no dialogaba mucho, no.
FC: Y su patrón, ¿hablaba español?
RF: Sí, hablaba español y inglés y luego japonés, pos era japonés.
FC: Ah, ¿su patrón era japonés?
RF: Sí. Hablaba inglés y español y japonés, por supuesto, ¿no?, ¿verdad?
FC: Sí, pues sí, ¿verdad? que sí era. Y, ¿cómo lo trataron ahí cuando estuvo usted en…?
RF: Bien, me trató bien el hombre, nos trataba bien. Era él y otro hermano y el papá ya estaba viejecito. Se llamaba don José, ese vino de Japón. Era originario de allá, pero no sé que, me parece que murió al poco tiempo, no luego luego. En ese tiempo se legalizó el viejito, en ese tiempo… No, poquito antes, sí. Ya había ido a Japón y no podía ir [por] que no tenía pasaporte. Y la viejita parece que murió al poquito tiempo, yo no supe. Ahí pláticas que se había muerto al poco tiempo que se acabó la guerra. Pero el viejito sobrevivió, se llamaba don José.
FC: Sí, ¿él era el papá de su patrón?
RF: Sí, el papá ese. Eran dos hermanos japoneses.
FC: Y el tiempo que estuvo ahí usted trabajando, ¿le tocó que alguna vez las autoridades mexicanas o las americanas llegaran a inspeccionar algo, papeles? Ya ve que a veces iban los inspectores y esas cosas.
RF: Nunca me tocó. Pero lo único, no, nunca me tocó, pero lo único que le puedo decir es esto, acerca de esto, una activista que conocí el año pasado, que no le puedo decir su nombre, platicamos de eso y todo y dijo: “Ah, qué bueno que me platica orita de los braceros”. Este hombre trabajó con el Gobierno, me dijo… No, muy suave, de todos modos no le puedo decir porque, por equis causa, ¿no? No es mío.
FC: Sí, sí señor.
RF: Dijo: “Yo trabajé con el Gobierno, me contrataron”. Me dijo: “Oye, ven”, dijo, “se trata de esto, no tengas miedo”. Tenía que usar pistola oculta. “No, pos déjala aquí”. “Se la voy a soltar al costo”. Era muy suave el señor. Últimamente me dijo: “Yo soy activista”. Yo nomás lo saludé y seguimos con plática, nos hemos visto, fuimos a dos, tres una vez cuando, la toma del nuevo Representante del Distrito 75, que es mi consuegro. Y fuimos y luego, me dijo: “Se trata de esto”. “¿Qué?”, le dije. “Hay que ir a los ranchos”, dijo, “a investigar a los braceros a ver cómo los tratan”. Le voy a platicar una cosa, yo no supe mucho de eso de cosas malas, o sea, o de esos hombres que tratan uno mal. Pero dicen que llegó un, llegó a un rancho ahí, que no quería abrirles el mayordomo. “No, no te puedo abrir”. Y que todo.
FC: El mayordomo no sabía que él era…
RF: No, él no sabía que era así. Y este traiba su pistola oculta y traiba un radio, aquellos radios de corta distancia que usaba La Migra, los Motorola. Dice: “Y otra vez no”. Me dijo él: “Yo traiba mi Marshall ahí cerca”. Nomás nos comunicábamos: “Voy a tal rancho”. Pos llegué ahora: “No”, dijo, “no puedes ir, no te puedo [dejar] entrar”. Dijo: “Bueno, pos ahí vengo mañana a ver si te animas”.
FC: Sí.
RF: Pues yo creo que otro día vino y estaba mi Marshall allí, a cierta distancia hablando. Llegué, pos ya estaba ahí ese otro día, ya estaba el ranchero ese y un abogado. “No, pos no puedes entrar”, dijo. El mayordomo ¿verdad?, que dijo: “No te puedo [dejar] entrar”. “No, déjame hablar por este”. “No, yo estaba jugando”. “No, conmigo no ande jugando, están locos, estas cosas serias”. El hombre serio. Pues entonces, el otro día que llegó, que estaba ahí el patrón y su abogado: “Pos no, no puedes entrar”. Y ya de repente llegó el, dijo, el Marshall, ahí estaba: “Abre la puerta, esa o te vuelo el candado”.
FC: Ya fue el Marshall el que le dijo.
RF: El Marshall, sí. “Abre la puerta”. Pa que este hombre investigara a ver cómo nos trataba. Supe yo porque él me dijo…
FC: Porque le platicó, sí.
RF: Dijo: “Abre la puerta o te vuelo el candado”.
FC: No, pos ya le abrieron, ¿verdad?
RF: No, dicen que dijo el abogado: “No”, dijo, “no se le puede hacer nada”.
FC: Lo tienen que dejar pasar…
RF: No hay nada mal.
FC: Pos sí.
RF: Eso es lo único que sé, más o menos ahí y eso porque me la platicó esa persona.
FC: Y, ¿cómo encontró ahí su amigo las condiciones?
RF: Pos dice que le platicó… “Díganme todo, díganme”. “Pos es que tenemos… “No, no tengan miedo, a eso vengo yo, para eso me pagan”, dijo, “aquí ando y todo eso, díganme cómo los tratan y todo”. Sí, yo creo allí levantó algún informe, no sé y quién sabe qué más sería. Esa no está a mi alcance, saber lo demás, ¿me entiende? Nomás le digo eso porque ese a mí me platicó que… Dijo: “No”, dijo, “y, ¿sabe lo que es macho?”. “Pos no sé mucho, pero no lo ignoro tanto”, le dije. Usted sabe, ¿no? Y estaba yo muy macho, no, ¡es macho! Ese hombre, cuidado con ese. Sí, como le digo, no le voy a repetir que le dijo: “¡Abre la puerta o te vuelo el candado!”.
FC: No, pos ya no hubo de otra.
RF: Sí, (risas) eso lo sé porque me hablo ese amigo, ¿me entiende? Más cosas no sé del trato cómo era, porque no anduve mucho en la braceriada, ¿me entiende? Nomás mi mayor parte fue ilegal, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Pero anduve bien. Yo llegué y me trataron bien, yo no me quejo. Ilegal que hubiera sido, ¿me entiende?
FC: Sí, señor.
RF: Y llegué, me trataron bien, lo que sea.
FC: Y cuando estaba aquí trabajando, usted todavía no se casaba, ¿verdad?, aquí.
RF: No, por supuesto que no.
FC: Ah okay. Y, ¿se comunicaba con su mamá allá a México?, a Parral.
RF: No, pos sí. Cuando estaba lejos, cuando estaba retirado, pero aquí cerquitas, pos aquí en el valle, no. Ya cuando estuve de bracero ya vivíamos en Juárez, ¿me entiende?
FC: Ah okay. ¿Ya su familia se había venido?
RF: Sí, pero cuando estaba así más retirado, entonces sí le escribía. Pero cuando estaba aquí cerquitas de bracero, que fue lo último, como le digo, el otoño del [19]55, verano del [19]50, pos ahí íbamos cada ocho días.
FC: ¿Podía cruzar y todo?, ¿no había problema?
RF: No había problema.
FC: Okay, entonces los veía bastante seguido.
RF: Sí.
FC: Y aquí trabajando en la granja, ¿como cuántos días trabajaba a la semana?
RF: Trabajamos los cinco, los seis días, por ahí, sí.
FC: Cinco, seis días.
RF: Cinco, sí, más o menos.
FC: Y más o menos, ¿como cuántas horas trabajaba al día?
RF: Ocho horas diarias. Más o menos ocho horas, común y corriente.
FC: Y, ¿le daban espacios para comer?, ¿le daban descansos?
RF: Sí, comíamos al medio día y descansábamos un rato, como una media hora o no sé qué, comían… Descansábamos pa comer.
FC: Y, ¿usted se tenía que hacer su comida o ahí su patrón les daba?
RF: No, no, en dónde eran poco, hacía uno su comida y como en los ranchos más grandes, yo creo, a mí nunca me tocó andar de eso, en ranchos muy grandes, no sé yo, a mí no me tocó ver aquí en ésta parte de este valle, que tuvieran casa de borde; no sé yo. Pero en California, ya no hablamos de bracero, yo conocí parte de California el [19]59, ya arreglao. Había mucha gente así, pero ya no de braceros. No me acuerdo si había partes y había braceros. ¡Sí! No, pero eso era en los centros de contratación, no quiero mentir, ya en los ranchos. ¡Ah, no, sí! Yo conocí un rancho en California que tenía casa de borde en el [19]59…
FC: ¿Qué es eso, señor? ¿Qué es eso?
RF: El mismo del… El mayordomo del rancho o su familia, hacían ese negocio, ¿me entiende? Yo no sé cómo le cobrarían, o si lo cobraban quién pagaría esa comida o… ¡Ah!, pos yo creo que el ranchero, yo creo pagaba la comida. Yo pienso, ¿verdad?
FC: Como que el mayordomo tenía ahí su cocinita y él les hacía de comer así a todos.
RF: Sí y yo era creo que el ranchero pagaba la comida, yo creo, ¿verdad?
FC: ¿Cómo se llamaba esa casa de qué, señor?
RF: ¿Esa casa de borde?
FC: ¿De borde?
RF: Sí, le decían casas de borde.
FC: De borde, ah okay.
RF: De esas casas de onde alimentan a gentes solteras. En México también le llaman ahí casas de borde. Que tiene alguna una señora en su casa particular o un restaurante asisto, casa de asistencia. “Aquí le doy asistencia a veinte, treinta nombres”. Sí, pos lo que sea, ¿me entiende?
FC: Sí, sí señor.
RF: Eso fue en California, ahí conocí eso. Así que ahí había casa en donde le hacían la comida a los braceros. Pero en las partes que yo anduve de bracero, aquí en el valle, yo nunca vi eso. Pos si no me haya tocado estar en un rancho grande, pos sí, en la labor sí había esas casas ya.
FC: Aquí.
RF: Ya pa mucha gente a lo mejor sí les hacían la comida, no sé y si los cobraban tanto, pero cuando era poco, uno mismo hacía su alimento, uno mismo hacía su comida.
FC: Uno mismo hacía… ¿usted ahí se cocinaba?
RF: Sí.
FC: Y dónde, por ejemplo usted, ¿les pusieron un lugar para dormir, para vivir ahí en el rancho?
RF: Sí.
FC: ¿Dónde se quedaban a…?
RF: Sí, había un cuarto ahí, como era chico el rancho ese, era un cuarto general ahí, un cuarto, cada quien tenía su camita, ¿me entiende?
FC: Sí, pero dormían ahí todos juntos, ¿verdad?
RF: Sí, sí.
FC: Y tenían camas y todo.
RF: Sí.
FC: Y, ¿cómo le hacían para los servicios de los baños y eso?, ¿tenían ellos ahí drenaje?
RF: No, pos como en ranchos más grandes posible sí los hayan tenido, pero todavía, en ese tiempo, había muchos de esos de hoy, letrinas. Pos sí, los ranchos grandes sí tuvieran eso, pero a mí no me tocó ver, de bracero no me tocó ver eso.
FC: Sí, porque el suyo estaba…
RF: Sí, a mí no me tocó ver eso.
FC: Y por ejemplo, ¿usted lavaba su ropa ahí en el, en donde trabajaba?
RF: Sí, ahí lavan su ropa, ahí en un bote, lo que sea ahí.
FC: Y qué de, por ejemplo, las toallas y los jabones y los cepillos de dientes. ¿Esos se los daba su patrón?, o usted se los tenía…
RF: No, uno lo tenía que comprar.
FC: ¿Usted se lo tenía que comprar?
RF: Sí.
FC: ¿Se acuerda cuánto le pagaban cuando se vino?
RF: Sí, en ese tiempo aquí pagaban $0.50 centavos la hora.
FC: Cincuenta centavos.
RF: Sí, en esos años pagaban… Sí, yo estoy hablando en el [19]55. No sé cuándo subiría, pero todavía el [19]56 digamos eran $0.50 centavos la hora.
FC: Y, ¿le pagaban ellos en efectivo o le daban un cheque?
RF: No, en efectivo nos pagaban. Efectivo ahí.
FC: ¿Cada cuando le daban su sueldo?
RF: Cada ocho días.
FC: Y, ¿usted le mandaba dinero a su familia en México?
RF: Porque cuando estaba de bracero, no. Porque yo iba a ir…
FC: ¿Usted iba ahí?
RF: Sólo cuando anduve lejos de ilegal, entonces sí, ¿me entiende?
FC: Sí.
RF: Sí mandaba de vez en cuando.
FC: Y, ¿nunca tuvo problema para que le dieran su pago?
RF: No, nunca, nunca tuve problema, nunca, ¿pa qué más? Sí, no.
FC: ¿Ni nunca le quitaron de su salario, que impuestos o que…?
RF: No, nomás eran un, creo que $0.50 centavos que era parece, que para aseguranza para ir con el doctor. Sí, yo esa no era una aseguranza de vida, yo creo que no.
FC: Ah, okay. Nada más para que si se enfermaba o algo fuera con el doctor.
RF: Unos $0.50 centavos me parece que era pa ir pa una ligera, pero cosa de que fuera una aseguranza de vida, no; yo no creo, a lo menos yo no creo. Porque el precio lo dice, ¿no?
FC: Sí, no. ¿Se imagina?, no era tanto. Y luego cuando usted… Esa fue la primera vez que se cruzó y cuando se volvió a cruzar, que ya dice que ya se cruzó aquí, con un grupo del Waterfill, ¿verdad?
RF: Sí.
FC: Que estaba usted ahí, ¿a dónde se vino?
RF: Ahí con ese mismo patrón de ahí.
FC: Ahí se vino con ese mismo patrón…
RF: Con ese mismo patrón, sí.
FC: Y, ¿usted sabía que venía con este mismo o no?
RF: Sí, no. Yo sabía porque vine, yo vine y lo… Ahí tiene un ranchito él, cerquita de Ysleta, on taba La Asociación. Y como yo tenía local ahí vine y lo vi, dijo: “Deja”, dijo, “vamos pa apuntarte”, dijo, “y al medio día lo van a pasar ahí”. Ahí luego luego nomás brincamos la carretera.
FC: Y luego luego lo…
RF: Me apuntó y dijo: “Vete, vete, ya estás apuntado. Ya nomás que lleguen allá los representantes de La Asociación”. Eran representantes.
FC: ¿De qué asociación, señor?
RF: Era La Asociación de los braceros.
FC: Ah okay.
RF: Sí, era La Asociación de los braceros, sí.
FC: Entonces ellos anotaban los nombres de las personas que se iban.
RF: Sí, ellos eran los representantes de La Asociación, ¿me entiende?
FC: Sí señor.
RF: Era un negocio acá más o menos, ¿me entiende?
FC: Y por ejemplo, bueno ya se regresó usted. Y, ¿cuánto duró trabajando aquí la segunda vez?
RF: ¿La segunda vez? Yo creo, pos fueron, ora verá…
FC: Porque la primera vez duró todo un verano, ¿verdad?
RF: Sí, bueno no, pero fue en otoño. La primera vez que vine fueron como tres meses en otoño y me salí y luego después vine en marzo, abril y mayo, abril, mayo, junio, julio, como tres veces nomás. Porque ya después me fui a buscar a mi patrón pa que me arreglara y cancelé mi contrato.
FC: Esa segunda vez ya usted ya no acabó su contrato.
RF: Pos fíjese, llegué a los tres meses, pero ya no, ya no lo…
FC: Ya no lo renovó.
RF: No renové porque me dijo el cónsul americano: “¿Usted ha entrado de bracero?”. “Sí”. Ya andaba yo tramitando mi residencia. Dijo: “Ya no renueve ese contrato. Dígale a su patrón que ya no renueve, que le vamos a dar residencia”. Bueno, así me dijo el representante del cónsul: “Ya no renueve su contrato”. Y no y ya me dijo el patrón: “Traes tú para… “No, ya no. Yo ya me voy”, dije, “ya me voy pa Río Vista, ya me voy”. Y ya no lo renové.
FC: Cuando lo renovaba, ¿tenía que ir de regreso ahí a Río Vista a renovarlo?
RF: No, ellos lo llevaban.
FC: Ellos lo llevaban. Ah okay.
RF: Sí, uno nomás le firmaba y ellos los llevaban.
FC: Y ellos ya solos los llevaban y le ponían ahí su…
RF: Sí, no necesitaba ir uno ya.
FC: Y luego por ejemplo, ¿qué hacía usted cuando tenía sus días de descanso?, los que les daban aquí.
RF: Pos iba una pa… Sí, de plano iba uno pa Juárez, estarme un rato allá o se estaba uno allá a veces, leyendo alguna revista o algo.
FC: ¿Se podía quedar ahí en el rancho si usted quería?
RF: Sí, sí, aquí, pos aquí dormíamos. Podíamos ir nomás… sí podíamos ir todos los días, pero no se necesita, pero íbamos cada semana. Porque tenía que le daban un permiso aparte de la tarjeta. Ese permiso ahí decía: “Autorizo a este que vaya para Juárez”. Y ahí se lo quitaban ya pa acá, ahí en el puente. Era un permiso, pero era también que…
FC: Entonces, su patrón le tenía que dar un permiso para que usted pudiera cruzar a Juárez.
RF: Sí, manuscrito, de allá pa acá.
FC: Ah, de allá para… Ah okay, sí.
RF: Manuscrito, sí, porque de otro modo.
FC: Sí, ya no lo dejaban…
RF: No, y a ver cómo, sí. Y luego ahí le veían ahí y: “Vámonos”. “Okay”. Y pasaba, ahí manuscrito.
FC: Y por ejemplo, los que… Usted porque su familia vivía en Juárez, pero de los otros braceros que ya ve que ellos no eran de aquí, ¿ellos también a veces se cruzaban a Juárez?, o, ¿qué hacían ellos?
RF: Bueno, los que estaban aquí cercas, posible sí iría, yo creo. Como yo no conocí mucho, entonces yo siento que sí. Íbanos, a veces querían ir a Juárez, es lógico. Les daban ganas de ir a Juárez o lo que sea, yo pienso que sí.
FC: ¿Usted nunca se hizo amigo con los que trabajaba usted ahí en el rancho con este señor?
RF: Casi no hice mucha amistad, casi no. Digamos amistad oficialmente, así que digamos, no.
FC: ¿Había alguna iglesia por aquí cerca de la que usted pudiera ir? O usted iba allá…
RF: Había una en Ysleta, ¿me entiende? Pos yo nunca, no. Con el tiempo ese que fui, no me… casi no iba, nomás me dedicaba un ratito para ir a Juárez y me venía.
FC: Sí señor. Espéreme, déjeme… Esa vez que dice que ya su patrón, que el cónsul le dijo que ya no renovara el contrato para arreglar sus papeles, ¿cómo consiguió arreglarlos?, ¿cómo le hizo?
RF: Ah, pos ése, mi primer patrón que conocí cuando andaba de ilegal, ése me firmó pa arreglar.
FC: Ah, le tenía que firmar él para…
RF: Darme una carta, dan una carta que sostenimiento y de trabajo: “Yo tengo trabajo pa él y… En una carta que con qué salvar una cosa que pa tal… Pos era un requisito.
FC: ¿Cómo se llamaba su patrón?
RF: Mi patrón, le voy a decir por modo de hablar, mi patrón se llamaba, el que me… Cuando hablo de mi patrón, me refiero al que me arregló.
FC: Ese fue su primer patrón, ¿verdad?
RF: Fue mi primer… No, pos sí fue mi primer patrón porque llegué primero ahí a un rancho que trabajamos con un…
FC: Pero ahí era cuando todavía trabajaba de ilegal, ¿verdad? Fue su patrón cuando…
RF: Sí, ahí lo conocí, pero no era el dueño del rancho.
FC: Ah, no era el dueño de su rancho.
RF: Llegamos a un rancho que era de un mexicano que tenía trabajo de ese rancho a medias, pero ahí, a mi patrón lo conocían porque él vendía tractores, tenía mucho conocimiento con los ranchos. Y en verdad es un nombre, me refiero al que me arregló, se llamaba Robert Niguilnil.
FC: Robert Niguilnil.
RF: Niguilnil, ese es el patrón oficial que me arregló.
FC: Que le arregló. Ése fue el que…
RF: Sí.
FC: Y, ¿usted cómo se lo volvió a topar a él? ¿Cuándo lo volvió a ver? Ya que trabajaba acá en Ysleta se lo volvió…
RF: No, es que yo lo vi el [19]49 y el [19]51 otra vez y ya no lo volví a ver. Él me llevaba por uno… Él tenía unos ranchos allá pal West Texas, el me llevaba pa allá. Y luego yo estuve del [19]51 al [19]52 y me vine y ya, el [19]51 que me llevó pa allá, ya no lo vi, ya no lo volví a ver. Y el [19]52 me vine, más bien me vine de… Estaba en el West Texas ahí en Nuevo México, pero ahí me agarró la patrulla fronteriza y me echó pa acá. Y luego el [19]53, en el verano, fue cuando me di de alta en Juárez, que estuve dos años, del [19]53 al [19]55. Y luego el [19]56, cuando entré de bracero, fui a buscarlo a Anthony y ya me conoció y todo. “¿Cómo está?”. Y todo pos dije: “Es que estaba en el Mexican Army”, le dije. Pa allá. “Y, ¿qué pasa y qué hay?”. Pos ya le dije: “’Tan arreglando mucha gente ahorita el cónsul, quiero ver a ver si me da una carta”. Y él luego luego me la dio. Arreglé, yo cuando fui, como en mayo fui a verlo, pa junio arreglé. Sí, entré como en abril, ya entré como abril, mayo, junio, pero fueron tres meses y en junio arreglé.
FC: ¿Qué le tocó llevar para arreglar sus papeles? La carta esta que le dio su…
RF: No pos ya no mucho, era una carta que pedían con copia, una carta de trabajo que le daba trabajo y le daba casa y todo eso allí. Y luego, una carta de responsiva como del banco o lo que sea, porque tenía él, como dicen que no estaba, que tenía con qué responder, ¿me entiende?
FC: Ah okay, sí.
RF: Y con copia y luego el acta de nacimiento con copia desde allá de México y luego cartas de Policía con copias según si… de Juárez por supuesto. Y si había vivido en otro país, en otro estado, también tenía que traerla del otro estado. Pero a mí nomás me pidieron nomás la de Juárez con copia y los retratos y en ese tiempo valían $25 dólares una visa, en aquellos años. Así arreglaba uno rápido, sí estaba bien arreglaba y si no, pos usted sabe, si está uno mal, no.
FC: Sí, pues sí.
RF: Pero era rápido en aquel tiempo el proceso de residencia.
FC: Así que usted pagó sus $25 dólares y luego luego se lo… Arreglaron y cuando ya le arregló sus papeles, ¿a dónde se fue a trabajar o qué hizo?
RF: Cuando me vine yo a trabajar al rancho, me pasaron un tiempo allá por Levelland, Texas, estuve un tiempito, no duré mucho allá.
FC: Y luego se regresó aquí a…
RF: Pos me vine y ya, me vine, estuve viviendo en Juárez y trabajé en El Paso del [19]56 al [19]63. Pos el resto del [19]56, porque ya estuve un poquito en el verano allá con él, andaba por el Levelland, por Lubbock. Y del [19]56 al [19]63 viví en Juárez y trabajé en El Paso.
FC: ¿En qué trabajaba en El Paso?, ¿acá qué hacía?
RF: Ahí en una yarda de un lugar que se llama el Centro Médico, ahí en la yarda limpiado el zacate y regando ahí el zacate, flores, ahí lo que sea.
FC: ¿La yarda estaba acá de este lado de, estaba acá en El Paso?
RF: En El Paso, sí.
FC: Y usted cuando se casó, ¿cuándo se casó?, ¿en qué año?
RF: En el [19]62.
FC: O sea que ya usted ya había arreglado sus papeles cuando se casó.
RF: Yo ya había arreglado cuando me casé, sí.
FC: Y, ¿su esposa es mexicana?
RF: Mexicana. Mexicana también ella, sí.
FC: Y, ¿usted le arregló sus…?
RF: Sí, yo le… Sí, porque yo estaba ya arreglado yo. Ella migró el [19]62, fue de que en, ¿cuándo? En agosto parece, en agosto parece, sí.
FC: Y luego ya se quedó… ¿cuándo se vino usted a vivir ya de planta aquí a los Estados Unidos?
RF: De planta vinimos ya desde mediados del [19]63, porque nos fuimos a California. Nos fuimos a California y allá vivimos tres años y medio, ya estamos viviendo aquí. Tres años y medio y al comenzar el [19]67 caímos a esta parte de aquí de Fabens y desde la fecha hemos vivido hasta aquí, hasta aquí adentro.
FC: Y, ¿qué hizo esos tres años allá en California?, ¿en qué trabajó?
RF: Trabajábamos también en las huertas.
FC: ¿En las huertas y todo? Y aquí en Fabens cuando ya dice que ya se vino y aquí ya se quedó, ¿verdad?
RF: Sí, ya nos quedamos aquí.
FC: ¿Qué era lo que hacía aquí?, ¿qué ha hecho, señor?
RF: Trabajar en rancho también.
FC: ¿También?
RF: Regando.
FC: O sea que trabajó toda su vida en…
RF: Casi en la agricultura. Durante toda mi vida, sí.
FC: Muy bien. Y usted volvió a tener en algún, después de que usted se arregló y se hizo ya residente y todo eso, ¿volvió a tener algún contacto con los braceros? ¿Le tocó volver a verlos o aquí trabajar por El Valle?
RF: Pues no muy bien, ya no muy bien. Como yo anduve mucho ya arreglado, pos ya se retira uno del negocio ese, ¿me entiende?
FC: Sí, señor.
RF: Pero por una plática oficialmente con grupos, no; con grupos así o algo o uno, dos, no.
FC: El término bracero, ¿qué significa para usted, señor Flores?
RF: Pos no tengo una idea, ¿me entiende? A qué se debe esa, que le pusieron ese… que le ponen ese nombre, que bracero, yo no entiendo. Posible tenga su, ¿cómo se dice?, tenga su… su interpretación o algo, pero yo no sé. Realmente yo no sé a qué se debe el nombre de ese de bracero. Yo pensé que fue muy mentado en la era de los braceros. Hay muchos recuerdos, quedan muchos recuerdos que impasible, necesitaríamos alguna computadora pa…
FC: Para ponerlos todos.
RF: Pa poderlos grabar ahí. Dejó muchas historias, creo yo que dejó muchas historias que tal vez no sabemos, porque allí no nos damos cuenta, ¿me entiende? Algunas buenas, algunas malas, algunas alegres, lo que sea, ¿no?
FC: Usted, en términos generales, ¿cómo son sus recuerdos de haber sido bracero?, ¿son positivos o son negativos?
RF: No, son positivos, son alegres o positivos, ¿no? Fueron alegres, del rato que anduve yo y de lo que vive de ilegal, para mí lo noto positivos y alegres. No, recuerdos amargos no. Bueno, amargos no porque, pos pasa uno en las líneas, en los montes claro, pero no es una cosa que diga que una amargura, no, ¡es un peligro! Pero digo yo, pos los recuerdos alegres, esos tiempos, los ratos de bracero y el tiempo ilegal, yo lo recuerdo alegres, felices de todos modos.
FC: ¿Cuál es su opinión personal acerca de este Programa Bracero?, ¿qué piensa usted de…?
RF: Pos no tengo una idea porque, pos no puedo hablar mucho porque unos… pero unos piensan de un modo de otros, ¿me entiende? Pos sí, que dicen que, según dicen que vinieron a ayudar al país, que en las cosechas, que cuando la segunda guerra y que la pa allá, ¿me entiende? Más no sé, yo quién puede explicarle de eso, ¿me entiende?
FC: Sí, señor. ¿El haber trabajado usted como bracero, le cambió su vida de alguna forma?
RF: No, sí. No, si desde que empecé aquí luego luego se nota el cambio.
FC: ¿Luego luego se nota el cambio?
RF: Ey, no digo que estamos, no que me la haigan dejado uno nuevo, sí sufrí un poco, pero sí se nota, se nota el cambio lo que sea, se nota, sí.
FC: ¿Lo tratan diferente allí?
RF: Sí. Y luego, pos usted sabe. Pos no sé, póngale que no digamos que el país rico, pero más próspero, lo que sea, ¿no? Porque usted sabe, hay que decir lo que es la verdad de las cosas, ¿no?
FC: Así es.
RF: Ponle, que aquí hay gente pobre como nosotros, pero hay también, no sé por qué estarán así o algo, ¿verdad? Pero no, pos es cuestión como dicen, de pensar cómo vamos a vivir pa poder hacer algo.
FC: ¿Tiene usted señor, pues algún comentario, algún incidente, alguna anécdota que me quiera platicar de los tiempos que usted trabajó como bracero aquí en los Estados Unidos? Algo bueno que le haya pasado, algo malo también.
RF: No, pos fíjese que no, no tengo. No, de momento no hay. Pero no, yo me la pasé bien. Pa mí de bracero y ilegal, no creo que sufrí mucho, pa como ahora, usted sabe, que tienen que… Ahora los ilegales, usted sabe, que por cosas de la vida ya ve que se arrojan a desiertos peligrosos, que les pica onde hay culebras, tanto ansina, no, yo no, yo todo me recuerdo bien. Y no, no mucho peligro, tanto de bracero como ilegal.
FC: Como de ilegal.
RF: Ey.
FC: ¿En ambas partes?
RF: Sí, no, porque no, no fue mucho arrojar mi vida mucho, no jue, arrojar mi vida como hoy en día.
FC: Sí, no, ahora sí.
RF: No, no, ¿pa qué? Pos sí, o ya ve que hay uno que lo encierran en carros del tren. No, llegar a esos extremos, no.
FC: No. ¿A usted en general le fue bien?
RF: Me fui bien, sí. Me fue bien, sí. Sí, pa qué me… Sí.
FC: ¿Usted qué pensaría, señor Rodrigo, de que volvieran a revivir este programa?, de que lo volvieran a hacer el Programa Bracero, ¿qué pensaría usted de eso?
RF: Bueno, pienso que no vuelve a… Quién sabe. No tengo la mente de Julio Verne pa decirle, pero yo pienso que el Programa Bracero, no pienso que vuelva.
FC: ¿Por qué, oiga? ¿Por qué cree eso?
RF: Pos, es que la maquinaria en los ranchos, en los ranchos hay mucha maquinaria mecánica. Antes se necesitaba mucho la mano de esa por la pisca. Así, de a mano, pero ya hay mucha maquinaria pa muchas cosas, hay maquinaria pal tomate. Creo que dicen que hay hasta pa sacar ajos y cebolla y yo no creo que el Programa Bracero, no digo que no, que no pase, no, pero no creo yo que vuelva a renacer el Programa Bracero. Posible, quién sabe, a veces se equivoca uno, pero al momento yo creo que no, no creo que sea posible eso. No porque no quiera yo, no, esas son cosas del Gobierno, ¿me entiende? Pero no creo que vuelva a revivir el Programa Bracero, no es muy necesario.
FC: ¿Ya no es tan necesario como la primera vez cuando lo hicieron?
RF: En aquellos años, sí. Ya no, porque ya no se necesita mucha mano de obra en los ranchos. No creo que yo vuelva a vivir el Programa Bracero, no creo. A lo menos es lo que yo pienso, quién sabe qué pensaran las demás personas, ¿me entiende? Que una vez dijeron unos activistas, hace poco ahora, ya ve que traen ese cuento ahí. Yo no sé si estará bien o total, que no me ajusta. Bueno mío, no está a mi alcance eso de discutir, pos sabe que hay algunos que tiene otros… Mire que, y luego luego van y buscan a la gente grande pa hacerla que haga… “Mire, que vamos a hacer”. Que había un dinero, según dice que pa los, que estaba reservado pa los braceros, ¿será cierto? No, no me interesa. Según dicen que el Gobierno aquí lo mandó pa allá.
FC: ¿De aquí de los Estados Unidos?
RF: Sí, y allá no sé dónde quedarían. Total, que andan las pobres así, gentes ahí y pos son puras esperanzas que no sé si no tengan fin. Últimamente me acuerdo Víctor Hugo, yo he leído las entrevistas, Víctor Hugo Saavedra le preguntó a un grupo una vez allá, no me acuerdo en qué parte los entrevistó y luego le dijo: “Pos han llegado, pero no, que andan en eso… Son personas que en esa cuestión, que muchos no, pos no tenemos escuela y no sé que. Y me acuerdo que le dijo Victor Hugo a uno de ellos, ahora que estábamos ahí que hasta que, que llegó con ese de los trabajadores agrícolas de aquí de El Paso y al congresista Reyes que iban pa Washington, a la mejor ahí no sé, pos ahí ellos. Y le dijo a Víctor Hugo Saavedra a uno: “Oye, ¿ustedes creen que podrán resolver esta… “Pos mire”. Y se lo llevó hasta el río. “¿Ustedes creen que van a resolver este problema antes de morirse?”. Yo no oí que contestó nada el otro señor.
FC: No dijo nada.
RF: Pos no tienen preparación pa hablar, oiga. Yo no digo que yo tengo, no, pero no contestó nada.
FC: Él no dijo, él.
RF: Dijo: “Oyes”, le dijo, “¿ustedes creen que van a resolver el problema antes de morirse?”. Ya va medio siglo, ya muchos a lo mejor ya se murieron, fíjese. Ya están viejecitos.
FC: Sí, pos ya ve que el programa duró bastante tiempo y pos hubo gente de todas las edades.
RF: Ah y luego estaban unos activistas allá, sabe cómo son los activistas, hombre, muy escandaloso, ¿no? Estaban ahí en California, que les andaban haciendo propaganda al Willy Fargo Bank[Wells Fargo Bank]: “No metan ahí dinero, ¡sáquenlo!”. Que porque ése recogía el dinero. Y luego dijeron que es lo que él quería de los braceros. “No, estamos luchando pa que no den braceros a Estados Unidos hasta que no paguen eso”. Yo dije entre mí, nomás que oye uno las dices. Dice ora: “No, cállese”. Dije: “Hombre, señores no necesitan braceros. ¿Para qué ponen eso si eso ya es una cosa ya del pasado?”. Casi por decir así, ¿verdad?, oiga.
FC: Sí señor. Pos ya tanto, ¿verdad?, tanto tiempo, tanto…
RF: Y luego ya hay maquinaria, mucha maquinaria. Hay maquinaria hasta pa tomate, pa piscar tomate, no sé. Hay pa tomate, pa cebolla y pa ajo y hay hasta pa nogales, maquinaria pa tumbar las destas, las ciruela.
FC: ¿Las nueces?
RF: No, las nueces no sé. Por decirle haiga muchos, no sé si lo harán en California. En California hay unos expertos. Yo conocí un hombre que era socio de una secadora, le subían y le tenía… Pos yo creo ya está muy poblado ahí ya, en aquellos tiempos, ése hacía una secadora, unas máquinas pa la ciruela, que con dos hombre llevaban la ciruela a la planta. Y ya les digo yo… Todo eso fue como el [19]59 cuando yo vi eso. No, la maquinaria esa, pal [19]63, no sé cuándo la inventaron. Ya después yo llegué ahí el [19]63, cuando estuvo allá y me dijo: “Mire”, entramos ahí, “mire, allí donde esta la maquinaria. Ya no necesitamos braceros”.
FC: ¿Le dijo?
RF: Estamos hablando del [19]63: “Ya no necesitamos braceros, con dos hombres traemos la ciruela a la secadora”.
FC: Derechito.
RF: Sí, es que es una máquina muy, muy mecánica, muy moderna. Éste es el árbol, se arrima aquí la máquina así y luego mecánicamente abre unos que dicen delantales o que les dicen en inglés aprons; abre hasta a los lados, chequea ahí y no sé como cai, no se cómo ta… ¡Ah! La máquina esa la recoge y luego esas máquina, ya cuando acaba ese árbol por alguna cadena , como dicen, un chute ahí. Cai a una, lleva un hombre con un jeep, una trailita de caja de fierro no muy alta, ahí la echa. Y luego llega ése allá y luego ya le echa de reversa en un tanque la ésa, donde la lavan con lejía, ese del Jeep y bien ligero.
FC: ¿Y la recoge y se la…?
RF: Sí, y dos hombres nomás, no necesitaban tantos, estamos hablando ya del [19]63, fíjese.
FC: ¿Se imagina? Yo creo que ahora menos, ¿verdad? Ya no…
RF: Menos ya, óigame.
FC: Ya no se necesita tanto.
RF: Y por eso dijeron los activistas. “No”, le digo, “no, vamos a pugnar porque no le den braceros a Estados Unidos, hasta que no paguen este dinero.” Pa mí que esas son cosas casi imposibles. Ojalá se puedan hacer una valla en la agua, es una cosa imposible. ¡Ojalá! Pero yo pos dije: “Pobres señores, ojalá y sea eso”. Pero sabe que hay una cosa que se oye oficialmente de eso, eso nomás cubre del [19]42 al [19]46.
FC: Ah, eso nada más es su…
RF: La esa, según esos ahorros y eso nomás para que los trabajaban en el campo…
FC: Nada más los que trabajaron durante ese tiempo.
RF: Y los que trabajaban en el traque para la agricultura, yo, eso no creo. Pero dice, últimamente sí dijo que es para los que trabajaban en el traque. Entonces ahí entraba, es un trabajo de altura el traque.
FC: ¿Qué es eso del traque, señor?
RF: La vía.
FC: Ah, andar en los… Sí, sí.
RF: En las vías.
FC: En los ferrocarriles.
RF: Eso se dijo acá en las noticias, no sé.
FC: Eso se mencionó aquí pero no se sabía.
RF: Digo, sí, que nomás cubre del [19]48 al [19]46, lo demás eso ya…
FC: Ya los que trabajaron después de ese tiempo ya no…
RF: Y se ha dicho que ese dinero lo mandaron a un banco de México, sabrá dónde pararía, el Gobierno.
FC: ¿No se imagina? A lo mejor ya no vamos a saber de eso.
RF: No, pos ya no vamos a saber.
FC: Pues…
RF: Mande, ¿sí?
FC: Yo le quiero agradecer mucho que nos haya permitido la oportunidad de entrevistarlo…
RF: Pues sí cómo no, me gustaría otra vez y nos entrevistamos para si quiere escribir otras cosas acerca de los activistas. No sé qué tienen esos, yo no sé muy bien, lo único que le digo: “Oye, que… Están locos esos”. Digo, hablan de más y se les entiende poco, ¿verdad?
FC: Así es, sí señor. Pos estaría muy bueno, ¿verdad?, que tuviéramos otra…
RF: Sí, pa otro día, me gustaría escribir acerca de eso.
FC: Déjeme…
RF: Que usted me pudiera…
Fin de la entrevista
Interviewer
Carrillo, Fernanda
Interviewee
Flores, Rodrigo
Location
El Paso, Texas
File Name Identifier
Flores_ELP018
Citation
Carrillo, Fernanda and Flores, Rodrigo, “Rodrigo Flores,” Bracero History Archive, accessed November 23, 2024, https://braceroarchive.org/items/show/84.